Dirigida por Michael Hoffman, Lo mejor de mí está protagonizada por Michelle Monaghan, James Marsden, Luke Bracey, Liana Liberato, Caroline Goodall, Sebastian Arcelus, John Tenney y Gerald McRaney. La película, escrita por Will Fetters y J. Mills Goodloe, está basada en la novela de Nicholas Sparks y producida por Denise DiNovi,Alison Greenspan, Nicholas Sparks, Ryan Kavanaugh y Theresa Park. Los productores ejecutivos son Tucker Tooley, Robbie Brenner, Ron Burkle y Jason Colbeck.

"Eres mi amiga más querida, mi amor más profundo. Tú eres lo mejor de mí" - Dawson Cole

Nunca olvidas tu primer amor verdadero.

No importa quien seas, o de dónde vengas, o dónde has estado, es una de las grandes verdades que todos tenemos en común.

El tiempo puede cambiar a las personas, los caminos se pueden separar, y cosas pueden permanecer ocultas, pero cuando una conexión es profunda nunca olvidas la intensidad de tu amor verdadero. Siempre está el pensamiento de "¿Y si…?" ¿Qué pasaría si nos dieran una segunda oportunidad?

A primera vista, Amanda Collier parece tener una vida perfecta: una casa preciosa, un hijo adolescente cariñoso y educado y un marido exitoso. En realidad, todo esto es una fachada bien construida a la que Amanda se ha acostumbrado, que hace que sea indiferente hacia cualquier otra posibilidad hasta que su pasado irrumpe en su presente. Las circunstancias hacen que se reúna de nuevo con el amor de su vida, Dawson Cole, el chico problemático pero con un gran corazón, al que perdió hace tantos años. O más bien, Dawson la dejó marchar, con las intenciones más nobles, y ha estado anhelándola desde entonces. Cuando una segunda oportunidad para el amor se presenta, ven la oportunidad de reavivar la relación de antaño. Pero el tiempo nunca ha jugado a su favor y el riesgo emocional no podría ser mayor.

Lo mejor de mí es la quinta vez que la productora Denise Di Novi ha colaborado con el autor Nicholas Sparks para llevar uno de sus adorados libros a la gran pantalla, las colaboraciones anteriores incluyen: Mensaje en una botella, Cuando te encuentre, Noches de tormenta y Un paseo para recordar. La película se adentra más profundamente que ninguno de los trabajos previos de Sparks en los temas de la segundas oportunidades y amores perdidos; temas en los que tanto Di Novi como Sparks estaban interesados antes de que se escribiera la novela.

"Había notado en mi propia vida, y en cine y televisión, que a menudo la gente reconecta con sus primeros amores, del instituto o de la universidad, en Facebook o a través de Internet", dice la productora Denise Di Novi. "Así que sabía que tenía algo que ver con el espíritu de nuestro tiempo y, de hecho, Nick y yo lo habíamos llegado a hablar, incluso antes de que escribiera el libro. Así que sabía que era un fenómeno cultural y gracias a Internet era mucho más fácil para la gente el poder reconectar. Personalmente creo que el primer amor te deja una especie de impronta, una intensidad que todo el mundo conoce y es incomparable a amores posteriores. Y después, como en el libro de Nick y en nuestra película, ver si es posible reconectar, después de 20 años, con esos sentimientos tan intensos fue muy emocionante de explorar. Además esa idea nos daba la oportunidad de tener dos grupos de actores geniales, actores adolescentes y actores adultos, y dos historias de amor", explica Di Novi.

La productora Allison Greenspan añade que la naturaleza hipotética del material le atraía. "Cuando leímos el libro, realmente creímos que era algo con lo que nos podíamos identificar. Hay un alto porcentaje de segundos matrimonios que tienen lugar porque hombres y mujeres se reencuentran con alguien de su pasado", dice Greenspan. "Personas divorciadas que navegan por Internet buscando sus amores pasados, viendo qué ha pasado con ellos. Creo que es algo que no llegas a olvidar realmente, siempre te preguntas ‘¿y si…?’ Nos gusta fantasear con la idea de si nos dieran una segunda oportunidad o si hubiéramos estado en un momento y lugar diferente, o en otras circunstancias, ¿habría funcionado? Y esta película responde a eso, de una manera muy emocional, muy conmovedora, muy al estilo de Nicholas Sparks. Creo que es un deseo universal para la gente o por lo menos es algo que se preguntan", comenta Greenspan.

También era un tema con un significado personal para Nicholas Sparks según iba entrando en la década de los 40. "Creo que la historia vino de ese momento específico de mi vida – siempre digo que los cuarenta son una de las décadas más duras", dice Sparks. "Cuando tienes veinte o treinta, crees que todos tus sueños se pueden cumplir. Cuando tienes cincuenta, sesenta o setenta, quizá no, pero probablemente ya has aceptado ese hecho. Así que los cuarenta, es una época en la que tienes este momento, te preguntas ‘¿es ésta mi vida?, ¿he tomado las decisiones correctas?’, y Lo mejor de mí, nació de eso".

Cuando llegó el momento de trasladar la historia del libro a la gran pantalla, Di Novi, Greenspan y Sparks tenían a un solo director en mente: Michael Hoffman.

