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Trolls cartel reducidoTrollsDirigida por Mike Mitchell, Walt Dohrn
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De los creadores de Shrek llega la película de DreamWorks Animation Trolls. Utiliza la música para sostener la narrativa de la película; la banda sonora de la película está producida por Justin Timberlake, que trabaja también como productor ejecutivo de música, y cuenta con canciones del propio Justin Timberlake, Gwen Stefani, Anna Kendrick y Ariana Grande, así como varios clásicos de la época de los 60, 70 y 80 versionados por miembros del reparto.

TROLLS cuenta con un reparto estelar, que incluye a Anna Kendrick, Justin Timberlake, Christopher Mintz-Plasse, Russell Brand, Zooey Deschanel, Jeffrey Tambor, Christine Baranski, James Corden, Kunal Nayyar, Ron Funches, Icona Pop, Quvenzhané Wallis, John Cleese y Gwen Stefani.

La película también expone un mundo único inspirado en fibras, materiales de terciopelo, pelaje, purpurina y colores brillantes. Los espectadores se verán envueltos en este universo táctil y atractivo, que no se parece a ninguno visto antes en el cine. Los productores lo llaman una "inmersión peluda".

Y luego están también los peinados de colores brillantes, que tienen un tamaño que desafía a la gravedad. Se trata del sello de identidad y la mayor gloria de todos los Trolls.


Encuentra tu lugar feliz
Los más pequeños disfrutarán del mundo único de TROLLS, repleto de inolvidables personajes, música, humor, aventuras y color. Y a los mayores les hará reflexionar sobre el tema general de la película: la búsqueda de la felicidad.

En efecto, el mundo de abrazos, bailes y cantos de los Trolls es pura felicidad, que rezuma en cada fotograma de la película. TROLLS habla de la manera en la que nos tratamos los unos a los otros y, lo que es más importante, cómo nos tratamos a nosotros mismos. Su mensaje, cargado de emoción, es que la felicidad sale de dentro y puede ser una fuerza poderosa y contagiosa cuando se extiende.

Es una idea poderosa e importante, especialmente en el mundo actual, en el que la negatividad, el miedo y la desigualdad tienen tanto protagonismo. La historia de TROLLS sugiere que cada uno de nosotros puede traer cambios a través de acciones y pensamientos positivos, a la vez que hace hincapié en la importancia de hacer lo correcto, incluso —o especialmente— cuando nos enfrentemos a grandes desafíos.

La felicidad era la prioridad del director de TROLLS, Mike Mitchell, y el codirector Walt Dohrn, incluso durante las primeras fases de las discusiones sobre la historia con los guionistas/coproductores Jonathan Aibel y Glenn Berger y la productora Gina Shay.

Los dos cineastas trabajaron juntos en la exitosa franquicia de DreamWorks Animation Shrek, por lo que los conocimientos que tenían sobre los queridos ogros y su mundo se trasladaron a sus primos lejanos, los Trolls.

La investigación que llevaron a cabo sobre la tradición troll, que tiene origen en la mitología escandinava, reveló que los trolls eran de un sinfín de formas y tamaños, desde gigantescos monstruos a diminutas criaturas que concedían deseos. Igual que hizo DreamWorks con Shrek, Mitchell y Dohrn decidieron adaptar la mitología de los trolls para crear un nuevo universo y nuevos personajes.

Los productores apuntan que adoptaron un aspecto de una historia anterior sobre trolls. "Nos encanta cómo, en origen, estas criaturas eran feas y aterradoras y evolucionaron con el tiempo para convertirse en criaturas feas pero adorables", explica Mitchell. "En los años 70 se convirtieron en un símbolo de la felicidad".

Dohrn añade: "Su sencillez y sus imperfecciones resultaban familiares y hacían que la gente se sintiera bien".

A medida que continuaron con su investigación sobre el mundo troll, Mitchell y Dohrn se centraron en el tema de la felicidad y el optimismo, y las ideas empezaron a surgir.

"Esas ideas nos convencieron, al igual que la oportunidad de crear una historia y una mitología desde cero", explica Dohrn. "Decidimos que era el momento de empezar a difundir de nuevo un poco de alegría. Mike y yo teníamos un papel en blanco, desde el que podíamos crear cualquier cosa con los personajes, la historia y los entornos. Con la felicidad como referencia, queríamos crear una película con una mezcla de diversión, aventuras, corazón, música, color y texturas".

Según la productora, Gina Shay, otra antigua alumna de Shrek de Mitchell y Dohrn, en muchos aspectos, TROLLS recuerda a la década de los 70, una época "en la que existía ese sentimiento de libertad; la música disco, pop y dance estaban por todos lados; y todo el mundo parecía ser patinador. Queríamos que los Trolls reflejaran esa felicidad en su sociedad. Además, son muy pacíficos".

Los Trolls tienen incluso un reloj especial que les recuerda que tienen que abrazar a cada hora en punto. Da igual lo que estén haciendo; cuando toca el reloj, es la hora de los abrazos. Mitchell apunta: "Una parte de ser feliz es conectar con otros, y qué mejor manera de mostrarlo que con un abrazo".

"Por otro lado, los vecinos de los Trolls, los Bergens, no son ni coloridos ni pacíficos", señala Shay. "Así que los Trolls deben intentar aplicar ese sentimiento de los 70 a los Bergens y enseñarles que la felicidad sale de dentro y que la puedes encontrar de muchas maneras diferentes". Y no es una tarea fácil, porque los Bergens carecen de armonía y alegría y sólo pueden encontrar la felicidad a través de medios visibles más dañinos. No tienen mucho control sobre su felicidad y es menos satisfactoria cuando la consiguen.


