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La sombra de la ley cartel reducidoLa sombra de la leyDirigida por Dani de la Torre
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El actor gallego Luis Tosar y el director Dani de la Torre (El Desconocido) se reúnen de nuevo para rodar La sombra de la ley, una producción de Vaca Films, Atresmedia Cine y La Ley del Plomo A.I.E., en coproducción con FD Production (Francia), con la participación de Atresmedia, Movistar+, Canal Plus (Francia), Televisión de Galicia y Televisión de Catalunya, con el apoyo de ICEC y Programa Media.

Con guión de Patxi Amezcua (Atrapa la bandera, Séptimo), LA SOMBRA DE LA LEY se inspira en hechos históricos y quiere ser un reflejo de la sociedad española de principios del siglo XX, representando a través de sus tramas y personajes la vida y los conflictos de la época.

LA SOMBRA DE LA LEY relata una historia que nos ayuda a conocer, a través de acontecimientos pasados, cómo es España.


Apuntes del director
En palabras de Dani de la Torre: "Siempre he sentido fascinación por las películas de gánsters, por los alegres años veinte, la Ley Seca, sus luchas de poder, de corrupción y muerte. El arranque del siglo XX fue una época convulsa, llena de luchas sociales, sindicales y territoriales. De fondo, el jazz invadía los clubes de la ciudad y las faldas se recortaban por encima del tobillo: la discreción y el recato empezaban a pasar a la historia".

"En este contexto nuestro protagonista, Aníbal, tendrá una difícil misión que le llevará a convivir con empresarios sin escrúpulos, pistoleros a sueldo, peligrosos anarquistas y policía corrupta. Vivirá un viaje único donde luchará por sobrevivir, volverá a descubrir el amor y donde la única ley que impera es la de las armas: la ley del plomo".

"LA SOMBRA DE LA LEY es un thriller lleno de tensión y constantes giros en la trama, con gran peso de temas como el honor, la supervivencia y la lucha por encontrar el camino para lograr una sociedad más justa: conceptos tan clásicos como actuales, tan utópicos como reales".

"El film tendrá un ritmo y una acción muy contemporáneos: será como un Bourne de la época, donde convivirá lo clásico con un montaje trepidante, gracias a una cámara con nervio y movimiento".


Notas de producción
LA SOMBRA DE LA LEY es una película ambientada en los años veinte. Para recrear este periodo, el trabajo de decoración, escenografía, vestuario, maquillaje y peluquería es fundamental y para ello se ha contado con un equipo técnico de primer nivel con Juan Pedro Gaspar en el diseño de producción, Josu Inchaústegui como director de fotografía o Clara Bilbao en el diseño de vestuario. Pero también es parte integral del proyecto la intervención digital que se llevará a cabo con el prestigioso equipo de El Ranchito, liderado por Felix Bergés, reconocido por sus trabajos en Juego de Tronos, Un monstruo viene a verme o Ágora, entre otros.


Los personajes en las calles

ANÍBAL - LUIS TOSAR
Aníbal Uriarte es un agente de policía vasco extremadamente capacitado que es destinado a una Barcelona caótica e ingobernable. Un tipo duro, curtido, con un cierto toque de misterio y un halo de oscuridad: de pocas palabras, prefiere observar. Pese a tener que tomar determinaciones poco ortodoxas, posee un particular código moral.

Luis Tosar, que vuelve a trabajar con Dani de la Torre tras rodar juntos El desconocido, ha disfrutado con su personaje y asegura que Aníbal, el policía protagonista en La sombra de la ley, "es un rol de los que tanto me gustan: habla poco y se expresa sin palabras, con el cuerpo". "La película", continúa el actor gallego, ganador de tres premios Goya, "habla además de un momento político y social en España que nos remite a lo que ocurre ahora. Es un principio de siglo, y los principios de siglo siempre son convulsos. Hay mucha diversión por un lado y hay mucho caos también por otro".

Aníbal es un personaje rico, lleno de matices, que vive una gran evolución, casi un camino por redescubrirse: se nos presenta casi como un antihéroe moderno, infiltrado con buenos y malos, operando en una ciudad caótica y sin ley, y lidiando con demonios internos y un pasado convulso.

