Cinemanía > Películas > Mi prima Rachel > Comentario
Destacado: En cines comerciales 'Anora' Palma de Oro en Cannes
Mi prima Rachel(My cousin Rachel)
Dirigida por Roger Michell
¿Qué te parece la película?

La película ha sido adaptada a la gran pantalla y dirigida por Roger Michell, a partir de un guión basado en la novela escrita por Daphne du Maurier, y está protagonizada por Rachel Weisz (LA JUVENTUD, EL JARDINERO FIEL), Sam Claflin (LOS JUEGOS DEL HAMBRE: SINSAJO – Partes 1 y 2), Holliday Granger (CENICIENTA), Iain Glen ("Juego de tronos"), Pierfrancesco Favino (RUSH), Simon Russell Beale (INTO THE WOODS) y Vicki Pepperdine (GOODBYE CHRISTOPHER ROBIN). Kevin Loader (THE LADY IN THE VAN) es productor del filme, ejerciendo el propio Michell como productor ejecutivo y Anita Overland (LEJOS DEL MUNDANAL RUIDO) como coproductora.

El equipo tras las cámaras incluye al director de fotografía Mike Ely (THE SELFISH GIANT, GREY GARDENS), la diseñadora de producción Alice Normington (SUFRAGISTAS), la montadora Kristina Hetherington ("The Crown"), el compositor de la música Rael Jones (OASIS: SUPERSONIC), la diseñadora de vestuario Dinah Collin (EL ESCRITOR, EL MITO DE BOURNE) y la directora de casting Fiona Weir (BROOKLYN).

La novela MI PRIMA RACHEL fue escrita en 1951 por Daphne du Maurier, cuya excepcional obra literaria combina frecuentemente suspense, pasión y retratos psicológicos sorprendentemente modernos de hombres y mujeres envueltos en fascinantes y, a veces, obsesivas relaciones. Sus historias son tan cinematográficas que hasta el mítico Alfred Hitchcock adaptó al cine tres de sus novelas: LA POSADA DE JAMAICA, LOS PÁJAROS y REBECA. AMENAZA EN LA SOMBRA, una joya del terror psicológico dirigida por Nicolas Roeg, también está basada en una historia escrita por Du Maurier.

Desde su publicación, MI PRIMA RACHEL se convirtió inmediatamente en uno de los libros más populares de Du Maurier, y 20th Century Fox se apresuró a adquirir los derechos de su adaptación cinematográfica, embarcándose directamente en su producción con dos de las estrellas más prometedoras del momento, Richard Burton y Olivia de Havilland. Estrenada en 1952, la película fue nominada a cuatro Premios de la Academia y un joven Richard Burton fue galardonado con un Globo de Oro en la categoría de "nueva estrella del año".

Impregnada de una extraordinariamente poderosa atmósfera de deseo y sospecha, la novela cuenta la historia de un joven soltero, bastante ingenuo, que intenta denodadamente determinar si la encantadora viuda de su fallecido tutor es, o bien la mujer de sus sueños, o bien una asesina a sangre fría y una cazafortunas que sólo persigue su herencia. Pero cuando Rachel finalmente aparece para visitar la finca de su difunto marido, Philip se encuentra con una mujer que no se parece en nada a la perversa envenenadora que Ambrose describió entre delirios en su lecho de muerte.

Un elemento clave en la adaptación de Michell ha sido su decisión de abrazar plenamente la inquietante ambigüedad de la novela, lo que proporciona al relato una magia que Du Maurier no rompe en ningún momento. La historia es la búsqueda de la verdad, una búsqueda que atormenta amenamente al lector, atormenta a Philip… e incluso sigue atormentando en los momentos finales del filme.

"Yo creo que si supiéramos con absoluta seguridad lo que ha hecho o dejado de hacer Rachel, la historia no funcionaría", afirma Michell. "Es muy interesante hacer una película donde parte de la diversión consiste en saber que los espectadores saldrán del cine preguntándose si ella lo hizo o no lo hizo. Espero que a la gente le guste el misterio tanto como a mí. Y también espero que disfrute montándose en esta turbulenta montaña rusa junto a esta discordante pareja, que se ve arrojada a esa especie de batidora emocional donde ambos se revuelven intentando desentrañar los motivos, sospechas y valores del otro, el diferente significado que cada uno tiene de lo que es la verdad".