Comienza la aventura
Con el tema de la felicidad en su lugar, Mitchell y Dohrn empezaron a esbozar la historia. Consiguieron contar con la ayuda del equipo de guionistas Jonathan Aibel y Glenn Berger, que ya fueron los arquitectos de otro universo de cine de animación: las tres exitosas películas de DreamWorks Animation de Kung Fu Panda. Para Berger, este nuevo encargo fue "un verdadero cambio de ritmo y mucha diversión". Aibel añade que "el mayor regalo para nosotros como escritores en TROLLS es su misma premisa. Empezamos a trabajar con el personaje más optimista y el más pesimista del mundo y los lanzamos a este viaje".

TROLLS comienza, como no podía ser de otra manera, con una nota alegre, describiendo cómo viven los Trolls para cantar, bailar y abrazar; bailar, abrazar y cantar... en fin, se entiende la idea.

Después de una historia de fondo repleta de acción en la que vemos el heroico rescate del Rey Peppy (Jeffrey Tambor) de su pueblo, que había sido capturado por los Bergens, y el establecimiento del nuevo hogar de los Trolls en el bosque, conocemos a la hija de Peppy, Poppy, que comanda una celebración porque... ¡les encantan las celebraciones!

Desafortunadamente, la juerga ininterrumpida de Poppy y los Trolls atrae la atención de los Bergens, y el periodo de libertad de veinte años que han disfrutado llega a su fin cuando la maquinadora Bergen Chef (Christine Baranski) secuestra a los amigos de Poppy y se los lleva a Ciudad Bergen.

Sin nadie que pueda ayudarle, Poppy pide ayuda al único Troll que sabe cómo encontrar Ciudad Bergen, el siempre preparado, excesivamente cauto e infeliz Branch (Justin Timberlake). Branch es el único Troll que no canta ni baila y nunca jamás da abrazos.

Para rescatar a los amigos de Poppy de un destino fatal, Branch y Poppy deberán viajar al peligroso mundo de los Bergens. Por el camino, Poppy y Branch se encuentran con los obstáculos más impensables. En un momento crítico, el poder del pensamiento positivo parece fallarle a Poppy, que se desespera y pierde la voluntad. La negatividad, como la felicidad, es contagiosa, así que cuando Poppy flaquea, también lo hacen sus amigos. Y la responsabilidad de devolver la felicidad a los Trolls recae sobre el miembro más insospechado.


Poppy y Branch: Cuando los opuestos chocan
Cuando conocemos a Poppy, es una Troll siempre optimista, que encuentra la inspiración dentro de sí misma. Es la máxima suministradora de positividad. Más aún, es una chica con facultades, capaz y segura de sí misma, fuerte y resolutiva, colaboradora e integradora.

"Poppy es lo contrario a cualquier princesa que hayamos visto antes", afirma Mitchell. "Además de su capacidad de liderazgo, tiene una ventaja poco convencional, que queda patente con la ayuda inestimable de Anna Kendrick. Shay añade: "Anna es un poco escéptica, así que fue maravilloso que tuviera que aportar esa dignidad, esa profundidad y esas capas a Poppy".

Las cualidades únicas de Poppy también incluyen su apariencia, con la que Shay se siente identificada. "Como cineastas, creo que es nuestra responsabilidad crear personajes memorables que no hagan que las chicas se sientan mal con su propio cuerpo. Rompimos todas las reglas de las princesas con este personaje, ya que hicimos a los Trolls redondos y sin zapatos.

Mi hija tiene once años. Tiene una mentalidad muy fuerte y prefiero que la utilice para ser creativa antes que para obsesionarse con el espejo. ¡Porque todas las chicas son hermosas!", comenta Shay.

Kendrick agradece la dureza, la insolencia, la actitud positiva, la lealtad y, sobre todo, la capacidad de liderazgo de Poppy. Pero cuando conoció a Mitchell y Dohrn para hablar del papel, la actriz confiesa que tuvo algunas preocupaciones. "No sentía que fuera la persona adecuada para hacer el papel de la Troll más feliz; la dulzura no es mi fuerte. Advertí a Mike, Walt y Gina que podía llevar a Poppy por un camino más aguerrido. Creo que ese fue el término que utilicé.

Cuando los directores le garantizaron a Kendrick que su visión de Poppy era la misma que la suya, ella aceptó su Troll interior con mucha determinación. "Cada vez que entraba en la cabina de grabación y encontraba la cara sonriente de Poppy, me entraban ganas de añadir un poco de fuego, sarcasmo, insolencia y determinación al personaje", recuerda Kendrick. "Eso es lo que marca la diferencia entre un personaje incesantemente feliz y un poco irritante y uno que realmente cobra vida.

Dicho esto, confieso que, generalmente, arruinaba los primeros cinco minutos de cada sesión de grabación poniendo mi 'voz adorable'. No podría evitarlo; ¡Poppy es muy mona! Pero Mike y Walt me animaron a conseguir que esta pequeña criatura rosa pareciera real y compleja. Puede que Poppy no se parezca a Shrek, pero es igual de compleja.

Después de ver algunas de las primeras secuencias, Kendrick descubrió aún más aspectos inesperados del personaje gracias al "gran equipo de animación de DreamWorks, que consigue capturar el personaje de Poppy en cada diminuta expresión.