A su lado, tres "instituciones" que complicarán su trabajo: la policía, representada en el corrupto inspector Rediú y sus compañeros; los gánsteres, con el Barón como figura indispensable, sin escrúpulos y llena de contactos; y los anarquistas, con dos vertientes opuestas, el diálogo de Salvador, y la acción extremista de León, y en el medio de ambos Sara, en quien Aníbal encontrará algo más que una aliada.Según el director, Dani de la Torre: "Aníbal es un policía duro, atormentado, honesto, sensible. La agresividad viene de haberlo perdido todo, absolutamente todo en la guerra del Rif: a su batallón; además, no tiene familia, está solo y herido en el mundo. Entonces desea cumplir la ley, hacer justicia, obedecer las órdenes: es un soldado y hace lo que le piden. Ahora bien, él está empezando a ver que las cosas no son como pensaba, y que las órdenes son muy difíciles de cumplir".

INSPECTOR REDIÚ - VICENTE ROMERO
Rediú es un hombre hecho a sí mismo, un tipo que tiene como deber hacer cumplir la ley, pero que vive totalmente al margen de la misma. Uno de tantos policías corruptos de la época. Ambiguo, sarcástico e irreverente, se verá envuelto en una trama de la que es difícil salir airoso.

"Es un hombre que se ha hecho a sí mismo, un buscavidas, un tipo corrupto, que conoce perfectamente las cloacas del estado y de la policía, donde se maneja muy bien", comenta Vicente Romero, quien ganó el premio al actor revelación de la Unión de Actores en 2003 por su rol en la serie Padre coraje, al lado de Juan Diego. Posteriormente ha seguido derrochando credibilidad en otros trabajos televisivos como Crematorio, Tiempos de guerra y Bajo sospecha, y en cine con títulos como Cuerpo de élite, Secuestro, Los Pelayos y Asesinos inocentes.

Romero coincidió con Luis Tosar en Celda 211, el thriller de Daniel Monzón, donde mantenían una relación de camaradería diametralmente opuesta a la que tienen en La sombra de la ley: aquí el espectador tendrá que descubrir si realmente les une la confianza... o todo lo contrario.

TÍSICO - ERNESTO ALTERIO
El actor que le da vida asegura que "es un personaje que cuenta algo de la oscuridad de esos años locos, pero también tenía un reverso tenebroso. Mi personaje tiene que ver con ese clima y con esa historia. Es un policía tremendo, alguien violento. Una mano ejecutora que no se cuestiona las órdenes, que las obedece a rajatabla. Y ahí encontró su lugar este hombre. Lleva a cabo estas órdenes. Es alguien que le gusta su trabajo y que lo hace".

Tísico es como el perro guardián de Rediú, su brazo ejecutor y también el cómplice en toda su corrupción, en el entramado que tiene montado de extorsiones. Siempre ha sido su mano derecha y, con la llegada de Aníbal, eso se empieza a desquebrajar, y comienza a sentir que su lugar, poco a poco, se va desplazando. Eso le crea mucha más crispación y malestar.

Ernesto Alterio acaba de cosechar un gran éxito dentro del elenco coral de Perfectos desconocidos, de Álex de la Iglesia, pero su carrera -en la que combina tanto la comedia como el drama, el cine como la televisión- incluye más de 60 créditos, donde destacan éxitos como la comedia musical El otro lado de la cama y su continuación Los dos lados de la cama, Días de fútbol, Los lobos de Washington o Más que amor, frenesí.

BELTRÁN - FREDI LEIS
"Es el más tranquilo de la banda, lleva consigo su libreta, y siempre lo apunta todo", asegura el músico gallego Fredi Leis, quien debuta en el cine con este papel de policía en La sombra de la ley.

Nació en Santiago de Compostela. Músico e intérprete, Fredi Leis compone, canta y toca el piano y ha publicado los discos Neón y Días Grandes.


Los personajes en las fábricas

SARA - MICHELLE JENNER
Sara lleva la lucha en la sangre, es hija de Salvador, líder de los anarquistas en Barcelona. Pese a su juventud, tiene las ideas claras y pelea por destacar con pragmatismo, a veces, demasiado. Es una mujer moderna, adelantada a su tiempo, idealista, inquieta, osada, con resolución y madurez.

Michelle Jenner, que interpreta a Sara, el principal rol femenino del film, comenta: "Me maravilló mi personaje y la película en sí: pensar que yo iba a poder encarnar a alguien tan fuerte, valiente, luchador... ¡Me encantó! No estoy acostumbrada a recibir personajes femeninos tan potentes como este. El reto ha sido dotar de fuerza, de toda la fuerza que me era posible, a este personaje en muchas de las secuencias. Y mantener esa energía, esa vitalidad y toda esa verdad en toda la película".