"Yo creo que a Philip su prima le parece alguien que viniera de otro mundo. Y, en cierto modo, así es. Rachel proviene de un país lejano y exótico. Su lenguaje, su forma de vestir, sus anhelos y su comprensión del mundo le son completamente ajenos. Rachel es guapa, divertida, elegante en su forma de expresarse, y también se muestra absolutamente irreverente hacia las asfixiantes y conservadoras convenciones de la época. La acción de la novela se sitúa en el siglo XIX, pero fue escrita en 1950. Por lo tanto, pienso en Du Maurier como en una especie de versión postfreudiana de, digamos, Jane Austen. Por un lado, la historia es un thriller de época sobre el enamoramiento, el patrimonio familiar, etc. pero, por otro, suscita un debate sobre la sexualidad, sobre la libertad de las mujeres en un mundo de hombres, sobre cuestiones relacionadas con el poder de la mujer. Yo quería que Rachel se sintiera casi como una mujer de 2017 lanzada en paracaídas sobre ese mundo…, la mujer que aterrizó en la Tierra".

A Kevin Loader, socio de Michell en tareas de producción desde hace mucho tiempo, le impresionó la forma en que el guionista y director esparció semillas de duda a lo largo de todo el guión, que luego utilizó para explorar el abismo existente entre los sueños románticos y las realidades de cómo el poder, el dinero y las normas sociales son inherentes a las relaciones humanas.

"La idea del ‘forastero misterioso’ es conocida universalmente, así como un relevante anzuelo narrativo sobre el cual erigir una película", señala Loader. "Lo que emerge de la adaptación de Roger es un tenso thriller psicológico que está repleto de observaciones sobre la naturaleza del amor romántico, la pasión y las relaciones sexuales entre hombres y mujeres, especialmente en sociedades cerradas. Y todo ello conduce a un momento culminante, cubierto de ambigüedad respecto a quién es culpable y quién no".

A Loader también le sorprendió mucho lo absolutamente contemporáneo que resultaba en la adaptación de Michell el personaje de Rachel, chocando constantemente contra el puritanismo de la sociedad británica del siglo XIX. "Rachel es una mujer muy moderna atrapada en un mundo más bien anticuado y provinciano. Creo que parte de la razón por la que tanto Philip como otras personas encuentran muy difícil comprender a Rachel es porque no han conocido a nadie que se parezca a ella", dice Loader. "Rachel es una mujer muy decidida, que no muestra claramente sus intenciones y disfruta con su propia sexualidad. Esta forma de pensar resultaba bastante impactante para el año 1839. Yo creo que en esa particular tensión es en lo que pensaba Daphne du Maurier en los años cincuenta, y por eso, hoy en día, a nosotros nos resulta muy familiar".

Antes de lanzarse a la aventura, Michell y Loader necesitaban obtener la bendición de los herederos de Daphne du Maurier, y les satisfizo mucho encontrar un enorme entusiasmo por parte de su familia respecto a esta particular adaptación.

Grace Browning, la nieta de Du Maurier, afirma: "Roger es un realizador muy respetado, y el hecho de que hubiera sido él mismo quien había adaptado la novela me pareció muy interesante. Cuando supe que Rachel Weisz se había incorporado al proyecto, me pareció que no podía haber alguien más adecuado para este papel. Weisz siempre aporta mucha credibilidad a todos los personajes que interpreta. Du Maurier era extraordinariamente brillante a la hora de componer personajes femeninos, dotándolos de muchísima profundidad, y yo creo que cualquier actriz disfrutaría con la oportunidad de poder interpretar uno de ellos".


EL misterio de Rachel
Tras llegar a Inglaterra después de la inesperada muerte de su marido, la actitud de Rachel empieza pronto a causar desconcierto y fascinación entre todos los residentes de la finca de Ambrose Ashley, a los que, en ocasiones, sorprende su forma de comportarse. Se necesitaba a una actriz igualmente seductora y ambigua para poder mostrar esas contradicciones de una manera creíble.

La actriz ganadora del Oscar Rachel Weisz es conocida por haber aportado gran riqueza de matices a sus interpretaciones en una amplia gama de filmes, desde EL JARDINERO FIEL hasta THE DEEP BLUE SEA y LANGOSTA. "Rachel (Weisz) tenía la capacidad de aportar a la historia un tono inquietante, lo cual es verdaderamente la clave de todo el filme. No se sabe nunca con certeza si el personaje de la prima Rachel es culpable o no lo es. Rachel (Weisz) logra transmitirnos eso de una manera brillante. En un momento dado parece una mujer encantadora y en el siguiente se muestra extraordinariamente irascible, pero siempre da la sensación de que está ocultando algo. Y todos y cada uno de esos momentos los interpreta con absoluta convicción", señala Michell.