"Cada vez que me pedían que hiciera otra sesión de grabación, me alegraban la semana. De alguna manera, me sentía identificada cuando me preguntaba a mí misma por qué un Troll rosa de 15 centímetros me recordaba a mí misma. Ver a Poppy y a los otros Trolls me llenaba de alegría".

El malhumorado compañero y complemento de Poppy, Branch, es el único Troll paranoico. Mucho tiempo después de la liberación de los Trolls, él era el único que seguía viendo a los Bergens como una amenaza, pero nadie le creía. Branch lleva una existencia descontenta y siempre está preparado para lo peor. Ha perdido su sentido de la alegría y está desconcertado por la excesiva positividad de los demás Trolls. Branch se pregunta a menudo si es el único Troll cuerdo que queda. A lo largo de la película, se le desafía a dejar atrás el pasado, aunque eso implique una temida explosión de cantos, bailes y abrazos.

Branch representa nuestros miedos y la manera en la que nos envuelven y nos impiden sacar nuestra alegría interior. Siempre alerta, se consume pensando en los potenciales peligros y se pasa la vida preparándose para lo peor, en vez de disfrutar del presente. Aunque algunas de sus preocupaciones tienen fundamento, ya que hay muchos peligros reales alrededor, Branch debe aprender que tiene que seguir viviendo su vida y no dejar que el miedo le domine.

"Branch no es una persona muy sociable", apunta Justin Timberlake, que pone la voz original al papel y es el productor ejecutivo de música de la película. "No baila, no canta ni abraza, lo que le convierten en cierto modo en un marginado —dicho por él— de la comunidad Troll.

Es un duro superviviente y un gran contraste con todos los demás Trolls", continúa Timberlake. "No conecta con nadie".

Como buen superviviente, Branch ve el peligro en todas partes y, por lo tanto, la necesidad de impermeabilizar su casa contra visitantes no deseados, ya sean Bergens o Trolls. Por ese motivo, ha construido un refugio de supervivencia subterráneo, del que presume por estar altamente camuflado, fuertemente fortificado y cien por cien a prueba de Bergens.

"Sí, Branch está obsesionado", afirma Timberlake, que adoptó algunas de las actitudes "poco Troll" de Branch. "Pensé que sería muy divertido interpretar el sarcasmo y el pesimismo de Branch, a pesar de que yo no suelo ser así, al menos hasta que me tome el café de por la mañana", continúa el actor.

Haciendo alusión a la parte reconocible del personaje, a pesar de —o quizás gracias a— su constante negatividad, Timberlake comenta de broma que "Branch va a ser la voz de todos los padres que vean TROLLS. Les va a encantar Branch y se van a preguntar por qué los Trolls son tan felices todo el tiempo".

Del mismo modo que Kendrick tenía cuidado con no pasarse con la perpetua felicidad de Poppy, Timberlake no quería hacer que Branch fuera demasiado gruñón. "Me preocupaba que fuera demasiado cascarrabias y que no gustara a algunos espectadores", explica. "Afortunadamente, Mike, Walt y yo encontramos un buen equilibrio en el comportamiento del personaje. Pero no queríamos perder de vista tampoco lo divertido que era que Branch y Poppy fueran polos opuestos".

Cuando Poppy y Branch forman un equipo para rescatar a sus amigos, las dos naturalezas extremas de los Trolls se acaban encontrando en el medio, con sorprendentes resultados. De manera paralela, Poppy tiene una segunda misión de rescate, una de una naturaleza más personal: cambiar la actitud de Branch.

Como muchas otras parejas del cine, Branch y Poppy demuestran que los opuestos no se atraen, al menos al principio. Eso hace que la progresión de su relación sea aún más divertida de ver. "A Poppy le encanta Branch porque a ella le encanta todo y todo el mundo. Y eso molesta a Branch aún más, lo que supone un bonus para Poppy", explica Kendrick. Timberlake apunta que la insistencia de Poppy en Branch es "un tipo de coqueteo", mientras que Dohrn lo relaciona con una de las parejas más famosas de la gran pantalla: "Esta dinámica nos ofreció un sentimiento cálido que ya experimentamos cuando contamos una historia sobre Shrek y Burro".

Aunque la conflictiva química entre Poppy y Branch saca sus naturalezas opuestas, en el transcurso de sus aventuras, empiezan, poco a poco, a influenciar y aprender el uno del otro. Después de todo, deben encontrar la manera de trabajar conjuntamente para salvar a los amigos de Poppy. La misión afecta a Poppy de una manera que jamás se hubiera imaginado. "Una de las claves con Poppy era encontrar la manera de hacer que alguien que está siempre feliz tuviera que hacer frente a tantos problemas, para que cuando los resolviera, volviera a experimentar la felicidad, pero esta vez, una felicidad ganada, en lugar de algo que ya tiene por defecto", explica el guionista Glenn Berger.


Los Bergens: Buscando la felicidad en los lugares equivocados
Los Bergens son el extremo opuesto de los Trolls. Estos deprimidos gigantes creen que el único camino viable hacia la felicidad es amenazar a los Trolls. "Los Bergens son malos, presuntuosos y malhumorados", señala Mitchell. "Menos mal que no tienen smartphones, porque si no, estarían todo el rato mirándolos. No se relacionan con nadie".