Según Dani de la Torre: "Sara es la luz de la película, el motor por el que cambian y van sucediendo las cosas. Sara es una luchadora, honesta, trabajadora, una amiga de verdad, que pelea por las compañeras, es fiel a sus amigos, pero sufre un incidente muy grave y su vida cambia. A partir de ahí se junta con personas que no son las indicadas y su viaje de ideales se transforma en un viaje complicado. Sara es una anarquista llena de ideales, luchadora, pragmática y que por diversas circunstancias se va radicalizando un poco más todavía en esa lucha que ella tiene. Su padre, Salvador, es el líder de los anarquistas de Barcelona. Y ella ha crecido siempre rodeada de eso, y es lo que siente también como suyo y por lo que lucha y en lo que cree".

Michelle Jenner ha obtenido gran fama a raíz de su intervención en la teleserie histórica Isabel, donde encarnaba a la reina del título, pero en cine su carrera también ha sido aplaudida por su intervención en films como Julieta, de Pedro Almodóvar o No tengas miedo, de Montxo Armendáriz.

SALVADOR - PACO TOUS
Salvador, líder de los anarquistas de Barcelona, es una buena persona, un idealista: "Un hombre admirado y referente ideológico para sus compañeros, condena la violencia y busca avances a partir del diálogo, de las huelgas y de las manifestaciones. Esto, unido a su don de gentes, provoca incomodidad entre la facción más dura del anarquismo. Es, asimismo, el padre de Sara, a quien ha inculcado sus más hondos valores", afirma Paco Tous, veterano y solvente actor andaluz, curtido en series de televisión como Los hombres de Paco, La peste y La casa de papel, y en largometrajes que van desde La puerta abierta a Cuerpo de élite, pasando por 23-F: la película, donde encarnó al mismísimo militar golpista Antonio Tejero.

LEÓN - JAIME LORENTE
"León es la otra cara de la lucha anarquista, la representación de una nueva generación, más partidaria de las armas que de la palabra. Se trata de un hombre de acción, radical y algo violento. Salvador es un escollo en su camino, pese a la fascinación que siente por Sara, su hija", comenta Jaime Lorente, joven actor que ha intervenido en teleseries como La casa de papel y la inminente Élite. En cine ha intervenido en Todos lo saben, de Asghar Farhadi, al lado de Javier Bardem, Penélope Cruz y Ricardo Darín.


Los personajes en el club "El Eden"

EL BARÓN - MANOLO SOLO
El Barón es un gánster, uno de los mejor conectados de la ciudad. Regenta un music hall, El Edén, que es, al mismo tiempo, su centro de operaciones. Es carismático, peligroso e implacable y no le tiembla el pulso a la hora de liquidar a todo aquel que se antepone en su camino. Las prioridades son claras para él: el dinero en primer lugar, y la corrupción como arma para conseguirlo.

"Es un tipo que ha montado una especie de pequeño imperio de corrupción, que tiene a todo el mundo pillado, pues maneja información de todos. Está en una partida de póker, siempre intentado jugar las mejores cartas", comenta Manolo Solo, un actor mayúsculo con multitud de créditos en su carrera, donde destacan los impresionantes diez minutos de aparición en Tarde para la ira que le reportaron un Goya: pero además ha trabajado con Guillermo del Toro (El laberinto del fauno), Daniel Monzón (Celda 211) o Alberto Rodríguez (La isla mínima, La peste), entre otros muchos cineastas.

LOLA MONTANER - ADRIANA TORREBEJANO
De aspecto poderoso, bella y sensual, Lola es la estrella de El Edén, el music hall regentado por el Barón. "Pese a su apariencia, es una mujer frágil. Se encuentra en un momento personal muy dulce, ha encontrado el amor y va a casarse. Sus planes se truncarán de un modo dramático y el responsable está más cerca de lo que imagina", comenta Adriana Torrebejano, actriz todoterreno a quien se ha podido ver en series de televisión como Tierra de lobos, Hospital central, El secreto de Puente Viejo y Cuerpo de élite.


El contexto histórico
En 1921, España estaba sumida en una crisis importante, estábamos en guerra contra Marruecos en el Rif, con miles de bajas y unas pérdidas económicas enormes. Era una etapa muy convulsa en nuestro país a nivel político, pues los trabajadores exigían cambios en sus vidas, en sus jornadas laborales, y un sueldo digno.