Por su parte, Weisz recuerda que tan pronto como acabó de leer el guión llamó inmediatamente a Michell para preguntarle: Pero, ¿ella es inocente o no? Su respuesta fue muy estimulante: "Roger me dijo que él no lo sabía y que la verdad es que no quería saberlo. Pensé que sería muy interesante explorar por ahí, y eso fue lo que realmente me hizo querer hacer el proyecto", dice la actriz.

La oportunidad de trabajar con Michell fue otro elemento de atracción para Weisz. "Siempre he querido trabajar con Roger, pues soy admiradora suya desde hace tiempo. Descubrí que es un director que verdaderamente busca averiguar qué es lo que hace emocionar al actor. Siempre es muy cortés y amable, pero también muy exigente. Sabe exactamente lo que quiere, pero también le gusta que haya cosas que le sorprendan. No hay nada rígido o aburrido en la forma que tiene de trabajar", relata Weisz.

Weisz asumió tanto las luces como las sombras de su personaje, indistintamente, sin permitir nunca que un aspecto dominara sobre el otro. Por un lado, la actriz abordó a su personaje como esa mujer que llega por primera vez a Inglaterra, aún aturdida por la muerte de su marido, y se encuentra con que se siente como un pez fuera del agua en esa nueva cultura. Pero también la interpretó como una mujer absolutamente sorprendida por la atracción que empieza a sentir hacia el heredero de su difunto esposo.

"Rachel acaba de perder a su marido, viaja hasta esta hacienda, la granja de la que su esposo le había hablado, y allí conoce a este hombre que es el vivo retrato de su marido con veinte años menos, joven y atractivo, y, al principio, hay algo mágico en todo eso", observa Weisz.

Al mismo tiempo, Weisz interpreta a Rachel como una persona desafiantemente independiente y cautelosa respecto a su pasado en Italia. Centrada en forjarse su propio futuro económico, Rachel se dedica a jugar con los absorbentes afectos de Philip y no muestra ningún interés en comportarse de forma convencional, aun conociendo la desaprobación de la sociedad que la rodea. "Rachel es una mujer exótica y bastante bohemia, y también muy liberada sexualmente para su época", señala Weisz. "Es consciente de que a los demás les resulta transgresora y provocadora porque tiene sus propias ideas respecto a cómo debería poder vivir una mujer. Desde luego, Rachel no estaría conforme con que un hombre fuera su dueño y que la tratara como un objeto más de su propiedad".

Rachel también tiene secretos, tanto financieros como personales, que parecen sobrevolarlo todo. "La diversión del filme radica sobre todo en intentar averiguar si se puede confiar o no en Rachel, y me encanta que la historia tenga el mismo peso en ambos sentidos. Creo que eso va a dividir a la gente en torno a la cuestión de si Rachel tiene buenas o malas intenciones", dice Weisz. "Eso es lo que hace que sea una historia de amor tan atípica, además de muy cautivadora e inquietante. En el filme se nos inquiere hasta qué punto podemos conocer verdaderamente a una persona y si la percepción que tenemos de alguien puede ser tan completa y tremendamente equivocada".

Para Kevin Loader, la cuidadosamente matizada interpretación de Weisz es el motor que impulsa el misterio. "Rachel Weisz ES la prima Rachel", afirma con contundencia. "Necesitábamos a alguien que resultara creíble como mujer inglesa de origen italiano, de apariencia exótica, muy inteligente y vehementemente responsable de su propio destino. Pero también tenía que mostrar ostensiblemente una vulnerabilidad, una profunda sensación de que sus circunstancias materiales habían cambiado y, por tanto, debía sentir una impenetrable tristeza en su interior. No hay muchas actrices que sepan combinar todo este cúmulo de cosas tan bien como lo ha hecho Rachel Weisz".

Para el actor Pierfrancesco Favino, que interpreta al italiano Rainaldi, el confidente de Rachel, Weisz tiene la rara habilidad de actuar como un espejo, permitiendo a distintos espectadores ver sus acciones de forma diferente, lo cual era el eje principal del desafío que suponía interpretar a Rachel.

"Uno puede proyectar muy fácilmente sus propios sentimientos y percepciones sobre lo que hace la prima Rachel a través de la interpretación de Weisz, lo que proporciona al público un enorme margen para el misterio", concluye Favino.


De la venganza al amor loco y al miedo
Habiendo pasado la mayor parte de su vida bajo tutela por ser huérfano, y sin madre ni hermanas que le guiaran, Philip Ashley es un hombre sin mucha experiencia con las mujeres cuando conoce a la prima Rachel. Philip ha vivido totalmente aislado en la finca de su primo adoptivo, y aunque inicialmente intenta buscar venganza contra Rachel, en vez de eso, ella le provoca un deseo que ni siquiera sabía que existiera, un deseo tan intenso que no está seguro de poder confiar en sus sentimientos.