"Conozco a Michael desde hace 20 años y he sido fan suyo desde su primera película", dice Di Novi. "He intentado trabajar con él en muchas ocasiones a lo largo de los años e incluso he desarrollado un guión con él. Trabaja a un nivel emocional profundo que realmente necesitan estas películas. No tiene miedo a lo sentimental, no tiene miedo al drama y es muy activo con los actores. Hace muchos ensayos. Se mete profundamente en los personajes, en todos los puntos de la historia, y estaba realmente ilusionada por verle aportar todo eso a este proyecto. También estaba tan impresionada con su último trabajo en La última estación que realmente estaba deseando que él hiciera esta película, y no me ha desilusionado, ha creado una historia de amor increíblemente poderosa y conmovedora", dice Di Novi.

Greenspan añade que Hoffman tiene una confianza relajada que se refleja en su naturaleza receptiva. "Es muy colaborativo, está muy seguro de sus habilidades y es muy abierto. Quiere información, quiere saber lo que piensas y tiene la confianza suficiente como para dejarse aconsejar por otros, deja que un productor opine, así como los actores y el equipo. Es genial", explica Greenspan.

La idea del amor verdadero que nos da la relación de Dawson/Amanda, y específicamente el amor verdadero, intrigaba a Hoffman. La pregunta "¿Esa persona que fue tu primer amor es la persona con la que realmente deberías haber estado?", vista a través de Dawson y Amanda desde el momento en que se conocen como adolescentes y después, veinte años más tarde, era interesante para explorar. Creo que todos nos preguntamos eso mismo en algún momento en nuestras vidas", dice Hoffman.

Añade que el que Dawson y Amanda tuvieran familias tan pronunciadamente diferentes, en términos de clase y de cultura, así como de recursos económicos, proporcionó un telón de fondo fascinante sobre el que proyectar su historia de amor y hacía que las consecuencias fueran considerablemente más pronunciadas. "Veía a las dos familias como reinos contrarios. Los Cole, el clan de Dawson, representan un pequeño núcleo de perdición, mientras que la gente de Amanda, los Collier, con su casa y plantación, son la riqueza, tradición y respetabilidad", dice Di Novi.

El gran reto de esta película fue que, en realidad, era dos películas. Era una historia de amor adolescente y era una historia de amor adulto ambienta en la actualidad. Así que fue como rodar dos películas. Fue realmente difícil hacerlo en el tiempo que teníamos pero, al igual que casi todo en la vida, eso también hizo que fuera la mayor alegría. Ver la historia de los jóvenes actores convertirse en una historia adulta fue realmente fascinante, y ver a los actores adultos procesar e interiorizar lo que los actores jóvenes habían hecho en la primera mitad de la película, porque rodábamos sección por sección, fue realmente divertido de ver", dice Di Novi.

Michelle Monaghan fue el primer miembro del reparto que se seleccionó y su papel es la versión adulta de Amanda, cuya vida a tomado unos giros tristes y traicioneros, según se alejan los años en los que era una adolescente despreocupada. "Simplemente nos encanta Michelle y pensamos que era tan radiante cuando la conocimos. Supimos que daría vida a Amanda de una manera que sería fuerte y dinámica, y sin ser severa ni fría. Tiene esta energía luminosa que creímos que se equilibraría con los matices tristes de un amor perdido y una vida emocionalmente difícil", dice Greenspan.

Di Novi añade que Monaghan captura por completo el espíritu de la heroína ideal de Nicholas Sparks. "Creo que es el tipo de mujer corriente que les gusta a las demás mujeres y con quien los hombres creen que se podrían casar. Es hermosa pero tan natural y con los pies en la tierra, es una persona real y eso es lo que necesitas para las películas de Nicholas Sparks. Van de personas de verdad en estas situaciones dramáticas así que los actores tienen que ser personas con las que uno se pueda identificar", explica Di Novi.

Para Michelle Monaghan, eran las cualidades universales de la historia con las que todo el mundo puede conectar lo que le atrajo al proyecto. "Creo que uno de los temas más bonitos, y con los que más se puede identificar uno de la película, es la pregunta sobre el camino no recorrido. Creo que siempre nos preguntamos como adultos cuando miramos hacia nuestro pasado, si hubiera seguido ese camino, ¿qué sería diferente en mi vida? Especialmente la idea de que te den una segunda oportunidad, ¿qué harías si tuvieras esa segunda oportunidad? Eso es lo que tiene que decidir Amanda y eso me intrigaba mucho. Además nunca he hecho una historia de amor antes y esta historia me parecía tan atemporal. Supongo que se podría decir que soy un poco romántica y me enamoré de la historia".

Nicholas Sparks dice que, en cierto sentido, Amanda es el papel más duro de la película y admiraba como Monaghan la interpretó, se metió en ella y la entendió. "Michelle es una actriz tan genial y fue excepcional con este complicado papel. Es a través de Amanda que el público puede sentir su propia vida reflejada. Es Amanda quien ha avanzado desde su amor y ruptura adolescente, mientras que Dawson realmente no lo ha hecho. No volvió a enamorarse, mientras que Amanda se casó y tuvo una familia, siguió las normas de la sociedad, como la mayoría de nosotros. Así que cuando Dawson vuelve a su vida, empieza un recorrido por sus sentimientos pasados, sus recuerdos, sus decisiones y lo que significaban para ella entonces y, más importante aún, lo que significan para ella ahora. El papel es un reto, pero dentro de ese papel creo que el público va a sentir que esta película captura la vida real. Estábamos buscando una actriz que pudiera con todo y Michelle ha hecho un trabajo increíble".

