Dirigida por Ted Sieger, Michael Ekblad, Matthias Bruhn
Molly Monster es la única y queridísima hija de Popo y Etna Monster. Su vida transcurre en el entorno familiar, jugando con su mejor amigo, Edison, un juguete de cuerda que tiene vida propia. Pero cuando su madre pone un huevo (que empollará el padre), Molly emprende un viaje que cambiará su lugar en la familia.
El viaje la llevará lejos de casa, cruzando las Montañas Muy Muy Salvajes, hasta la isla del Huevo, donde se reunirá con papá y mamá y su nuevo hermanito minimonstruo.
Los personajes
Molly
Molly es una niña monstruo alegre, simpática y vivaracha muy querida por todos los monstruos de Monstruolandia, especialmente por sus padres. Crece bajo la protección de Etna y Popo en el hogar de los Monster y observa con mirada curiosa su extraño mundo, lleno de color y un poco caótico. Cuando recibe la noticia de la llegada de un hermanito se pone muy contenta de poder adoptar su nuevo papel de hermana mayor. Tiene curiosidad por saber cómo funciona esto del huevo y la incubación pero se decepciona mucho cuando sus padres le comunican que todavía es demasiado pequeña para ir a la Isla de los huevos.
Edison
El mejor amigo de Molly es un juguete de cuerda alegre, un espíritu independiente y libre a quien las reglas y prohibiciones no afectan y que siempre hace tonterías. A veces Molly se mete en problemas debido a su carácter insolente y gruñón. La alegría que siente Molly por la llegada de su hermanito provoca que Edison tenga miedo de perder su posición privilegiada en la vida de la niña monstruo. Pero cuando ella le asegura que siempre será su mejor amigo, Edison recobra la confianza y el ánimo. Solamente con la confianza y el apoyo mutuos pueden superar la aventura que representa el viaje hasta la Isla de los huevos.
Etna (madre)
La de Molly es una madre monstruo afectuosa, ingeniosa y tranquila con los pies en la tierra. Mantiene la calma bajo cualquier circunstancia y sabe qué hacer incluso en una situación de crisis. Mantiene su casa agradablemente caótica, lo cual es muy típico de los monstruos. Comparte la educación de Molly con su querido Popo, con el que mantiene una relación muy estrecha y feliz. Solo pierde la calma cuando se preocupa por Molly.
Popo (padre)
Molly tiene un padre amable y curioso que resulta ser también un tipo encantador y atolondrado. Dado que es un hombre moderno, deja que su mujer lleve las riendas, puesto que es muy buena con las multitareas, confía enormemente en el carácter sereno y sabio de su Etna. Cuando por fin llega el huevo que contiene el monstruito, su misión consisten en ponerlo a buen recaudo e incubarlo, lo que lo desborda rápidamente. Cuando se entera de que Molly ha hecho sola el viaje hasta la Isla de los huevos, casi le da un ataque de nervios.
Los tíos
Alfredo y Santiago son un par de tipos caóticos que viven juntos cerca de la casa de Molly y sus padres. Molly los tiene en gran estima y ellos la quieren por encima de todo. El tío Alfredo se caracteriza por su alegría excesiva y la actitud optimista frente a la vida. El tío Santiago, por el contrario, es nervioso y un poco asustadizo. A veces están tan concentrados en sí mismos que olvidan todo lo que les rodea... lo que resultará un aspecto importante para Molly y nuestra historia.