Para interpretar el papel de Philip, Roger Michell buscaba a uno de los emocionalmente complejos actores británicos de esta nueva generación, alguien cuyos sentimientos pudieran transitar sin dificultad de la venganza al éxtasis romántico, o al tormento más plagado de dudas. "Vimos un montón de películas y Sam Claflin apareció simplemente como la opción más apropiada", recuerda el guionista y director. "Le pedimos que hiciera un par de pruebas de cámara y fue increíblemente convincente. Claflin es sensible e inteligente, pero también es joven y está lleno de energía. Lo tiene todo".

La carrera de Claflin ascendió rápidamente a partir de que el actor saltó a la palestra en filmes como ANTES DE TI, PIRATAS DEL CARIBE: EN MAREAS MISTERIOSAS y la saga LOS JUEGOS DEL HAMBRE, donde interpretó a Finnick O’Dair. Para el productor Kevin Loader, el actor aportaba dos cualidades contradictorias pero esenciales para el personaje de Philip Ashley: "Tenía que transmitir una puerilidad casi adolescente y, al mismo tiempo, una fascinante virilidad, y Sam tiene facilidad para interpretar ambas facetas. Marido y padre en la vida real, y persona joven muy cabal, Claflin puede mostrarse en pantalla muy fuerte y magnético, pero también posee un natural espíritu infantil. Era el actor perfecto para interpretar a este inocente e ingenuo joven que no sabe absolutamente nada de mujeres".

A Claflin le pareció su personaje absolutamente fascinante. "Me ha encantado interpretar a Philip e introducirme en ese mundo extraordinariamente ambiguo", señala. "Como actor, siento que he ampliado mis capacidades y he asumido nuevos retos".

Le gustó especialmente darle a su personaje un giro de 180 grados respecto a su opinión sobre Rachel. "Inicialmente, Philip sospecha de juego sucio por su parte y tiene un montón de prejuicios en su contra", señala Claflin. "Ha decidido que la desprecia incluso antes de conocerla. Pero poco a poco se siente hechizado por ella, debido a su enigmática personalidad y porque es distinta a cualquier otra mujer que haya conocido, aunque la realidad es que Philip no conoce a muchas mujeres. Rápidamente, Rachel empieza a ejercer sobre él un extraordinario y fascinante control".

Claflin admite que tenía ideas propias respecto a la verdad sobre Rachel, pero señala que Michell no quería discutir sobre ello ni por un segundo. "Desde el principio, Roger dijo ‘No quiero saber cuáles son vuestras teorías. Quiero dejar que el público decida’. Y eso es lo que realmente me atrajo de la película. Estoy ansioso por escuchar la opinión de otras personas sobre lo que pasó en realidad. Espero que sea el tipo de historia en la que te sumerges dentro y sales del cine haciéndote preguntas".

Mientras exploraba las múltiples facetas de Rachel, Claflin también se sumergió en lo que es la vida cotidiana de un granjero, aprendiendo no sólo a montar a caballo sino también a empuñar una guadaña y arar campos. Kevin Loader señala: "Sam mostró una increíble dedicación a la hora de vivir plenamente todos y cada uno de los aspectos de su personaje".

La nieta de Daphne du Maurier, Grace Browning, también se sintió conmovida por cómo la interpretación de Claflin capturó hábilmente el espíritu del personaje creado por su abuela, un joven ingenuo que se deja llevar por emociones que no ha experimentado nunca. "Yo creo que Sam aporta esa inocencia que es esencial en el personaje, y uno se cree totalmente que Philip podría ser manipulado por Rachel", concluye.


Cuestionando a Rachel: El reparto secundario
Cuando Philip pierde la cabeza por la prima Rachel y empieza a ayudarla económicamente despilfarrando la herencia de su tutor, las personas cercanas a Ambrose y que hasta entonces habían cuidado de Philip observan su conducta cada vez con más inquietud y preocupación. Entre las personas más desconcertadas por la repentina obsesión de Philip por Rachel se halla Louise, su mejor amiga desde que ambos eran niños, que le ama desde hace tiempo, aun sin ser correspondida.

La prometedora actriz de cine y teatro Holliday Grainger –conocida por sus papeles de Lucrecia Borgia en la serie de Showtime LOS BORGIA y de Estella en la película de Mike Newell GRANDES ESPERANZAS– interpreta a Louise, una leal amiga que intenta proteger a Philip aunque su propio corazón se esté rompiendo.