Después viene la versión adulta de Dawson Cole, interpretado por James Marsden, que regresa a la vida de Amanda y la altera por completo. "Simplemente pensamos que James y Michelle conectarían y realmente fue así. Y James es un actor tan bueno y realmente no había hecho un drama romántico. Es tan guapo y es un gran galán y tiene talento para tantas cosas –cantar, bailar – creo que es realmente divertido verle interpretar este tipo de papel. Lo que aporta es un protagonista masculino creíble. Quiero decir, es de Oklahoma, es muy atlético y es creíble como un hombre que trabaja en una plataforma petrolífera. Pero también tiene la sensibilidad y vulnerabilidad para interpretar a un galán romántico", dice Di Novi.

Greenspan también pensaba que Marsden, al igual que Monaghan, era la encarnación perfecta de un héroe de Nicholas Sparks. Por supuesto, Marsden tiene experiencia de primera mano en el mundo de Nicholas Sparks, habiendo trabajado en El diario de Noa. "Tuve la buena suerte de ser parte de una película de Nicholas Sparks en el pasado, lo cual fue una gran experiencia. Respondí a Dawson y su historia, y me encanta el trabajo de Michelle desde hace mucho tiempo. Es una de esas actrices especiales con belleza y profundidad. Es fácil que el romance sea creíble porque te enamoras de ella inmediatamente. Además fue muy divertido trabajar con ella, tenemos una aproximación similar. Hace que sea relajado y divertido, delante y detrás de las cámaras. Lo que hace la película, y lo que hace una película de Nicholas Sparks tan bien, es permitirte que te escapes al mundo de ¿y si…? Nos metemos en nuestro día a día y, como Amanda, podemos perder de vista nuestra alma, nuestro corazón. Sus libros y películas te recuerdan lo que es sentir algo por alguien, que te hagan daño, perder a alguien, todos esos elementos humanos esenciales. Da con ello de una manera tan bonita, inteligente que realmente resuena con todos sus seguidores".

Sparks le devuelve el piropo a Marsden, del que dice es "un actor magnífico que simplemente irradia integridad en pantalla. Eso, para mí, es lo que da vida al personaje de Dawson".

Lo siguiente fue buscar las versiones jóvenes de Amanda y Dawson, papeles que acabaron en las manos de las estrellas emergentes Liana Liberato y Luke Bracey. Di Novi y Greenspan habían trabajado con los dos actores y sabían que eran extremadamente capaces. "Liana, estaba claro que tenía una gran, gran habilidad y sofisticación para su edad, es difícil creer que sólo tiene 18 años, es una actriz con tanto talento y con tan buena técnica", dice Di Novi. "Siempre me emociona encontrar nuevas actrices jóvenes para que luego se conviertan en actrices protagonistas brillantes, desde Winona Ryder en Escuela de jóvenes asesinos o Mandy Moore en Un paseo para recordar, entre otras".

Di Novi y Greenspan acababan de trabajar con Liberato en la película Si decido quedarme, y Di Novi pensaba que Bracey era "un nuevo y emocionante galán que tiene un estilo y atractivo naturales". Los productores tenían la intuición de que Liberato sería una fantástica Amanda y Bracey un maravilloso Dawson, cosa que se confirmó después de su primera lectura juntos.

"Hicimos que seis o siete chicos leyeran con Liana durante una sesión de casting y después preguntamos a Liana, ‘¿Quién fue el más divertido de besar?’ Y ella sonrojada, y quiero decir roja como un tomate, contestó ‘Luke’ Y yo dije, ‘Es obvio porque con vosotros dos saltaban chispas.’ Había algo definitivo con ellos dos. Creo que le asustó un poco en cierto sentido, como podría haberlo hecho un chico un poco brusco, un poco malote, al igual que en la película. Así que supimos que habíamos encontrado a nuestra pareja. Trabajaron muy, muy duro con Michael antes de que empezara el rodaje para dejar claros todos los pequeños detalles y que ambos conocieran a fondo a los personajes. Así que para cuando empezamos a rodar estábamos muy ilusionados por lo que veíamos en pantalla. Liana era un poco como una joven Audrey Hepburn, dinámica, con mucha vida y, a la vez tímida, muy femenina, coqueta, cabezota y determinada con este personaje; y Luke hace de un joven tímido que no tiene mucha confianza en sí mismo hasta que se ve a través de los ojos de ella. No quiero ser cursi, pero los dos sacan lo mejor de cada uno y resultaba evidente en sus interpretaciones", dice Greenspan.

Liberato admite que acosó un poco a Di Novi y Greenspan para obtener el papel de Amanda. "Llevaba un tiempo buscando un proyecto romántico pero quería que fuera el proyecto adecuado. Cuando recibí el guión, supe que era éste y me empeñé en él y no cejé en mi empeño. Le pregunté a Allison y Denise sobre la película CONSTANTEMENTE. Supe que iba a ser muy especial así que lo perseguí. Tenía tanto corazón y todo el mundo se puede identificar con enamorarse por primera vez. Pero lo que es tan genial es que también se centra en el amor más adelante en la vida y en las segundas oportunidades para revivir una relación perdida. Y la idea del destino, definitivamente hay mucho de destino en Lo mejor de mí. Eso es lo que me encanta de la obra de Nicholas Sparks, tiene tanta esperanza y pasión", explica Liberato.

