Un empresario estadounidense (Tom Hanks) viaja a Arabia Saudí para cerrar un trato con el que espera darle un giro a su vida. El choque de culturas es más que evidente: las costumbres locales le resultan desconcertantes y la burocracia, impenetrable. Finalmente serán un taxista ingenioso (Alexander Black) y una bella doctora saudí (Sarita Choudhury) quienes le ayudarán a entender el país.
Sinopsis larga
En 2010, con los efectos de la recesión todavía muy presentes, el empresario ALAN CLAY (Tom Hanks) está arruinado, deprimido y recién divorciado, pero acaba de aterrizar en Yeda (Arabia Saudí) para cerrar un trato con el que espera darle un giro a su vida. Su misión: vender un avanzadísimo sistema de teleconferencia por holograma al gobierno saudí.
Solo y desorientado en esta tierra desconocida, Alan hace buenas migas con YOUSEF (Alexander Black), el taxista que le lleva hasta la "Metrópolis Real de Economía y Comercio", una cuidad fantasma surrealista repleta de rascacielos deshabitados y edificios a medio construir en medio del desierto. El recibimiento burocrático que le aguarda en el "Centro de Bienvenida" le desconcierta casi tanto como encontrarse a su equipo de informática hacinado en una tienda de campaña, preparando su gran presentación sin aire acondicionado. Por si eso fuera poco, después de tantas idas y venidas, tampoco le queda muy claro si el rey va a hacer acto de presencia en la reunión.
Al volver a Yeda, un estresado Alan acaba en el hospital, donde le trata una bella doctora musulmana llamada ZAHRA HAKEM (Sarita Choudhury). Poco a poco, el empresario va entendiendo la cultura del país a través de sus nuevas amistades, tanto que comienza a plantearse la posibilidad de empezar de cero en un lugar donde tradición y modernidad se dan la mano de formas sorprendentes e inesperadas.