FESTIVAL DE MÁLAGA. CINE ESPAÑOL (SECCIÓN OFICIAL A CONCURSO).
LOS HÉROES DEL MAL está dirigida por Zoe Berriatua y protagonizada por Jorge Clemente, Beatriz Sánchez Medina, Emilio Palacios y Macarena Gómez.
Memoria del director
Los héroes del mal no es un thriller, no es exactamente cine social, es un drama romántico sobre la adolescencia, sobre el descubrimiento del amor, del sexo, de la madurez y del dolor que conlleva ese cambio.
Es una película dulce y cruel, arriesgada por su tema y por su tono, habla del momento más complicado en la vida de todas las personas, la adolescencia.
Todos estos temas están engarzados a través del conflicto de los criminales menores de edad y el uso de la violencia.
La violencia significa para los personajes un arma para defenderse, en primer lugar contra los abusones de su instituto, y en segundo lugar contra ellos mismos. Pero cada vez que deciden ejercerla se convierten en algo peor que aquello de lo que se están defendiendo.
El conflicto que propone la película es una paradoja moral, como su mismo título indica: ¿Los héroes del mal terminan siendo héroes o criminales?
¿Están los adolescentes fuera de la ley?
Lo que se pretende es hacer reflexionar al espectador, que descubrirá y decidirá respuestas a medida que acompañe a los personajes. No damos respuestas, si bien el final está más que sugerido, el espectador podrá sacar sus propias conclusiones.
Sin ser autobiográfica, esta película parte de vivencias personales de la adolescencia del director, quien tuvo amistades conflictivas en su juventud.
En todo momento queríamos que la violencia no fuera pornográfica, hemos tratado de ser elegantes con lo explicito, el tono de esta película es dulce a pesar de su tema.
Esta historia está plagada de tópicos, el abusador, los adolescentes violentos, el triángulo amoroso... y debe ser así. la originalidad reside en la forma de tratar el tema, cruda e inesperadamente natural.
El tono de la película es singular. Puede recordar al cine de Larry Clark, a "Fucking Amal" de Lukas Moodysson, a "Dear Wendy" de Thomas Vinterberg... mezclado con un musical o un ballet. Para nuestra sorpresa, el referente más nombrado al ver la película ha sido "La naranja mecánica" por la mezcla de música clásica con violencia. Aunque su director piensa más en... es como "Los juncos salvajes" pero más salvajes.
La película narra con alegría la libertad que viven estos adolescentes al robar, al reducir a golpes a sus enemigos, al emborracharse a punto de caerse por un tejado, al perder la virginidad en un trio... pero también narra con tristeza el dolor del desamor, la pérdida de la infancia y la angustia de haber cometido un crimen o el deseo del suicidio.
La música
La puesta en escena de la película está diseñada desde el punto de vista de los adolescentes; la música de la película es épica, romántica y voluptuosa, tiene la intensidad emocional con la que un adolescente siente su vida.
Los compositores elegidos son diez de los mejores músicos de la historia: Khachaturian, Prokofiev, Kabalevsky, Shostakovich, Britten, Sibelius, Telemann, Vivaldi, Purcell y Gorecki.
El director y autor del guión, Zoe Berriatúa, escribió el guión midiéndolo para que coincidiera con la música de la película en varias secuencias y estuvo retocándolo y elaborándolo desde el 2007.
El equipo
Ésta es una película de descubrimiento: no sólo por la temática adolescente sino también por el equipo técnico y artístico: Es la primera película como protagonistas de Emilio Palacios, Beatriz Medina y Jorge Clemente. (Quien rodó esta película antes de El club de los incomprendidos.)
También es la primera película de su director de fotografía Iván Román, Alex Marais en el sonido y de Zoe Berriatúa como director.
Hemos podido levantar esta película con un planteamiento de producción austero pero seguro, gracias a la unión de tres productoras: Pokeepsie Films (Alex de La Iglesia y Carolina Bang) Nadie es Perfecto (Kiko Martínez) y La Bestia Produce (Zoe Berriatúa).
El director (por Zoe Berriatúa)
Zoe Berriatúa, ha dirigido una decena de cortometrajes desde hace 15 años cosechando numerosos premios internacionales.
"No se puede hacer buen cine cuando una película es social para ganar subvenciones, y descafeinada, complaciente, para todos los públicos, para poder venderla a las cadenas de televisión. Si esos apoyos llegan, no ha de ser a costa de la integridad de la película.
Esa es una diferencia habitual entre el cine "europeo" y el español.
El cine español ha de ser cine destinado a ser visto, a ser disfrutado, no a obtener beneficios antes de su estreno, ha de ser cine por encima de sus motivos de financiación.