Liberato añade que Bracey le facilitó meterse en su personaje tan sólo con una mirada. "Creo que Amanda siempre está intrigada por Dawson y básicamente mete mano a un coche para que falle la batería y puedan encontrarse. Aunque sean de dos mundos totalmente diferentes, ella tiene una intuición y se enamoran. Pero le lleva un tiempo. Dawson realmente tiene problemas y no tiene nadie en quien confiar ni nadie a quien acudir hasta que esta chica llega a su vida. Luke reflejó mucho de eso con su mirada, que en cierto sentido era ingenua, queriendo explorar el mundo, todo este otro lado de Dawson que no podía decir pero que transmitía tanto con tan solo una mirada", dice Liberato.

Este lazo poderoso entre Dawson y Amanda, que traspasa las barreras de clase y se alarga durante décadas, intriga a Bracey. "Su relación es tan intensa emocionalmente y los riesgos son tan altos para ellos. Nunca había interpretado nada como eso antes y siempre es divertido comprometerse con algo así, ponerte a prueba y ver hasta dónde puedes llegar", dice Bracey.

Disfrutó del reto de interpretar las luchas personales de Dawson para superar una infancia dura y un código casi a lo Hemingway de estilo bajo presión. "Viene de un entorno nefasto, pero creo que es muy diferente a su familia. Lo que le asusta es cuando se ve que en el fondo podría tener más cosas en común con ellos de lo que pensaba. Por supuesto, al final, acaba superando sus circunstancias, es un hombre noble y adorable con un fuerte sentido de lo moral. Le resulta difícil aceptar lo bueno que hay en él. Siente una gran desconfianza hacia la gente por la manera en que le ha tratado su familia, y todo el tiempo que ha estado rodeado de ellos, es casi como si hubiera vivido sólo en ese ambiente, es la única manera que tiene de sobrevivir. Es duro y fuerte y tiene esta rabia interna por su familia pero también es muy sensible y compasivo y considerado, son esas cualidades benévolas, en realidad, lo que le lleva a distanciarse de Amanda en primer lugar. Hay muchas cualidades en Dawson que admiro y después de interpretarle espero haberme llevado algunas de esas cualidades a mi propia vida".

Bracey añade que Liana Liberato ha sido una compañera excelente y que muchas de sus cualidades personales dieron forma a su retrato de Amanda. Para Bracey, un antiguo jugador de rugby, fue como trabajar con la estrella de su equipo.

"Liana es súper mona y tiene una inocencia real y un belleza interna. Es risueña y no hay ninguna maldad en ella y creo que eso se refleja en su interpretación. Tuvimos mucha suerte al contar con tres semanas antes de que empezara la producción, no sólo para ensayar, sino para pasar tiempo juntos, tomando café y dando paseos, conociéndonos. Estoy tan agradecido porque las escenas entre nosotros eran tan intensas y tenían tanto peso. Para poder hacer bien esas escenas, tuvimos que meternos de lleno en ellas. Realmente necesitas a alguien que conecte contigo y trabaje contigo. Fuimos capaces de confiar tanto el uno en el otro, en términos de enfrentarnos a esta historia de amor con tanta sinceridad y honestidad. Realmente queríamos retratar su experiencia para que la gente estuviera de su parte y quisiera formar parte de ella", dice Bracey.

Sparks, que vio algunas de las escenas de Liberato y Bracey en el set, cree que los jóvenes actores supieron captar el espíritu de los personajes que creó. "Hay muchas cosas que hacen que una historia de amor tenga éxito y creo que lo que me atrajo de Luke y Liana fue su química natural. Liana tiene esta energía risueña y puedes ver cómo le atrae, pero al mismo tiempo sientes su fuerza interna. Realmente lo sentí y vi cómo se habían gustado en esas primeras escenas que vi entre ellos", dice Sparks.

Bracey y Liberato se convirtieron en amigos de verdad, Liberato era un espíritu travieso ante un desconcertado Bracey. Como señala Hoffman, esta afable relación se desarrolló a lo largo del tiempo, debido a apoyo que Bracey le dio a su joven compañera de reparto. Su relación detrás las cámaras dio forma a las interpretaciones en pantalla.

"Luke aportó mucho a Dawson. Tiene una masculinidad discreta pero poderosa. Es un actor muy físico pero también listo, un buen narrador, un buen escritor, con talento para la improvisación y muy trabajador. También se preocupa mucho por los demás actores, les apoya y realmente guió a Liana. Era un poco tímida y dubitativa. Siempre había interpretado a la mejor amiga, nunca a la protagonista. Le dio confianza para que se hiciera con su nuevo papel. Simplemente es radiante y graciosa y vivaracha y aportó todo eso a Amanda".

La persona que emerge como el guardián estoico de Amanda y Dawson es Tuck, el dueño de un taller con gran talento para arreglar y restaurar coches clásicos – o en el caso de Dawson, un chico roto con un potencial humano equivalente a un Shelby Cobra. Su muerte o, más bien, su voluntad, hace que los antiguos amantes se reencuentren muchos años después de sus días de instituto.