"Louise está secreta y desesperadamente enamorada de Philip, y realmente ha sido su única y verdadera amiga en la finca, hasta que la prima Rachel aparece y lo cambia todo", dice Grainger. "Entre Louise y Philip siempre ha habido confianza y afecto así como una grata camaradería, de manera que cuando ve que Rachel empieza a ejercer tanta influencia sobre él, eso entristece y preocupa mucho a Louise".

Grainger apunta que Louise es otra de las personas en las que Rachel siembra confusión, sintiéndose insegura respecto hasta qué punto sus sentimientos se basan en la envidia o en el pretendido peligro que Rachel supone para Philip. "Yo creo que Louise está terriblemente celosa de Rachel", confiesa Grainger. "Rachel es muy hermosa y seductora; y no se atiene a las reglas sociales que todos los demás creen que deben respetarse en la hacienda. Rachel exhibe una especie de sonrisa pícara e irónica, y se burla de las costumbres y tradiciones británicas. Yo creo que por eso todo el mundo cae rendido a sus pies. Pero Louise es la única persona que no se deja seducir por los encantos de Rachel pues cree que dichos encantos podrían ser una forma de manipular a la gente".

Kevin Loader cuenta cómo Grainger supo encarnar las emociones tan profundamente humanas de una solitaria joven que intenta ser correcta y amable mientras sus sueños se están haciendo, literalmente, añicos. "Holliday tiene una sorprendente capacidad para transformarse en un momento", observa. "De manera que de pronto la ves riendo y muy unida a Philip e inmediatamente después, al mismo tiempo, contemplas su profundo dolor cuando él decide tomar otros rumbos".

Rachel Weisz también quedó fascinada por la manera en que Grainger expresó sus sentimientos encontrados hacia su personaje."Holliday es una actriz fantástica. Es elegante, ingeniosa, inteligente y posee una gran belleza; y yo me la creía totalmente", afirma Weisz. "Louise no confía en mi personaje, y en las escenas que compartíamos, yo la miraba, ella me miraba, y parecía como si Holliday quisiera echarme abruptamente de la habitación, y todo eso era muy de verdad".

El padre de Louise es Nick Kendall, interpretado por el actor escocés Iain Glen ("Juego de tronos"), que ejerce tanto de padrino de Philip como de tutor legal del legado de Ambrose. Glen describe a Nick Kendall como "el responsable de atemperar los impulsos de Philip más propios de su juventud. Nick considera a Philip una persona demasiado impulsiva, pero también sabe que su hija Louise le quiere mucho. De manera que Kendall lo que trata es de mantener su mente lúcida, y ser un hombre comedido y leal que solamente quiere lo mejor para Philip'".

¿Pero qué es exactamente lo mejor para Philip cuando se trata de Rachel? Glen indica, "Los sentimientos de Kendall respecto a Rachel van experimentando altibajos a lo largo de toda la historia de una manera que creo que también refleja lo que siente el público. Hay mucha pasión en el ambiente, hay suspense y una enorme imprevisibilidad, pero Kendall es el único que intenta mantener una visión clara respecto a lo que realmente está aconteciendo".

El guionista y director Michell estaba encantado de tener la oportunidad de colaborar con Glen por primera vez. "Siempre he querido trabajar con él", manifiesta Michell, "y fuimos muy afortunados de poder contar con alguien de su talla para interpretar a Kendall. Tanto Glen como Holliday Grainger son elementos extraordinariamente relevantes a la hora de construir el filme en su conjunto".

Loader añade: "Iain Glen aporta una apacible bondad que irradia con naturalidad de él, de manera que percibes muy bien el afecto que siente por Philip, pero también ves la firmeza que hay en su interior y, en consecuencia, es bastante obvio cuando Nick Kendall desaprueba las acciones de Philip. El personaje debe ejercer de contrapeso a la impetuosa obsesión de Philip por Rachel".

Completando el reparto principal se halla uno de los personajes más turbios de la historia: el abogado italiano y compatriota de Rachel, Rainaldi, cuyo verdadero papel en la vida de ella es un absoluto misterio que empieza a atormentar a Philip.

El actor italiano Pierfrancesco Favino (RUSH, GUERRA MUNDIAL Z, NOCHE EN EL MUSEO) gozó de la oportunidad de interpretar a Rainaldi. El actor señala: "Lo que me gusta de esta película es que nunca sabes del todo lo que es verdad y lo que no. Un personaje tan ambiguo como Rainaldi no tienes que interpretarlo de forma explícita sino sobreentendida, lo cual para un actor es tremendamente divertido".