Pero los años 20 también son una época luminosa: las mujeres luchaban por el derecho al sufragio, el jazz invadía los clubes de la ciudad, las faldas se recortaban por encima del tobillo y la discreción y el recato pasaban a la historia.

Sorprende la vida nocturna de esos años, con numerosos clubs, música y diversión: una época moderna comparada con los años que vendrían después. La película también refleja esto. Asimismo nos muestra que muchos de los conflictos de antaño perviven y son muy reconocibles en la sociedad actual.

Con guion de Patxi Amezcua, La sombra de la ley se inspira en hechos reales y narra una historia que nos ayuda a conocer, a través de acontecimientos pasados, cómo es el país en el que vivimos. Es una película de gánsteres, un thriller de suspense, surcada de momentos trepidantes. Con elementos de cine histórico y social, presta mucha atención al drama personal de los protagonistas, mostrándonos también una historia de amor en medio de un contexto socio-político complejo y adverso. La sombra de la ley muestra un periodo apenas retratado en el cine español, una época de cambio, de luces y sombras y de avances para la mujer.

Así, la película está ambientada en los "felices años 20", etapa convulsa, revolucionaria y en la que se fraguaron muchos de los grandes avances del siglo XX, período de entreguerras, plagado de luchas sociales y territoriales. Son los años de la guerra española contra Marruecos y en Barcelona la etapa del pistolerismo, marcada por los continuos enfrentamientos entre pistoleros, matones, anarquistas y policía corrupta.

Dani de la Torre, quien con su primera película El desconocido fue aclamado por público y crítica, comenta: "Rodar una película de gánsteres en España no se había hecho antes. La sombra de la ley es un film de aventuras y acción, pero con corazón: retrata una etapa histórica poco conocida pero apasionante. España era entonces un auténtico polvorín. Con mi película quiero, por encima de todo, entretener al espectador: que el público viaje con nosotros y se emocione con nuestra historia".

Emma Lustres, productora de Vaca Films afirma: "La sombra de la ley es cine de entretenimiento, de calidad y prestigio, destinado al gran público. El espectador va a viajar en el tiempo a la vez que se va a mantener pegado a la butaca. Fue muy laborioso recrear esos años veinte, un momento de reivindicaciones, bastante desconocido pero vibrante, de grandes cambios y luchas sociales, una etapa apasionante porque fue entonces cuando nació la España moderna. El trabajo con Atresmedia Cine, con Mercedes Gamero y todo su equipo, ha sido una experiencia estupenda: estamos entusiasmados con la película. Y Dani de la Torre es, sin duda, de los pocos directores que en España posee la capacidad de hacer una película de esta envergadura. Para nosotros es un lujo trabajar con él".

Por su parte Mercedes Gamero, productora de Atresmedia Cine, añade: "Estamos entusiasmados con esta nueva colaboración con Vaca Films y Dani de la Torre tras el gran recibimiento que obtuvo El desconocido. Nos ilusiona enormemente invitar al espectador a que nos acompañe en este viaje a los locos y fascinantes años 20".


Recreación de una época convulsa
De un modo más particular, la película es también un retrato de la Barcelona de la época, cuna de las revueltas obreras y la lucha de clases en nuestro país. Todo ello conforma un contexto enormemente atractivo en el que situar a los protagonistas de nuestra historia, pero donde también los personajes están en constante peligro.

La sombra de la ley cuenta la historia de una España, en la que muchas ciudades se encuentran sumidas en el caos por los continuos enfrentamientos entre pistoleros, matones, anarquistas y policía corrupta. En este contexto, un tren militar es atracado a su llegada a Barcelona. El agente Aníbal Uriarte llega a la ciudad para colaborar con la policía local y detener a los culpables del robo, pero Aníbal y sus formas no encontrarán el apoyo esperado entre la policía local.

La sombra de la ley es un film con marcados valores de producción, con un gran casting y con un alto nivel técnico. Dani de la Torre asegura que "Ese reto me atrapó poderosamente, pues aquí la estética es muy importante, lo que ha supuesto un gran esfuerzo y exigencia en todos los departamentos técnicos. Mostramos una época espléndida y cómo era este país hace un siglo. El gran desafío ha sido lograr que cada plano fuera espectacular."