El actor veterano Gerald McRaney interpreta a Tuck. Denise Di Novi había trabajado con él en la comedia romántica aún por estrenar Focus y tuvo una experiencia maravillosa con él, pero realmente fue su poderosa interpretación en House of Cards lo que llamó la atención de los cineastas.

"Gerald ha sido uno de mis actores favoritos desde hace años, siempre pensé que tenía un extraordinario talento y verle en House of Cards me recordó que realmente es uno de los grandes", observa Di Novi. "Cuando accedió a interpretar a Tuck, descubrimos que era de Luisiana y por supuesto está casado con Delta Burke, así que entendía las raíces sureñas de Tuck y su largo y maravilloso matrimonio con Clara, el amor de su vida. Al igual que Tuck, es un hombre chapado a la antigua, comprometido con hacer lo correcto siempre y necesitábamos a alguien como él para que tuviera la dignidad que exigía el personaje de Tuck. Tuck es uno de mis personajes favoritos de todos los libros de Nick. Es una persona tan sólida, con principios, lleno de valentía y con agallas. Y cuando ve a Dawson, este joven al que maltrata su familia, pero que en el fondo es un chaval con tanto potencial, le acoge y le trata como si fuera su hijo. Y se convierte en una figura paterna para Amanda también, especialmente cuando ve cuánto sufre tras la separación de Dawson y sigue siendo una persona especial para los dos el resto de sus vidas".

House of Cards también llevó a que Sebastian Arcelus interpretara a Frank, el marido alcohólico y distante de Amanda. Mientras que el personaje que interpreta en House of Cards y el de Frank parecen ser polos opuestos, comparten una cosa: las circunstancias que están fuera de su control acaban determinando los caminos que escogen en su vida. Interpretar a Frank de una manera humana, en vez de un villano unidimensional, exigía a un actor muy versátil y sutil.

"Estoy obsesionado con House of Cards. Hice que Michael viera la serie entera", cuenta Greenspan. "Opté por Sebastian porque Frank es un personaje duro. Tienes que saber que su personalidad es un reto y por qué él y Amanda realmente no están hechos el uno para el otro, pero tienes que hacerlo de una manera que sea tridimensional y no estereotipada. Es un actor tan bueno en House of Cards que cuando Michael le vio, también después de ver McRaney, estaba como ‘Vale. Hemos encontrado a nuestro Tuck y hemos encontrado a nuestro Frank.’ Y son fantásticos en la película. Gerald McRaney tiene un exterior tan duro y cuando este chico lo traspasa y toca su corazón, es tan conmovedor pero nada sentimentaloide. Tuck es un tipo muy macho pero se hace querer".

McRaney dice que se sintió atraído por el aspecto "humano" del material, especialmente la relación entre Tuck y Dawson. "Mi profesor de interpretación una vez me dijo que todas las historias buenas, básicamente, van de un hombre buscando un refugio y en este caso es sobre un chico que necesita un refugio desesperadamente, y lo encuentra junto a Tuck. Tuck también necesita refugiarse de otra manera y su propio refugio en Dawson. Cuando Dawson entra en la vida de Tuck, Tuck vuelve a tener una familia y alguien que llena el vacío que dejó su mujer. Necesita al chico tanto como Dawson necesita a Tuck", dice McRaney.

Por supuesto, Amanda no tarda en convertirse en parte de la nueva familia y McRaney interpretó muchas de sus escenas junto a estos jóvenes. "Luke es un talento tan sobresaliente, hablamos bastante. Tiene una cualidad natural encantadora, es un atleta que acabó un poco por casualidad en esta profesión, pero resulta ser muy bueno. Fue tan disciplinado con su trabajo como lo era como jugador de Rugby. Liana me recuerda mucho a mis propios hijos cuando tenían su edad, quieres abrazarla y decirle que todo va a salir bien. Tiene un aire vulnerable y sin embargo su fuerza es evidente. Fue un gran placer trabajar con estos dos jóvenes".

Liberato confirma que McRaney se convirtió en su mentor y apoyo durante la producción. "Gerald fue tan maravilloso, el hombre más perspicaz. Había una escena que me estresaba y no conseguía decir el texto bien, toma tras toma. Él se inclinó sobre mí y puso su mano sobre la mía y asintió y en seguida me calmé. Fui capaz de concentrarme y volver a meterme en la escena. Tenía una presencia tan cálida y tan abierta", recuerda ella.

A pesar de que Tuck pueda ser taciturno, también es cálido y tiene corazón y toma la iniciativa en el cuidado de Dawson y Amanda. En otras palabras, es el polo opuesto de Frank, que está emocionalmente acabado. "Frank y Amanda tienen una relación bastante dañada. A lo largo de los años, después de una tragedia familiar de la que ambos se recuperaron con mucha dificultad, se ha convertida en algo gélido. Frank ha recurrido a la automedicación. Es un alcohólico funcional y el matrimonio ha sufrido por ello. Frank tiene una manera de no estar realmente presente y de no estar atento a las necesidades de su mujer. A primera vista parecen una familia genial, con éxito dentro de la comunidad, Frank es sociable, un buen hombre de negocios que parece ser el alma de la fiesta, pero detrás de todo eso, hay otra cosa y ha pasado factura. No creo que sea un imbécil, creo que lo que les pasa a Frank y Amanda es probablemente demasiado común. Eso es lo que me encanta de esta relación, es muy humana. Y cuando Dawson vuelve, Frank está preocupado por sus propios intereses mientras que Amanda está intentando ser más auténtica. Frank y Amanda tienen que enfrentarse con la realidad en la que se encuentran y tienen que tomar decisiones", dice Arcelus.