Michell afirma, "Rainaldi es astuto, inquietante y muy carismático, pero siempre hay en él una extraña ambivalencia, que encaja perfectamente con lo que yo quería hacer con la historia. Favino es un actor realmente extraordinario".

Loader añade: "Rainaldi está justo en el centro de la ambigüedad. Posiblemente sea un granuja y también posiblemente tenga una aventura con Rachel, además, es un forastero en el que nadie confía; y, sin embargo, exteriormente es capaz de sortearlo todo con embelesadora elegancia".


Una granja sombría, una costa peligrosa
Para plasmar fielmente los detalles y la belleza del siglo XIX, Roger Michell trabajó con un equipo de colaboradores estrechamente unido, que incluía al director de fotografía Mike Ely, la diseñadora de producción Alice Normington y la diseñadora de vestuario Dinah Collin.

La novela no indica en qué momento exactamente se sitúa la acción: Michell eligió ubicar el filme a finales de los años 1830, justo en el umbral de los rápidos y radicales cambios de la era victoriana. Es decir, entre Austen y Dickens, y justo antes de la llegada del tren, que tanto transformaría a la sociedad rural inglesa.

"Esta particularidad la utilizó Roger para explorar una sociedad en los inicios de su transformación", observa Kevin Loader. "Roger situó la película en la primera fase de la Revolución Industrial, justo cuando el cambio estaba empezando a penetrar en el campo inglés".

La elección de la granja requería tanto esfuerzo como la elección del reparto principal, ya que la finca también debía tener una fuerte personalidad cargada de misterio. Finalmente, los realizadores se decidieron por West Horsley Place, edificio ubicado en Surrey, en el margen sureste de Inglaterra. Esta espaciosa casa medieval, construida entre los siglos XVI y XVIII, no había sido reformada durante décadas, así que tenía tanto la decrepitud como el potencial necesarios para crear esa granja que se transforma absolutamente con la llegada de Rachel.

Casualmente, los realizadores habían hecho todo un descubrimiento. Resulta que West Horsley Place estaba punto de ser rehabilitada por un nuevo propietario, el historiador y presentador de televisión Bamber Gascoigne, y eso significaba que la diseñadora de producción Alice Normington y su equipo tenían, relativamente, carta blanca antes de que se iniciaran las futuras obras.

Normington comenta: "A diferencia de los inmuebles gestionados por el National Trust (entidad dedicada a la preservación del patrimonio histórico), donde estás sometido a un montón de normas, Bamber es quien administra esta propiedad, de manera que teníamos muchísima libertad. Bamber se comportó con nosotros de una manera increíble, y esta gran casa nos proporcionó un fascinante lienzo en blanco sobre el que poder crear".

Normington encaró con pasión la creación del embarrado y polvoriento entorno de Philip, al que posteriormente insufló vida con la repentina y perturbadora llegada de Rachel. Loader señala: "West Horsley es verdaderamente una granja grandiosa, que era exactamente lo que necesitábamos. Eso nos permitió transformarla en una casa que, en buena medida, había estado ocupada por hombres, perros y barro antes de que Rachel llegara a un lugar que a ella le parece mucho más civilizado, simplemente con un ligero toque, cuando es su influencia la que se impone".

Loader añade: "Fue una excelente y magnífica oportunidad de conseguir un edificio histórico cuya rehabilitación aún estaba pendiente y tener nosotros la posibilidad de trabajar con libertad, al menos, hasta cierto punto. El Mary Roxburghe Trust, fondo fiduciario dueño de la finca, y Bamber, que preside el fideicomiso y heredó la casa, nos permitieron tratar el escenario como bien de patrimonio histórico. A nosotros nos hubiera sido imposible reproducir su increíble textura".

Roger Michell añade también: "Cuando entramos allí por primera vez, nos quedamos realmente sorprendidos. Verdaderamente nos enamoramos todos del lugar; su espíritu era extraordinariamente vivo y puro".

Para la nieta de Du Maurier, Grace Browning, la casa era tal y como se la había imaginado al leer la novela. "Cuando leí el libro, esa era exactamente la imagen que tenía en mente", comenta. "Fue un auténtico alivio ver que la casa se ajustaba extraordinariamente bien a la descrita en la novela".

Más que nada, Normington quería crear un enorme impacto con la llegada de Rachel. "Pensé que las cosas tenían que ser muy básicas y primitivas en el mundo rural de Philip, con el fin de que la llegada de Rachel, con sus extrañas ideas provenientes de otras partes del mundo, diera la sensación de evento extraordinario que iba a cambiarlo todo".

