El jefe de una inútil banda de ladrones decide darles una última oportunidad: deberán vigilar a su nueva novia. Todos se alegran por lo que parecen unas vacaciones pagadas pero pronto se verán involucrados en una aventura de supervivencia repleta de riesgo, escalada y rafting.

Los personajes:
Hélène de Fougerolles es Léonore, una guapa y rica heredera cuya pasión por la aventura lleva a convertirse en guía de grupos de deporte de alto nivel. A pesar de que sobre ella planea la sombra de la "maldición" (toda su familia ha muerto en extrañas circunstancias), su carácter fuerte y decidido la hacen seguir adelante a toda costa, ¿lo conseguirá?.

Roschdy Zem es Sami, el más maduro de los cuatro "supuestos" sicarios contratados para eliminar a Léonore, aunque a su vez también el más inocente. A pesar de ser autoproclamado como jefe del grupo, no es demasiado respetado por sus compañeros como tal. Es el menos vendible de todos, aunque eso no quiere decir que no adore el dinero. Va a pasarlo muy mal pretendiendo ser un gran deportista: uno de sus grandes problemas es el vértigo.

Julien Courbey es Kader, otro de los "presuntos" asesinos a sueldo, es un fan de Barry White, incapaz de desprenderse de los discos de vinilo de su ídolo, incluso cuando los participantes sólo deben conservar aquellos útiles realmente necesarios para la supervivencia. Se trata también de un personaje extremista, al menos con respecto a las mujeres.

Loran Deutsch es Tacchini, el más peligroso de los cuatro, quizás el único capaz de cumplir el encargo de matar a Léonore. Él realmente hace justicia al dicho "pequeño pero matón", en su escasa altura se concentra la más elevada dosis de maldad posible por centímetro de estatura.

Atmen Kelif es Yaya, el cuarto en discordia. Considerado por el resto como el tonto del grupo, está dispuesto a asesinar, aunque sea gratis, para borrar esa imagen que tienen de él y ganar prestigio frente a sus compañeros. Tampoco le ayuda mucho su pequeño problema de control de esfínteres, hecho que causa aún más trabas a la hora de conseguir su propósito: matar a Léonore.

Josiane Balasko es Madame Jo, una verdadera asesina a sueldo, una experta en el arte de matar, una mujer aparentemente fría y calculadora, despechada porque le han arrebatado su misión: asesinar a Léodore de Segonzac. Ella, junto con su banda, era la mercenaria oficial contratada para realizar el trabajo sucio, antes de que el patético cuarteto se le adelantara. Ahora su trabajo consiste en cazar al gato.

Gérard Jugnot es Carlito, un mafioso vengativo e iracundo es, sin saberlo, el causante de todo el enredo, al enviar a sus supuestos hombres de confianza a seguir a su novia de cerca. Lo que él desconoce es que, lejos de seguir sus órdenes, esos cuatro delincuentes están en la Patagonia realizando un Raid.