El líder de los Bergens, con voz original de Christopher Mintz-Plasse, es el Rey Gristle Junior, un hosco veinteañero que juró devolver la felicidad a Ciudad Bergen capturando a los cercanos, pero bien escondidos Trolls. Gristle Junior es el hijo del Rey Gristle, con voz original del legendario cómico John Cleese.

Berger confiesa que el joven monarca es su personaje favorito, y hace referencia a un momento específico de la película para explicarlo: "Gristle está comprando en una tienda de baberos y se está comportando como un rey consentido mientras insiste en que ningún babero le queda bien. Está buscando un 'babero para hombres'. Para mí, esa frase lo resume todo sobre el personaje".

El comportamiento de Gristle también se explica porque el joven "nunca ha experimentado la felicidad ni el amor", explica Mintz-Plasse, más conocido por su cómico papel de McLovin en la exitosa Supersalidos. El actor apunta que cuando habló por primera vez del personaje con los productores, vio una imagen de Gristle y pensó: "Ah, vale, es como una especie de gremlin. Yo ya estaba preparado para que Mike y Walt me pidieran que pusiera alguna voz rara. Pero me dijeron que no, que querían que fuera yo mismo".

Debido a su comportamiento hostil, no sorprende que Gristle no tenga suerte en el amor. Pero ese estado podría cambiar si la criada Bridget tuviera algo que decir al respecto. Con la voz original de Zooey Deschanel (New Girl, Elf), Bridget es la Bergen más dulce y bondadosa de toda Ciudad Bergen; de hecho, puede que sea la única Bergen bondadosa. Bridget es sensible, tiene una voz dulce y esconde que está enamorada del rey. "Es nuestra Cenicienta", afirma Mitchell.

El guionista Jonathan Aibel le tiene un cariño especial a Bridget, un personaje que considera "complicado de escribir, porque cuando la conocemos, ella no se comunica. Así que ver cómo crece y aprende a expresarse es, probablemente, mi parte favorita de la película, especialmente, cuando tiene la cita de sus sueños con el Rey Gristle".

A medida que avanza su gran noche con Gristle, Bridget recibe la ayuda de Poppy y sus amigos, que no sólo le proporcionan trenzas de colores hechas de sus propios cabellos, sino que ayudan a poner palabras en la boca de la tímida Bridget para que mantenga una conversación con Gristle. "Esa escena de 'Cyrano' fue la más divertida de todas las que escribimos para la película", afirma Aibel.

Un Bergen con intenciones realmente malvadas es Chef (Christine Baranski, que debuta en una película de animación). En su época, esta Bergen tenía un codiciado puesto en la cocina real de Ciudad Bergen, hasta que sus malvados planes se frustraron hace veinte años. Ahora, Chef ha descubierto el escondite de los Trolls y está deseando volver a ponerles las manos encima.

Baranski, que ha interpretado a una gran variedad de personajes inolvidables, entre los que se incluye la importante fiscal de la aclamada serie The Good Wife, impregna a Chef con un magistral equilibrio de amenaza y diversión. Y no tiene mayor fan que Kendrick, que trabajó con la versátil actriz en la película musical Into the Woods. "Chef es gruñona, algo cruel y está hambrienta de poder; características que Christine interpreta de maravilla, y que son todo lo contrario a lo que es en realidad", afirma Kendrick. "Es muy divertido ver lo que ha sido capaz de hacer con Chef".

Finalmente, está Bibbly Bibbington (Rhys Darby), el propietario de la principal tienda de baberos de Ciudad Bergen. Y no es una empresa fácil, especialmente cuando tiene que servir las exigencias del rey.


Los amigos de Poppy
Poppy quiere a sus amigos de Poblado Troll, y haría cualquier cosa por rescatarlos de las garras de los Bergens. Su mejor amigo es Grandullón (James Corden), que tiene también el corazón más grande de todo el poblado. Debajo de ese cuerpo tan grande es, realidad, un trozo de pan y, aunque es un Troll de pocas palabras, Grandullón es como el capitán del grupo.

El mejor amigo de Grandullón es el Señor Dinkles, una oruga a la que le gusta actuar como un gato y al que le gusta vestir con sombreros. El polivalente James Corden, cuyas sesiones de karaoke en el coche para The Late Late Show se han convertido en una sensación en Internet, le ha aportado mucha diversión al papel. Según recuerda Berger: "Dijimos que teníamos que escribir más bromas para Grandullón porque James lo estaba bordando".

La DJ de Poblado Troll es DJ Suki (voz original de la superestrella de la música Gwen Stefani), con la que siempre se puede contar para pinchar música en momentos improvisados, de los que hay muchos en este mundo del canto y el baile. El equipo de DJ de Suki es completamente natural; está formado por grillos, escarabajos y otros insectos que, juntos, crean sonidos únicos.

Las voces originales de Satén y Chanelle, también conocidas como las gemelas fashion, están a cargo de Icona Pop, el dúo de música pop sueco formado por Caroline Hjelt y Aino Jawo, más conocido por la canción I Don't Care. Satén y Chanelle están muy, muy unidas; de hecho, están unidas por su brillante y colorido pelo. Las gemelas son fundamentales para complementar los trajes de Poppy.

Al igual que sus alter ego de la pantalla, el dúo de Icona Pop está muy unido. "Durante las sesiones de grabación, se comportaron como hermanas, incluso a veces terminaban las frases de la otra", asegura Dohrn.