El matrimonio tenue pero duradero de Frank y Amanda fue clave en el complicado y delicado reencuentro de Amanda y Dawson. El complejo e íntimo cruce entre las dos parejas fue el tema de largas conversaciones entre Hoffman, Di Novi y Greenspan. "Fue muy complicado porque tienes que tener a Amanda en un matrimonio que no puede ser completamente horrible porque tenía que haber algún obstáculo a la hora de volver a juntarse con Dawson. Eso fue algo en lo que pensamos mucho, Frank no podía ser TAN malo que pensaras que ‘Amanda es una víctima, ¿por qué sigue con él?’ Al mismo tiempo tenías que entender que la relación estaba acabada. Denise y Alison fueron muy listas y nos ayudaron mucho en esto, especialmente ofreciendo una perspectiva femenina. Siempre dirían cosas como ‘como mujer, lo SIENTO’. Eso ayudó mucho y fue una gran colaboración", dice Hoffman.


Llevar Lo mejor de mí del papel a la gran pantalla
Para traducir la novela de Sparks al lenguaje cinematográfico, Hoffman decidió centrarse en la historia de amor entre Amanda y Dawson y darle más peso a las versiones jóvenes que el que tienen en el libro. Consultó con Sparks a lo largo de todo el proceso, pero se apoyó sobre todo en Di Novi y Greenspan a la hora de crear la película. En el proceso, el libro de Nicholas Sparks se convirtió en la película de Michael Hoffman.

"Creo que la teoría de Nick es que los cineastas que adaptan sus libros invariablemente van a hacer cosas que son ligeramente distintas pero fue muy, muy colaborativo con todo. Le llamé un par de veces y siempre fue de gran ayuda. Denise y Alison han hecho muchas de estas películas y son muy listas sobre lo que hace que una película de Nicholas Sparks funcione. Denise, en concreto, tiene un instinto tremendo en cuanto a los personajes y teníamos muchos sentimientos y experiencias sobre el matrimonio y el fin del matrimonio. Hablamos mucho sobre cosas que influirían en la relación de Frank y Amanda y Amanda y Dawson y cómo llevaban su relación mientras ella seguía casada. Creo que Denise y yo aportamos mucho de nosotras mismas a la obra. Tanto nuestros desengaños en cuanto al amor y el romance como lo que el amor puede ser o llegar a ser. Así que acabó siendo una película mucho más personal para mí de lo que me había imaginado en un principio", reflexiona Hoffman.

Hoffman dedicó mucho trabajo a las dos versiones de Amanda y Dawson antes de comenzar el rodaje, para dar forma a los rasgos físicos y emocionales y los detalles que cada generación comparte y explora. "Una de mis grandes ansiedades en cuanto a la película fue cómo tomar dos personajes y un reparto de cuatro actores diferentes para interpretarles, dos a los 18 y dos a los 40, y hacer que fuera creíble que fueran las mismas personas. En un momento dado hablamos mucho sobre los detalles y los comportamientos, y al final nos relajamos un poco con todo eso y dejamos que la historia y las interpretaciones fueran lo convincente. Y lo fueron. Michelle y Liana se parecen bastante, pero James y Luke se parecen menos físicamente. Sin embargo, James encontró este comportamiento autocrítico que Luke adoptó y realmente te convence de una manera auténtica de que son la misma persona".

Fue este énfasis en la autenticidad lo que atrajo a Monaghan, que comenta "Nuestro director, el amado Michael Hoffman a quien adoro, estaba tan implicado en el material y es un cineasta con tanto talento. Puede ser difícil adaptar una novela a una película con la que te puedas identificar y se empeñó en basarla en momentos que fueran reales. Hizo un trabajo precioso, fue muy amigable con los actores y estuvo siempre disponible para todos nosotros".

Monaghan y Liberato encontraron un detalle físico de Amanda que usaron como punto de referencia. "Liana y yo nos sentamos a tomar café un día y hablamos sobre quién era el personaje y ciertas costumbres que pudiera tener a lo largo de todo. A Liana se le ocurrió esta cosa nerviosa que hace tocando su collar y lo usamos". Dice Monaghan.

Aún así, jugar con ese collar no era un artificio sino que pasó orgánicamente, después de que Liberato se diera cuenta de que lo hacía cada vez que Amanda se encontraba en una situación estresante. "En cuanto me di cuenta de eso, le mandé un mensaje a Michelle y empezó a usarlo cuando interpretaba a Amanda. Fue como pasarle algo importante y ella lo manejó con mucha gracia, fue increíble ver cómo lo incorporaba".