Esta película no es para todos los públicos, no tiene un final feliz ni un tono complaciente. No puede tenerlo, por coherencia con su tema y su naturaleza.
He tenido la suerte de poder rodar la película que a mí me gustaría ver."
Zoe Berriatúa
Memoria de Alex de la Iglesia como productor de la obra
En principio, pensé que se trataba de un proyecto imposible. No parecía viable reunir un casting de adolescentes con la calidad interpretativa suficiente como para sostener el peso específico de la historia. Cuando me reuní con Zoe, le lancé la bomba:
-No se puede hacer. Nunca encontrarás a los actores. Tan jóvenes, no.
Afortunadamente para todos los que estamos aquí, no me hizo caso. Zoe empezó la película él mismo, sin medios, sin presupuesto, pertrechado únicamente con esa mochila que le acompaña desde niño: la inagotable fuerza de voluntad que le ha empujado hacia adelante, la energía que arrastra a todos los que nos dedicamos a la profesión. Esa energía se llama ilusión, una ilusión devastadora, incombustible. Zoe consiguió lo imposible, reunir un elenco de actores perfecto, un grupo de adolescentes noveles con un talento desbordante que llenan de vida los personajes de su guión.
Cuando ví la primera versión del montaje no daba crédito, y tuve que tragarme mis palabras. Zoe es un director increíble y ha conseguido algo sorprendente, inaudito. Un jovencísimo reparto con las tablas de verdaderos profesionales. Su trabajo de dirección de actores es excepcional. Las secuencias cobran vida y te arrastran a un mundo poblado de alegrías, miedos, angustias, terrores. El mundo de la adolescencia real, no esa cosa pastosa y engominada a la que nos tienen acostumbrados los productos comerciales habituales. En Los Héroes del Mal tenemos la oportunidad de asomarnos a una ventana que nos muestra un paisaje desconocido para el espectador de cine.
La adolescencia es un terreno abonado para cosechar películas, pero ahora estamos más acostumbrados a recoger patatas. Las películas de adolescentes nos abruman con su falta de respeto hacia la juventud, a la que se considera como un objetivo comercial, o algo peor, un panda de estúpidos fáciles de manipular. En este caso Zoe tiene la valentía de ofrecernos una película de jóvenes, para jóvenes, sin trucos. Zoe ha vivido cada momento, y se nota. Desde los "400 golpes" no tenía la sensación de vivir algo tan auténtico. Y los responsables no sólo son los personajes, sino también las situaciones, los diálogos, la puesta en escena.
Ese Madrid desconocido de callejones grises y escombros negros sobrecoge por su áspera cotidianeidad y por su falta de una aparente estética. No veo líneas impostadas, subrayadas. La historia cruel de esos niños fluye con soltura en la narración sin que nadie la empuje en un sentido o en otro. No hay manipulación, y eso ayuda a entender sus motivaciones, la salvaje sinceridad con la que se enfrentan los sentimientos más atormentados.
Cuando uno es joven sufre infinitamente porque todo es nuevo, incluído el mismo dolor; y en estos tiempos que corren, más que nunca: todos necesitamos a alguien que nos explique qué es lo que está pasando. Los supuestamente adultos no entendemos nada, compartimos nuestra ignorancia con hipocresía. Los jóvenes, sin embargo, sólo se tienen a ellos mismos. No hay padres, ni "gente mayor" en la película, como tampoco están presentes en sus vidas; salvo quizá para controlarlas.
Zoe, un tipo culto y reflexivo, no sólo está obsesionado con la música de Britten, Prokofiev, Kachaturian, Shostakovich o Kabalevsky, ha leído a Schulz y su Charlie Brown, tristes niños sin adultos, que luchan por sobrevivir en un universo en blanco y negro. También están Trouffaut,Chabrol, Bresson, Malle, y su presencia no convierte la historia en un discurso fotocopiado, al revés, resucita su espíritu sin sacarlos de la tumba, con la frescura de algo nuevo.
Hoy más que nunca, donde todo se disfraza y nadie dice lo que siente, necesitamos una película como ésta. Algunos dirán que se trata de una de ésas, de adolescentes en un instituto. A mi me parece una película sobre la imposibilidad de amar en un mundo de locos, un concierto de ruido que nos abruma con sus aullidos. Igual tendremos la ilusión de ser amados y conocer a un amigo. Esa ilusión nos acompañará, con suerte, el día de nuestra muerte.
Me siento orgulloso de haber ayudado a que Los Héroes del Mal esté ahora, en este Festival.
Ficha artística
Esteban: EMILIO PALACIOS
Aritz: JORGE CLEMENTE
Sarita: BEATRIZ MEDINA
Prostituta: MACARENA GOMEZ
Los héroes del malDirigida por Zoe Berriatúa