Uno de los escenarios favoritos de la casa para Normington es la habitación de Rachel, que Normington describe como "la única habitación de la casa donde existe algún indicio de que hay una mujer". La diseñadora prosigue, "El resto de la casa es predominantemente masculino, así que dimos a esta habitación un fuerte sentido de feminidad, aunque de una forma oscura y misteriosa. Empezamos por cambiar las paredes, ya que por entonces el papel pintado chinoiserie de tonos oscuros era muy popular en las alcobas femeninas. Eso nos proporciona un toque decorativo e introduce al mismo tiempo el tema del color azul. Eso ya estaba en la novela, donde siempre se la denominaba como la habitación azul, pero a mí me parecía que el azul también era el color adecuado para Rachel".

Otras localizaciones fueron: Newington House, al sur de Oxford, que representa el hogar de unos nuevos ricos como la familia Kendall; Stockers Farm, en Rickmansworth, donde estaban situados los establos; y Old Amersham, una ciudad del siglo XIII ubicada en Buckinghamshire, donde se rodaron todas las escenas que transcurrían en el pueblo. Las secuencias que tienen lugar en Italia al inicio del filme se rodaron en los municipios de Arezzo y Florencia.

Para las escenas de la costa, producción viajó hasta el condado de Devon, conocido por sus playas de fina arena y escarpados acantilados. "La belleza de Devon era perfecta para explorar por qué es tan importante la relación con el mar en toda la obra de Daphne du Maurier", señala Loader.

La atmósfera de estos lugares también se impregnó en la imaginación de los miembros del reparto. Rachel Weisz resume: "Todo era increíblemente auténtico. En lugar de retocados y falsos fragmentos de un set, teníamos algo real sobre lo que basar nuestras emociones".

Esa misma autenticidad se extendió al vestuario evocador de la moda de mediados del XIX que diseñó Dinah Collins. Collins realizó una profunda investigación, descubriendo un período en el que la vestimenta inglesa, tanto masculina como femenina, estaba convirtiéndose en una moda más práctica y eficiente a medida que la Revolución Industrial empezaba a transformar las cosas.

Como la prima Rachel acababa de enviudar y tenía que llevar luto, para su viaje a Inglaterra sólo podía meter algunas prendas en su maleta. De manera que, durante gran parte de la película, Collins vistió a Weisz con una sucesión de vestidos negros y varios de repuesto, lo que le proporciona una imagen fuerte y al mismo tiempo misteriosa. A continuación, Collins añadió una gran variedad de detalles. "La prima Rachel no tiene consigo mucha ropa, pero sí tiene muchísimos accesorios", explica Collins, "lo que incluye su chal, su capa para montar a caballo y montones de sombreros y tocados de encaje, lo que contribuye a darle un toque de exotismo".

Un artículo esencial que estaba en la mente de Collins desde un principio era el collar herencia de la familia que Philip regala a Rachel, provocando una auténtica conmoción en toda la finca. Buscando una joya verdaderamente memorable y excepcionalmente evocadora, la diseñadora de vestuario se inspiró en un retrato del siglo XIX que había visto. "Roger lo había descrito en el guión como una gargantilla, pero el retrato que me sirvió de inspiración era de una mujer que llevaba un collar de pequeñas perlas muy sencillo pero extraordinariamente elegante", recuerda. Collins trabajó muy estrechamente con un joyero británico para crear un collar de estilo similar para la película. "Encontramos las perlas más increíblemente hermosas, y lucían maravillosamente bien sobre la piel de Rachel", considera.

Collins también disfrutó creando un contraste con el personaje de Louise, interpretado por Holliday Grainger, cuyo vestuario consta de ásperos tejidos tweed y una paleta de colores mucho más luminosos. "Roger quería que la imagen de Louise fuera un poco como de marimacho pero, al mismo tiempo, muy fresca y floreada", indica la diseñadora.

A Pierfrancesco Favino le encantó el vestuario que Collins creó para su personaje, y también cómo subrayaba el contraste entre Rainaldi y un Philip vestido de forma mucho más convencional. "Rainaldi luce impecable al lado de un rudo hombre de campo como Philip. Su imagen fue estudiada cuidadosamente, y el vestuario estaba tan bien diseñado que ayudaba mucho a generar el misterio que rodea al personaje", declara Favino.