Marsden añade que, en general, pasar tiempo con Bracey y conocerle mejor antes de que las cámaras empezaran a rodar realmente les ayudó a los dos a crear a Dawson. "Luke es un tipo genial y nos juntamos unas cuantas veces antes de empezar a trabajar en el dialecto y las peculiaridades, pero sobre todo para asegurarnos de que estábamos en la misma onda, en cuanto a de dónde viene este hombre. No queríamos obsesionarnos tanto con los detalles, como tener que coger el lápiz con la mano izquierda o rascarme la cabeza con la mano derecha. Estábamos más interesados en lo general. Luke tiene esta voz grave tan genial y pusimos nuestras voces en el mismo registro, pero se trataba más de la mentalidad del personaje, de lo que haríamos en esta o aquella situación. Ambos estuvimos de acuerdo en que es un chico con buenos valores, independientemente de su orígen, y cómo usa esa decencia interna es clave. Fue genial hablar con Luke y Michael de eso, a veces esos son los mejores ensayos".

Desde luego, algunos de los mejores momentos no estaban escritos sino que los inspiró el material y la química entre el director y sus actores. "Ciertas cosas las descubres sobre la marcha. Había una escena importante entre James y Michelle donde ella por fin le dice a Dawson por qué está tan enfadada con él. Tuvimos problemas encontrando la manera de hacerla simplemente con el texto y estábamos muy cerca del día de rodaje. Pero para ensayarla, después del rodaje de otro día, nos dejaron en la cabaña de Tuck, tenía haber luces pero no las había. Así que estaba oscuro. Probamos la escena en la oscuridad y cuando lo rodamos, funcionaba a la perfección", dice Hoffman.


Montando la escena: El mundo de Lo mejor de mí
La cabaña de Tuck es un hito para Amanda y Dawson, un lugar seguro donde su amor nace y, después, renace. Además de ser la casa de Tuck, representa el terreno intermedio entre los Cole y los Collier, donde Amanda y Dawson empiezan a definir quienes son como individuos y como pareja, independientes de su familia. "La casa de Tuck simboliza la integridad, simplicidad, honor, masculinidad y todo ello de una manera muy positiva. Su lugar en la comunidad es el jardín es, literalmente, un amplio espacio donde su amor puede crecer", dice Hoffman.

La cabaña de Tuck también es el último vestigio de la relación de éste con el amor de su vida, su mujer Clara. Su esencia se siente en especial en el jardín, particularmente en la camelia que acaba representando el gran amor entre Amanda y Dawson. El jardín, que se convierte en un objetivo común, es una gran parte de su relación, como jóvenes y después también, según los antiguos amantes empiezan a reconectar después de tantos años separados. Afortunadamente, los cineastas encontraron la localización perfecta para construir de cero los sets. Lo mejor de mí se rodó en localizaciones a las afueras de Nueva Orleans y, paradójicamente, las aún terribles consecuencias del huracán Katrina ayudaron a la producción.

"Siempre pensamos que el jardín de Tuck debía estar aislado, tenía que ser un refugio lejos de la locura del resto, que debería tener un toque femenino porque es donde iban Tuck y Clara, y hay huellas de ella por todas partes, en cuanto a la decoración del jardín y pequeños toques y tendría una energía femenina y sería un símbolo de amor. Así que cuando buscábamos, había mucho que tener en cuenta, y encontramos esta casa que había sobrevivido al Katrina que estaba muy dañada por el agua, pero que en cuanto al resto era perfecta. ¿Tenía un lago? Sí. ¿Un muelle? Sí. ¿Terreno para plantar un jardín? Sí. ¿Árboles hermosos? Sí. Pero se estaba desmoronando. Así que tuvimos que rehacer los suelos, pintar las paredes que se estaban pelando y llenando de moho, restaurar la chimenea y hacer que fuera un lugar cálido y acogedor. Fue una gran labor de restauración", dice la productora Alison Greenspan.

Afortunadamente, esa gran labor de restauración se dejó en manos de la legendaria diseñadora de producción Patrizia von Brandenstein. Lo mejor de mí es su cuarta película con Hoffman, a quien le encanta su trabajo. "Patrizia es un genio. Es excepcionalmente buena usando los detalles para crear espacios realmente creíbles, donde sientes al personaje. Realmente sientes que la vida de Tuck está en esa casa. Sientes a su difunta esposa. Patrizia es una verdadera artista. Es muy lista en cuando al uso de los tejidos, sabe cómo van a reflejar las luces. Sabe el efecto que van a tener, cómo va a transmitir cierta tristeza en la habitación".

Captar la estética de una historia de amor a lo largo de décadas le resultaba atractivo a von Brandenstein, y también la localización cerca del agua. Para ella, estos dos aspectos estaban íntimamente ligados. "La oportunidad de contar una historia doble a lo largo de un periodo amplio de tiempo siempre es un reto pero interesante. Me encanta Luisiana y su topografía, era mi tercer proyecto ahí, y sentí que la historia estaba conectada al paisaje de una manera muy potente. Usamos elementos de la naturaleza a la hora de representar las raíces del amor, que son increíblemente difíciles y dolorosas de desenraizar. No podrías desenraizar un roble con una cucharilla, ¿a que no? Estábamos rodeados, la mayor parte del tiempo, en nuestra historia, por árboles enormes y vegetación y agua que se movía lentamente, a lo largo del tiempo. Es interesante porque el paisaje ha pasado por algunos cambios, quizá a lo largo de cien años, pero no muchos. Así que usamos eso temáticamente", dice.