Creek (voz original de Russell Brand), otro amigo de Poppy es el Troll más positivo, solidario y tranquilizador de todo el Poblado Troll. Pero resulta que Creek tiene un lado oscuro, que se manifiesta de manera peligrosa para sus amigos. Cuando conocemos al personaje, parece, según Brand "un Troll especialmente inteligente, quizás hasta de la próxima generación de la especie Troll. Está más allá del mundo material, incluso aunque el material sea de pelo y fieltro". Pero hay un momento crítico en el que Creek sufre un cambio de actitud un poco oscuro. "Se convierte en un traidor y un renegado", explica Brand.

"Nos atraía la idea de que alguien cercano a Poppy la engañara y le rompiera el corazón", resume Aibel. "Creek debía ser encantador y divertido y, a la vez, irritar a Branch con su positividad. Al mismo tiempo, queríamos que escondiera una naturaleza cínica y egoísta, que se revela cuando traiciona a Poppy. Russell Brand fue como un regalo para nosotros que supo aportar todo eso al personaje".

Luego tenemos a Guy Diamante (voz original del actor de Bing Bang Kunal Nayyar), el Troll reluciente que va desnudo. Debido a su preferencia por ir sin ropa, salvo por alguna purpurina colocada estratégicamente, Guy tiene mucha seguridad en su cuerpo y es una fiesta con patas.

Cooper (voz original de Ron Funches) es una rareza en el Poblado Troll: un peludo Troll con forma de jirafa que toca la armónica y tiene siempre una sonrisa tonta en la cara. "La principal característica de Cooper es su entusiasmo infinito", afirma Funches. El personaje tiene también una singular reacción cuando tiene miedo.

Dohrn se fue el encargado de grabar el personaje de Peque, una diminuta Troll con una sorprendente voz de barítono. Entre sus aficiones se incluyen: escuchar música heavy sueca y hacer ganchillo. El codirector también es la voz original de Nube, un habitante del bosque con forma de puff, al que le gustan los calcetines altos y chocar los cinco con cualquiera que se encuentre.

El resto del grupo lo completan Pelos, un Troll hecho casi entero de pelo (lo cual no es un tema de menor importancia, ya que las trenzas son una característica típica de los Trolls); y Harper, un Troll que utiliza su pelo como pincel, con el que crea piezas de arte detalladas y simbólicas.


El mundo único de Trolls
La tecnología que hay disponible actualmente para la realización de cine de animación es más sofisticada y realística que nunca. En muchos aspectos, la hierba o el agua, nunca habían parecido tan reales.

Pero los productores de TROLLS tenían en mente una idea bastante diferente para estas herramientas de efectos visuales de última generación. Decidieron crear un mundo como ningún otro jamás creado en el cine. "Queríamos transportar a los espectadores a un universo hecho a mano", explica Mitchell.

Para la estética de la película, la diseñadora de producción, Kendal Cronkhite-Shaindlin, se basó en texturas del arte con fibra, con materiales como el fieltro, terciopelo, macramé y materiales de flocado. Los productores lo llamaron una "inmersión peluda", un proceso que afirman que hará que los espectadores quieran meterse dentro de la película y tocar todos los personajes y escenarios.

El diseño, como todo lo demás en TROLLS, está hecho de alegría y felicidad. La mayor parte de la película, según Cronkhite-Shaindlin, es una "explosión de color que realza ese diseño. No importa la cantidad de obstáculos que se encuentre Poppy en el camino, el entorno suele ser divertido y muy colorido. La oscuridad y lo taciturno no es muy del mundo Troll", añade.

Cronkhite-Shaindlin se apoya en los años 60 y 70, la época en la que las versiones alegres de estas criaturas mitológicas se hicieron famosas. "En particular, se hace mucha referencia a la época de los 70", explica. "Los Trolls son algo hippies en la manera en la que viven en comunidad en la naturaleza. Y probablemente sean vegetarianos".

La tierra de origen de los Trolls, Poblado Troll, es un lugar mágico arraigado en su cultura. Se encuentra en un terrón dentro de un bosque, "de tamaño humano, así que es enorme para ellos", apunta Cronkhite-Shaindlin. "Queríamos que los Trolls fuesen como espíritus del bosque que están en contacto con su entorno, el cual es igual de peludo que ellos".

Hay varios momentos clave exentos de pelo y explosiones de color; en particular, las escenas en la que los Trolls pierden color, lo que significa que tienen miedo o han perdido la esperanza. Por otro lado, la obsesión de Branch con los Bergens le ha llevado a convertirse prácticamente en un Bergen, así que hay algo de oscuridad en su refugio de supervivencia.

La oscuridad es sólo uno de los diferentes modelos de diseño que ayudan a definir a los Bergens. Su mundo se inspira en una alfombra polvorienta y en el movimiento brutalista, que se hizo popular en los años 70, y que parecía apropiado para seres monstruosos. "Su sociedad es, de algún modo, parecida a la sociedad suburbana de los 70, así que los Bergens están hechos de poliéster, plástico, formica y otros materiales sintéticos", elabora Cronkhite-Shaindlin. "Comen comida rápida y no tienen ningún contacto con la naturaleza ni con nada bueno del mundo. La paleta de colores de los Bergens también es muy de los 70: naranjas y dorados oscuros y verde aguacate".

Para la fotografía general de la película, Mitchell y Dohrn también rinden homenaje a una de las figuras más destacadas del cine: Hayao Miyazaki, un director de cine, productor, guionista, animador, escritor y artista manga japonés entre cuyas películas se incluyen los aclamados clásicos de animación El viaje de Chihiro y La princesa Mononoke. "Muchas de las películas de Miyazaki son como sueños de hadas con extrañas y maravillosas criaturas", explica Mitchell. "Estas cosas tuvieron mucha influencia en TROLLS que, aunque pueda parecer una fiesta continua y sea muy irreverente, es también como un extraño sueño de hadas".


