Carmen (Maribel Verdú) y Carlos (Antonio de la Torre) son una pareja del extrarradio de Madrid. Ella, ama de casa entregada a su familia. Él, un gruista que vive por y para el Real Madrid. Resignados a la rutina, todo cambia el día de la boda del sobrino de estos. Durante la celebración, Pepe (José Mota), primo de Carmen e hipnotista aficionado, hace una demostración, a la que Carlos, incrédulo, se presta como voluntario. A la mañana siguiente, Carlos se comporta de una manera insólita. Parece que algo salió mal, un espíritu le ha poseído. Empieza entonces una surrealista y divertida investigación por parte de los primos para recuperarlo. Mientras, Carmen comienza a sentirse extrañamente atraída por su "nuevo" marido.


Los personajes

Carmen - Maribel Verdú
Ama de casa por obligación. Por obligación de su marido Carlos, que no quiere que trabaje fuera. Aunque cuando se conocieron, hace más de veinticinco años, ella era depiladora en un salón de belleza. De unos años a esta parte, Carmen es invisible para él, que seguro no se daría ni cuenta, si se cambiase la nariz o se tiñese el pelo de azul. Su hija adolescente Toñi es su única alegría. Pero apenas la ve, ya que está muy ocupada en ser una "rebelde sin causa". Carmen es una buena mujer, pero está deprimida, sin saberlo. Vive con su familia en un barrio del sur de Madrid, una colmena de pequeños pisos con mil ventanas y mil historias...

CARLOS - Antonio de la Torre
Vive por y para el Real Madrid. Él no se considera español, sino madridista. Es un hombre celoso, aunque no le haga ni caso a "su Carmen". Ni contigo, ni sin ti. Su debilidad es su hija Toñi. Ella lo sabe y consigue todo lo que quiere de él. Carlos lleva trabajando en la construcción muchos años. Ha pasado por peón, encofrador, alicatador... hasta llegar a ser operador de grúa. Le gusta su trabajo porque le permite estar sentado todo el día, sin moverse... moviendo cosas. Odia, con todas sus fuerzas, a Pepe, el primo de Carmen. No le traga. Tiene ganas de "darle dos hostias", la única forma de solucionar un problema, según él.

PEPE - José Mota
A pesar de tener cuarenta y muchos, sigue viviendo con su madre y durmiendo en literas. Desde niño, está enamorado de su prima Carmen. Ella lo sabe. Su marido, también, y no le hace ninguna gracia. Estudió electrónica, pero trabaja como seguridad en un supermercado. Llevar uniforme le hace sentirse importante. Pero lo que más le gusta de su trabajo es llevarse los yogures caducado gratis al final de la jornada. Obsesionado con el mentalismo desde que con cinco años vio a Uri Geller doblar una cuchara en televisión. Todavía conserva, como una reliquia, la que él mismo dobló ese día. La simple presencia de Pepe hace reír.