El equipo de von Brandenstein entretejió las estructuras físicas con el mundo natural para subrayar la conexión atemporal y orgánica, como la de la relación de Amanda y Dawson. "La complejidad de la tierra y los edificios se entretejió e incorporó a la historia. Adoraba el gran amor entre Tuck y su difunta esposa Clara, que luego pasa a una pareja joven, que a su vez se convierten en una pareja mayor que se separa, reencuentra y el gran ciclo de la vida continua. La cabaña de Tuck es emblemática. En especial disfruté de la idea de ambientar este lugar tan especial en un pantano. Me encantaba la idea de la isla de este mecánico y su mujer, que habían estado casados durante no se sabe cuánto tiempo antes de la muerte de ella, pero que fueron capaces de crear un paraíso personal; no el paraíso o idea de paraíso de otra persona, pero su propia idea del paraíso que les nutría y les daba vida. Amanda y Dawson usan ese mismo espacio para fortalecer su amor y enfrentarse a su separación. Han encontrado la felicidad ahí. Quería que se sintiera el paso del tiempo y las cualidades duraderas del lugar. Es un lugar idílico y nos vino de maravilla".

Von Brandenstein confirma que "El lugar estaba abandonado cuando lo encontramos. Había sido el hogar de un traficante de pieles del siglo XVIII y tenía una historia propia. Transformamos un lugar totalmente destrozado en nuestro propio paraíso para amantes".

Von Brandenstein intentó usar el mundo natural, particularmente los enormes árboles llenos de musgo, tanto como fuera posible, y la camelia roja que se convirtió en un símbolo especialmente importante para los amantes. "La camelia representa el amor y la conexión entre Amanda y Dawson. Es el único uso que hacemos del rojo en la película y es muestra del uso excepcional que hace Patrizia del color y textura para demostrar algo de manera sutil", dice Hoffman.

Otra localización importante fue la casa de los Collier, situada en una plantación de verdad, una de las seis que sobreviven en Terrebone Parish. Con su amplio jardín, el porche, la regia escalinata, altos techos y ventanas y flanqueada por árboles llenos de musgo, transmitía la idea de riqueza y el estatus de la familia de Amanda, un fuerte contraste con los orígenes humildes de Dawson. Representaba una experiencia real de Luisiana de más maneras que las obvias; en un día caluroso, un residente local decidió visitar la producción: un caimán de dos metros cruzó el jardín de atrás, trayendo su comida, un jabalí, en su boca. La casa Collier también se convirtió en el sitio de un beso muy significativo entre los enamorados, la escena romántica resultó incluso más épica porque Hoffman la rodó de noche sobre un tejado durante la llegada de una estruendosa tormenta típica de Luisiana.

El director de fotografía Oliver Stapleton fotografío los hechos en formato panorámico, optando por un look anamórfico, usando la cámara digital Alexa. Él y Hoffman también crearon un look de cámara en mano, optando por unos planos más clásicos. "Oliver es un gran colaborador, fantástico en sus relaciones con el equipo y los actores. Tiene mucha sensibilidad para la historia, que es muy importante para mí. Todos los días, nos preguntábamos, cuál es la toma que expresa el tema de la película; fuimos muy duros con nosotros mismos para intentar encontrar algo que no simplemente ilustrara el diálogo sino que compusiera una imagen que expresara el valor narrativo de ese momento en la película", dice Hoffman.

Lo mejor de mí es su quinta colaboración, la primera fue en 1984. Por ello Stapleton, un afable británico con un sentido del humor irónico, comenta: "Hay mucha inmediatez y flexibilidad. Hemos llegado a convertirnos en una máquina bien engrasada, y con alguna que otra tara". Stapleton señala que el uso del anamórifico, con su profundidad de campo y amplitud, con más separación entre el fondo y el primer plano, su juego único de luces y sombras, no era un truco sino una manera de darle a la película un aspecto naturalista, un componente crítico en la muy definida cinematografía digital. "El motivo para rodar así, especialmente en digital, es para crear una imagen que imite el comportamiento del ojo humano de forma más natural, con su foco central, y un movimiento ligero definido hasta los bordes", explica.

Añade que la "obsesión" actual con la fotografía de cámara en mano es porque crea una imagen total bastante estable, la cámara en movimiento, según él, es una reacción este look estático, un intento artificial para añadir "vivacidad" a la imagen. "Ni a Michael ni a mí nos entusiasma la cámara en mano, excepto cuando se usa de una manera muy controlada. Una buena fotografía trata de contar una historia de una manera precisa que permite que la interpretación de los actores se ‘vea’. Un cuidado uso de la cámara, elección de la lente e iluminación es lo que hace que la interpretación llegue al público y ese era nuestro objetivo principal".

Después de que concluyera la fotografía principal y cuando Hoffman estaba editando la película, otro grupo de compañeros se unió al equipo: Charles Kelley, Hillary Scott y Dave Haywood, mejor conocidos como el influyente y galardonado grupo de música country Lady Antebellum. El trío atraído por los temas de amor atemporal y segundas oportunidades de la película, contribuyó con el tema I DID WITH YOU.

Estrechamente relacionada con los temas de la película, I DID WITH YOU es perfecta para la producción de Lo mejor de mí. Para Hillary Scott de Lady Antebellum, la canción y la película juntas tratan de ese momento "cuando encuentras a la persona con la se supone que debes estar, tu alma gemela, hay partes de esa persona que desearías tener tú también y es estando los dos juntos lo que hace que saquéis lo mejor el uno del otro".