El pelo es la cuestión
El pelo es un aspecto característico de los Trolls y su universo. La responsabilidad de hacer que sus poderes casi sobrenaturales cobraran vida recayó en el "grupo de trabajo del pelo", compuesto por cientos de artistas y técnicos que trabajaron exclusivamente en efectos del pelo, garantizando que esta parte tan mágica tuviera siempre una apariencia —y una función— fabulosa.

TROLLS es la primera película de DreamWorks Animation que utiliza Willow, la herramienta de simulación de pelo largo exclusiva de la empresa. Willow es una herramienta única porque es eficiente y estable a la hora de resolver montones de problemas con los "días malos de pelo", como el encrespamiento, la fricción, elasticidad y los golpes de cientos de miles de pelos que hay en las cabezas de los personajes.

Permitió a los talentosos artistas de la producción diseñar, simular y ver una vista previa del pelo Troll con una sola aplicación, otorgándoles un control artístico interactivo que dio vida al pelo como a un personaje más. Antes de Willow, los artistas de los diferentes departamentos tenían que usar diferentes herramientas para conseguir el estilo, el desempeño y la apariencia del pelo.

Esa tecnología se utilizó al máximo de su capacidad, ya que los Trolls construyen todo a partir de pelo; se mueven con tirolesas hechas de pelo y hacen ejercicio en trampolines de macramé hechos de... sí, de pelo. Incluso el fuego y el agua parecen hechos de pelo. "Es un mundo tan logrado que ni siquiera cuestionas el hecho de que el fuego está hecho de pelo", apunta Timberlake. "¡El pelo es el superpoder de los Trolls!

El pelo de Troll es como un personaje más", añade Kendrick. "Los Trolls pueden esconder cosas entre el pelo, luchar con él e incluso usarlo de escalera. El potencial que tienen justo sobre sus cabezas es ilimitado. Hace que me pregunte por qué me cuido tanto el pelo si no hace nada comparado con eso. No me ayuda a pelear contra arañas gigantes".

Timberlake añade: "Branch usa su pelo como látigo... ¡a ver si Indiana Jones es capaz de hacer eso!"

Pero conseguir ese pelo de punta no fue sencillo: el grupo de trabajo del pelo creó un total de 1,8 millones de mechones: 84.000 para Poppy, casi 50.000 para Branch, y la corona de pelo es para Lady Purpurina Brillante (también conocida como Bridget), que utiliza 237.375 mechones, que lleva con la ayuda de Poppy y sus amigos, claro.


Todo lo que brilla…
¿Qué es una fiesta sin purpurina? Desde el principio, los productores tenían claro que querían usar purpurina como un efecto para aumentar la naturaleza alegre de los Trolls. Ya tenían previsto utilizar nubes y espráis de purpurina durante toda la película; e incluso como texturas en los personajes. "La purpurina es importante para un Troll", apunta Dohrn. "Es una parte importante de su mundo y, a veces, es la manera en la que expresan su felicidad".

TROLLS es la primera película que utiliza la purpurina hasta ese punto. Pero hasta que la película no estaba bien avanzada, no se logró purpurina de calidad. Hasta los ordenadores más avanzados tenían dificultades con la purpurina, la cual necesita moverse, revolotear y reflejar la luz en diferentes direcciones. Los productores descubrieron que los trozos de purpurina se veían muy bien cuando los Trolls estaban quietos, pero cuando se movían o bailaban (cosa que les encanta hacer), el efecto se derrumbaba.

"¿Quién iba a pensar que algo como la purpurina iba a ser tan complejo?", reflexiona Mitchell.

Una vez más, la innovación de última tecnología salvó el día... y el mundo de purpurina de los Trolls. El equipo técnico de DreamWorks desarrolló un ensombrecedor de purpurina, que permitía a los artistas controlar fácilmente el movimiento, la forma y el reflejo de los trozos de purpurina. Una nube de ruido de esferas en 3D le aporta a los trozos de purpurina una apariencia de distribución aleatoria natural, tal y como se ven en el mundo real. Los artistas podían subir o bajar la nube de ruido en 3D para que el movimiento de la purpurina pareciera aleatorio a la vez que les permitía dirigirlo.

Debido a que los Trolls, a veces, necesitan poner purpurina en su pelo, el increíble equipo del pelo de DreamWorks ajustó sus sistemas de pelo para tener también un espacio de referencia que permitiera que los trozos de purpurina centellearan con el pelo durante los bailes.

A los productores les gusta llamar a esa área que albergaba el ensombrecedor de purpurina el "laboratorio de purpurina", manejado por científicos que, según bromea Mitchell, "estudian la purpurina y no dejan de tirarla por ahí".

Por si crear nuevas herramientas para el pelo y la purpurina no fuese suficiente, los magos de la tecnología de DreamWorks desarrollaron un kit de herramientas de ajardinamiento digital para TIBER, lo cual facilitó una dirección artística interactiva en tiempo real y permitió a los diseñadores "plantar" el increíblemente detallado Poblado Troll.

De manera más específica, esta herramienta digital permitió una dirección de arte interactiva para las diferentes plantas, setas y casas que existen en Poblado Troll. Es un proceso que se vuelve sencillo... y maravilloso.