Y es que el misterio era un elemento central en cada detalle de MI PRIMA RACHEL. Loader resume: "MI PRIMA RACHEL es una de las obras más psicológicamente sofisticadas de Du Maurier. Verdaderamente penetra en todo aquello que perturba a la mente humana, en nuestras emociones más profundas relativas al amor y la muerte, y en sus correspondientes miedos. A lo largo de toda la historia tenía que haber, sin manifestarse explícitamente, cierta sensación de desasosiego, y por eso la novela era una materia prima tan buena para todos los que trabajábamos en el filme, tanto reparto como equipo técnico".


Daphne Du Maurier (1907 - 1989)
Dapne du Marier fue una de las escritoras más populares de su época, sabiendo capturar el espíritu del momento, pero también fue una mujer adelantada a su tiempo, y hoy en día todavía sigue ejerciendo una importante influencia en los escritores contemporáneos; su obra muestra cómo hasta los más apasionantes thrillers –independientemente de que sean novelas románticas, sobre fuerzas de la naturaleza o de aventuras– pueden abordar también nuestras emociones más íntimas, la complejidad de las relaciones humanas y el poder que tiene el pasado.

Al igual que muchos de sus personajes femeninos, Du Maurier fue también una mujer valiente que vivió conforme a sus propias reglas. Nació en 1907 en el seno de una familia muy artística; era nieta del famoso ilustrador y caricaturista George du Maurier e hija de los reputados actores de teatro George du Maurier y Muriel Beaumont. Criada en un entorno repleto de todo tipo de actividad que tuviera que ver con el arte y la creatividad, entre los visitantes que visitaban frecuentemente a la familia Du Maurier mientras Daphne crecía se hallaban J.M. Barrie, creador del personaje de Peter Pan, y el novelista y guionista Edgar Wallace, autor del guión original de KING KONG, que contribuyeron a excitar aún más su ya ávida y temeraria imaginación.

Siendo adolescente, Du Maurier ya había publicado algunos relatos cortos. En 1931, publicó su primera novela: Espíritu de amor, una historia de amor y pérdida relatada a través de tres generaciones de una familia de Cornualles, sometida al influjo del mar. A esta novela le siguió una serie de grandes éxitos literarios, tales como La posada de Jamaica y Rebeca, que posteriormente serían adaptadas a la gran pantalla y dirigidas por el entonces emergente maestro del suspense Alfred Hitchcock. Convertida ya en autora famosa y en la escritora –hombre o mujer– mejor pagada de su época, Du Maurier continuó disfrutando de tremenda popularidad con sus siguientes novelas: Frenchman’s Creek, Hungry Hill, Mary Anne, The Scapegoat, The Glass Blowers, The Flight of the Falcon, The House on the Strand y Rule Britannia.

Mi prima Rachel fue su octava novela y una de las más reseñadas, desplegando en ella su aguda visión del lado oculto de la psique humana y las complicadas vidas de mujeres fuertes e inteligentes, entre las cuales Du Maurier era ya enormemente popular. Aunque a menudo fue erróneamente etiquetada como escritora romántica, el hecho de que Du Maurier se negara a decantarse por una u otra opción respecto a la culpabilidad o inocencia de su personaje de Rachel convirtió a la novela en algo sumamente raro para su época; y también contribuyó a mostrar el audaz modernismo y profundidad psicológica de toda su obra literaria.

En la actualidad, la obra literaria de Du Maurier es inmediatamente reconocible por sus muchos admiradores. Rachel Weisz especifica: "Las historias de Du Maurier siempre tienen una trama muy sólidamente construida, un componente de suspense y misterio y, sobre todo, mujeres muy fuertes e interesantes. Eso es lo que hace que sus relatos sigan siendo tan cinematográficos".

El actor Iain Glen señala: "Yo creo que su forma de escribir era muy valiente. La historia de Rachel podría haberse contado más fácilmente de forma que se optara claramente por una visión o por otra. Du Maurier no lo hizo así. En vez de eso, como ocurre en la mejor literatura, ella situó la responsabilidad en el público en cuanto a qué pensar y sentir a ese respecto".

Grace Browning, la nieta de Daphne du Maurier, espera que esta nueva adaptación cinematográfica signifique para algunos volver a descubrir el placer de leer a Du Maurier y dé a conocer su obra a una nueva generación.

"Yo creo que en su literatura hay mucha más profundidad de lo que mucha gente inicialmente piensa. Daphne odiaba que después de Rebeca fuera tildada de escritora de novelas románticas. Muchos de sus relatos cortos son asombrosamente oscuros; nadie se podría imaginar que hubieran salido de su pluma. Los temas más habituales en su obra son la envidia, el engaño, la motivación de las personas y el carácter de los personajes". Browning resume: "Son temas extraordinariamente humanos que resultan relevantes en todo momento, y yo creo que por ese motivo la gente sigue leyendo su obra".