"España era entonces un auténtico polvorín", continúa De la Torre: "El film tiene un ritmo y una acción muy contemporáneos: es un Bourne de la época, donde convive lo clásico con un montaje trepidante, gracias a una cámara con nervio y movimiento. Siempre he sentido fascinación por las películas de gánsteres, por los alegres años veinte, la Ley Seca, sus luchas de poder, de corrupción y muerte. El arranque del siglo XX fue una época convulsa, llena de luchas sociales. De fondo, el jazz invadía los clubes. Todo ello aparece en este thriller lleno de tensión y constantes giros en la trama, con gran peso de temas como el honor, la supervivencia y la lucha por encontrar el camino para lograr una sociedad más justa: conceptos tan clásicos como actuales, tan utópicos como reales".

A nivel técnico, todo ha sido cuidado con minucioso detalle. La fotografía ha plasmado las diferentes atmósferas recreadas por la compleja dirección de arte. Es una película con una potente carga visual, la propia época marca una estética auténtica y dota a la historia de una personalidad propia. Un film con un alto nivel de producción, especialmente en todos los aspectos visuales: fotografía, dirección de arte, peluquería y vestuario, que también marcará esa diferencia de clases, ese sueño por alcanzar el poder y la gloria, de perdurar en el tiempo, inspiración de lo que hoy se denomina moda vintage.

Dani de la Torre afirma que "es una película que te exige estar a un nivel muy potente. No vale cualquier figurante, ni cualquier traje, cualquier bigote, cualquier peinado, cualquier localización: tienes que escoger todo al milímetro, cuidarlo, atrezzarlo, mimarlo, tienes que meterlo dentro de esa época, para que ningún detalle te saque de la película, por eso es tan exigente para todos los departamentos".

La sombra de la ley es un film de época, de acción, cine negro, con un altísimo nivel de producción y en el que cada mínimo detalle está cuidado al milímetro, en todos los departamentos: "Respecto al equipo técnico" afirma De la Torre, "contamos con grandes profesionales con trayectorias avaladas y con los cuales ya hemos podido trabajar anteriormente, como el director de fotografía Josu Incháustegui, el director de arte Juan Pedro de Gaspar, el montador Jorge Coira, el músico Manu Riveiro, la jefa de vestuario Clara Bilbao, la jefa de maquillaje Raquel Fidalgo o el jefe de sonido David Machado. En definitiva, el objetivo es trasladar al espectador a la Barcelona de 1921: a sus lujosos palacios y viviendas burguesas, las lúgubres pensiones, los concurridos burdeles, las imponentes fábricas, las calles donde tranvías, coches, bicicletas y carros tirados por caballos conviven y luchan por no perecer y hacerse un hueco entre el barro de una época pasada y el asfalto que marca el inicio del futuro".

Según Emma Lustres: "¡La película ha sido un gran reto! Porque hacer un film de época, con los medios con que disponemos en el cine español, es un reto en sí mismo. Y sobre todo una película de época en la que hay acción, persecuciones de coches, disparos. En la que hay tantos personajes, decorados, tanto exteriores como interiores. Posiblemente el hecho de haber rodado en exteriores naturales, que hemos tenido que intervenir digitalmente tanto, ha sido uno de los retos más divertidos y más estimulantes. Ahí hemos contado con Félix Bergés y con el equipo de El Ranchito, que son magos del digital y han hecho un trabajo extraordinario, a primer nivel mundial: trabajan para Juego de tronos. Ellos también están muy contentos con el resultado, con la experiencia de hacer esta película nada habitual. Y es un trabajo muy creativo, muy minucioso y muy gratificante cuando ves el resultado".

Rodada el pasado verano en más de ochenta localizaciones de Barcelona y Galicia, la película ha contado con la colaboración de la Fundación Jorge Jove que ha aportado una colección de vehículos de época espectaculares y la Fundación del Ferrocarril de Galicia.


Aroma de clásico moderno
La sombra de la ley es una película de gánsteres, un thriller cargado de acción, suspense y momentos trepidantes con elementos de cine histórico y social, que también presta atención al drama personal de los personajes y sus luchas y conflictos internos. Podemos enmarcarla dentro del cine negro, tanto por su temática como por su tono (crudo y sin concesiones) y estética, muy cercana al clasicismo cinematográfico.