TROLLS también le da mucho amor digital al arte de los álbumes de recortes, ya que así es como los Trolls graban su historia. Cuando la película nos lleva al interior de la mente de Poppy, tiene la apariencia de un álbum de recortes, a través del cual podemos ver gran parte de su mundo. Otro equipo especial se centró en esa tarea crítica.


Todos cantan, todos bailan… Esto es Trolls
Otra dimensión importante y característica de TROLLS es la música. Una de las prioridades para los productores y el estudio fue garantizar que todas las canciones impulsaban la historia hacia adelante. "Las letras son parte de la narración", añade Dohrn. "Nunca queríamos que parara la historia sólo porque empezara una canción".

Mitchell y Dohrn esbozaron la historia y luego buscaron canciones que encajaran con el tono de cada momento o proporcionaran información sobre la personalidad de un personaje. Fue un proceso de "audición" de pasado y presente que incluye muchas décadas distintas y que abarca cientos, si no miles, de canciones.

Inicialmente, los productores pensaron usar sólo canciones clásicas para facilitar una experiencia compartida con los espectadores. Pero cuando Timberlake se unió al equipo como productor ejecutivo de música, la decisión sencilla era dejarle escribir o coescribir algunas canciones nuevas también.

Según Timberlake, este doble trabajo en TROLLS fue desbordante.

"Siempre he querido supervisar la banda sonora de una película", continúa el actor, "y pensé que qué mejor manera de dar el paso que con una película en la que actúe. Me siento más cercano a la historia habiendo interpretado a uno de sus personajes. Poner la voz a Branch me sirvió de mucha ayuda a la hora de escribir la música de TROLLS".

Contar con Timberlake para asumir esas responsabilidades fue el matrimonio perfecto entre artista y material. "Para Justin fue algo natural convertirse en compañero nuestro", apunta Shay para explicar la conexión instantánea que tuvo con el proyecto. "Cuando le enseñamos varias imágenes y escenas preliminares, Justin hizo clic: saltó de la silla y se podía sentir su entusiasmo. Llevó la música a niveles inesperados de sofisticación y también aportó tono; embelleció los sonidos desde el punto de vista de la producción e hizo que sonaran mucho mejor".

En su papel de productor ejecutivo de música, Timberlake trabajó estrechamente con los actores para pulir actuaciones musicales. "Justin no escatimó en esfuerzos a la hora de sacar lo máximo de nuestro formidable y polivalente reparto", afirma Mitchell. "Su pasión por la música fue una inspiración para todos nosotros". Mintz-Plasse añade que contar con Timberlake en la supervisión de sus propias canciones "fue lo más divertido del trabajo en TROLLS. Soy una gran seguidora de su carrera musical e interpretativa desde hace años. Entrar en la cabina de grabación y que Justin me dijera cómo cantar son momentos que no olvidaré en mucho tiempo".

Kendrick bromea que cuando trabajaba con Timberlake en su capacidad de producción musical, se sentía como si "estuviera en una de esas películas sobre músicos y Justin fuese la persona que presiona los botones en la cabina de control para decir: hazlo mejor".

TROLLS empieza con la canción Hair Up, interpretada por Timberlake, Gwen Stefani y Ron Funches. La canción, con música y letra de Timberlake, Max Martin, Shellback, Savan Kotecha y Oscar Holter, ayuda a establecer la historia de los holgazanes Bergens y, específicamente, del joven Rey Gristle Junior.

A continuación, vemos una breve historia de la civilización Troll con la canción September, con música y letra de Al McKay, Allee Willis y Maurice White, cantada por The Outfit; seguida de una alegre canción que cantan Poppy y algunos Trolls jóvenes en armonía.

Una compilación que incorpora Move Your Feet (escrita por Jesper Mortensen), D.A.N.C.E. (escrita por Gaspard Auge, Jessie Chaton y Xavier De Rosnay) y It's a Sunshine Day (escrita por Stephen McCarthy) e interpretadas por Funches, Anna Kendrick, James Corden, Icona Pop, Stefani, Kunal Nayyar y Walt Dohrn proporciona un alegre número de baile cuando los Trolls se dirigen a la celebración del cumpleaños del Rey Peppy.

Get Back Up Again es una canción original del equipo de Benj Pasek y Justin Paul, los escritores del musical Dear Evan Hansen. La canta Kendrick cuando Poppy se embarca en su viaje y encuentra algunos abrumadores desafíos por el camino. Puede que Poppy tenga algunas dudas sobre la misión de rescate, pero no puede dejar que afloren. Debe ser la optimista eterna, y la canción lo expresa de una manera divertida y alegre.

Branch accede, muy de mala gana a unir fuerzas con Poppy. Cuando los dos acampan para pasar la noche al calor de una hoguera, Poppy molesta a Branch con sus interpretaciones de Dream a Little Dream of Me (música de Fabian Andre y Wilbur Schwandt, letra de Gus Kahn) y The Sound of Silence (música y letra de Paul Simon), la cual adopta Kendrick como suya. "Puede que sea mi favorita", confiesa la actriz, haciendo referencia al querido clásico de Simon and Garfunkel, "ya que no sólo tengo la oportunidad de cantar esta canción tan maravillosa, sino que Poppy disfruta mucho viendo que Branch odia que cante".

Las cosas se vuelven un poco más oscuras con la canción de Gorillaz Clint Eastwood, interpretada por The Outfit. La letra y el tono sombrío e irónico de la canción ofrecen otra mirada a los Bergens y su triste vida.