Temas tan universales como el honor, la corrupción, las luchas de poder, la familia, la supervivencia, la violencia o el bien común aparecen retratados en esta historia y narrados con un gran realismo y verosimilitud. "Todos estos elementos nos llamaron la atención desde el minuto uno y nos empujaron a apostar por una historia tan rica y un proyecto tan ambicioso que es una mezcla perfecta de entretenimiento y emoción", comenta De la Torre: "En mente tenemos referentes tan claros como Camino a la perdición, de Sam Mendes; Los intocables de Eliott Ness, de Brian de Palma; American Gangster, de Ridley Scott; Érase una vez en América, de Sergio Leone; Gangster Squad de Ruben Fleischer; o la serie de HBO Boardwalk Empire, donde grandes historias conviven con una puesta en escena elegante e impactante. Estos films nos parecen representativos de lo que hemos buscado, tanto a nivel narrativo como estético: cine de gánsteres con trasfondo, donde los personajes están llenos de conflictos, y con una cuidada dirección y ambientación que nos traslade directos a la Barcelona de 1921".

"En cuanto a la realización", continúa el director, "es una mezcla del estilo clásico que marca la época, pero también tiene mucha personalidad, es muy trepidante, alternado las secuencias más épicas, vertiginosas de acción, con los grandes planos generales donde vislumbramos una época hasta ahora inédita en la cinematografía de nuestro país. Me gusta darle personalidad a la cámara, que tenga presencia, que sea nuestros ojos y que nos conduzca a uno de los viajes más inéditos de nuestra historia".

La sombra de la ley es una historia donde el amor, el honor y la lucha por la supervivencia fagocitan los sueños de hombres y mujeres que buscan el camino a la justicia, el camino a la libertad. La historia de un país que camina sin retorno hacía su etapa más negra. La historia de un hombre que tuvo el destino de un país en sus manos.


Memoria del guionista (Patxi Amezcua)
Hace unos veinte años leí la biografía de Abel Paz sobre el legendario anarquista leonés Buenaventura Durruti. En aquel libro había decenas de historias, anécdotas y apuntes sumamente interesantes. Pero hubo un dato que llamó poderosamente mi atención: el 22 de enero de 1921, 36 cadáveres fueron ingresados en el Hospital Clínico de Barcelona. La mayoría eran anarquistas, pero también había policías, matones de la patronal e incluso algún empresario. Todas esas personas habían sido asesinadas en apenas cuarenta y ocho horas en una misma ciudad.

Me dediqué a investigar más sobre aquellos años y llegué a la conclusión de que la Barcelona de los años 20 era como el Chicago de los años 30, aunque los crímenes y ajustes de cuentas no eran motivados por la prohibición del alcohol, sino por los conflictos políticos y sociales que sacudían la España de la época. Barcelona se había llenado de pistoleros, matones, mafiosos, buscavidas, tramposos, chivatos, policías corruptos, políticos avariciosos, pistoleros anarquistas, matones de la patronal... Una "jungla humana" peligrosa pero fascinante.

Desde el principio tuve claro que los años veinte era la época perfecta y Barcelona el escenario ideal para una historia de gánsteres, para una película de cine negro. Una época oscura y dramática con personajes que luchan por sus ideales o por satisfacer sus deseos de poder o dinero.

Y todo ello con un trasfondo histórico muy potente dramáticamente. Con una guerra en África que culminaría en el desastre de Annual; con una lucha de clases entre los aristócratas, empresarios y privilegiados que pretendían mantener su estatus, y una clase obrera que reivindicaba derechos y mejoras en sus condiciones de trabajo y en su nivel de vida; con un movimiento anarquista cada vez más numeroso y poderoso, y en cuyo seno se producía un fuerte debate entre partidarios y contrarios al uso de la violencia como arma para conseguir la revolución; con una clase política incapaz de hacer las reformas políticas y administrativas que modernizaran el país.

La sombra de la ley arranca con el asalto y robo de un cargamento de armas que viajan escoltadas por un grupo de soldados en un tren de la compañía MZA (Madrid, Zaragoza, Alicante). A partir de ahí se desarrolla una trama policial para descubrir a los autores del atraco, antes de que los militares se harten de la situación y decidan actuar por su cuenta.

Los protagonistas de la historia son Aníbal Uriarte, un policía misterioso de la Brigada Social de Madrid que acaba de ser trasladado a Barcelona, y Sara, una joven anarquista idealista y valiente. A través de ellos he intentado escribir un guion con tramas propias del género policial y del cine de suspense más moderno, pero con unos personajes y un trasfondo propio de las películas de cine negro clásico.