Get Lucky, interpretada por Vitamin C Quartet, ve cómo el Rey Gristle engulle a Creek (o eso es lo que parece).

La balada de Lionel Richie Hello, cantada por Zooey Deschanel como Bridget, enfatiza el enamoramiento de la criada del Rey Gristle.

Los Trolls se reúnen brevemente con Poppy, lo cual, por su puesto, requiere una Celebration (con alguna letra nueva para el clásico de Kool and the Gang), seguida de Fakeover, cantada por Funches, Kendrick, Corden, Icona Pop, Stefani y Nayyar, en la que los Trolls convencen a Bridget a hacer un cambio de imagen.

En medio de la celebración, Branch tiene un flashback emocional y cuenta a los Trolls la trágica historia de la muerte de su abuela a ritmo de Total Eclipse of the Heart (inmortalizado por Bonnie Tyler e interpretado para la película por Liam Henry, Deschanel, Funches, Corden, Icona Pop y Nayyar).

Regresamos al cambio de imagen de Bridget cuando ella y sus nuevos amigos cantan una versión de I'm Coming Out (escrita por Nile Rodgers y Bernard Edwards, originalmente cantada por Diana Ross e interpretada para la película por Funches, Kendrick, Corden, Icona Pop, Stefani y Nayyar, con un solo de Deschanel) para preparar a Bridget para la gran cita con el rey. El cambio de imagen también incluye un seudónimo que adopta Bridget para su crucial cita: Lady Purpurina Brillante.

¡Es hora de la gran cita! Bridget y el Rey comparten una pizza y después salen a patinar mientras Ariana Grande canta They Don't Know, con música y letra de Max Martin, Justin Timberlake y Shellback.

Más tarde, Gristle intenta meterse de lleno en la cita cantando frenéticamente una versión del éxito de discoteca I Feel Love, popularizado por Donna Summer y cantado para la película por Christopher Mintz-Plasse como el joven rey. A continuación, el enamorado monarca espera en una ventana, esperando que llegue Lady Purpurina Brillante mientras Timberlake interpreta Hair Up.

Una nueva versión de True Colors (música y letra de Thomas Kelly y William Steinberg), interpretada por Kendrick y Timberlake acompaña una escena muy emotiva con Poppy, Branch y los amigos de Poppy, en la que la princesa pierde la esperanza y el color. "Es un momento increíble de la película", afirma Timberlake. "La canción tenía un significado específico cuando Cyndi Lauper la cantó en los años 80 y en nuestra película adquiere un nuevo significado. No hay ninguna canción que funcione tan bien en esta escena".

Ariana Grande reinterpreta el tema They Don't Know cuando Gristle y Bridget vuelven a encontrar el amor.

Can't Stop the Feeling, escrita por Timberlake, Martin y Shellback, es un himno festivo que vuelve a reunir a los Trolls y los Bergens. La canción está interpretada por Timberlake, Deschanel, Funches, Mintz-Plasse, Kendrick, Corden, Icona Pop, Stefani, Nayyar, y un coro. "Está llena de optimismo, que nos arrastra a su creación", apunta Timberlake. "Escribirla me hizo realmente feliz". El director, Mike Mitchell, añade que la canción "resume todo lo que queríamos transmitir con la película. Te llena de felicidad cuando la escuchas.

"Le dijimos a Justin que tenía que escribir una canción que transformara la visión del mundo de toda una comunidad. Y ésa no es una tarea sencilla, por cierto. Bueno, igual para Justin sí que lo es".

Cuando comienzan los créditos del final, podemos disfrutar de September, interpretada por Kendrick y Timberlake.

El versátil compositor de cine Christophe Beck, entre cuyos numerosos trabajos se incluyen Dando la nota, Frozen: El reino del hielo y Ant-Man, trabajó estrechamente con Timberlake para componer la banda sonora. "Christophe ha cogido las canciones que, aunque fueran de épocas diferentes parecía que seguían una línea, e interpoló algunas de ellas en su banda sonora", explica Shay. "Por ejemplo, Christophe cogió Hello y la usó como el tema de Bridget en toda la película".


Finales felices
Sí, ser feliz es bonito. La felicidad es buena. ¿Pero por qué se iba a hacer una película sobre ella? Mitchell vuelve a la idea de que "en el mundo actual ocurren muchas cosas lamentables, así que por qué no ir al cine a ver algo que parezca y se vea como una fiesta para pasar un rato agradable".

Dohrn añade una alegre perspectiva similar: "Es bonito hacer una película que irradie optimismo y, al mismo tiempo, formule preguntas importantes sobre la felicidad y su origen".

Para Shay, la película es diversión y sorpresas. "En TROLLS abunda el humor irreverente, que es completamente inesperado, así como el corazón", afirma. "También te invita a un mundo que no has visto antes".

Para sus dos actores principales, el tema de la alegría es la razón clave por la que se unieron al proyecto; y les proporcionó unos recuerdos inolvidables cuando terminaron de grabar. "TROLLS me hace sonreír y reír", asegura Timberlake. "Me encanta su humor real. La felicidad nos conecta y lo curioso es que el personaje que desempeño, Branch, intenta por todos los medios evitar la felicidad. Al final, por supuesto, no puede conseguirlo", concluye.

"Cuando veo la película, pienso que me gustaría que su universo fuera real", confiesa Kendrick. "Y que podría visitarlo".