Un Certain Regard - Sección Oficial Cannes (2017).
Reparto: Ivan Barnev, Georgi Kadurin, Borisleva Stratieva, Anna Komandareva, Vassil Vassilev
Notas de producción
La película nació en el asiento trasero de un taxi en enero de 2015. El conductor hablaba sobre cómo los taxis en Sofía se habían convertido en una alternativa para los servicios sociales en Bulgaria: es lo primero que la gente intenta para ganarse la vida tras quedarse sin trabajo. Mi compañero, me decía, había sido recientemente despedido de su puesto como experto en física nuclear en la Academia de Ciencias de Bulgaria. Me contaba historias de colegas profesores, científicos, curas, músicos o panaderos que conducían taxis de noche para sobrevivir y poder pagar sus facturas. También me contó el chiste sobre Bulgaria como "el país de los optimistas" ya que los realistas y los pesimistas ya se habían marchado hacía tiempo.
Empecé a trabajar en el guion después de charlar con un hombre cuya historia parecía encajar con mi idea sobre los taxistas: había estado conduciendo toda la noche, más de 40 0 kilómetros, para llegar a tiempo al hospital para su propio trasplante de corazón. En el proceso de escritura escuché cuidadosamente a muchos taxistas que parecían tener un sentido de la realidad social bastante acertado. Ellos compartían su punto de vista sobre un país totalmente carente de espíritu, en el que la pobreza y la desigualdad en aumento acompañaban a una omnipresente sensación de fracaso. Para un gran número de personas, el sueño de una vida respetable ha sido reemplazado por una lucha para sobrevivir día a día. Cómo médico que soy, con cinco años de experiencia en psiquiatría infantil, intenté imaginarme una cura para esta enfermedad social: ¿de qué manera podríamos conseguir un remedio? Llegué a la conclusión de que el primer paso para comprender y tratar a este tipo de pacientes podría ser hacer un inventario sincero de los aspectos disfuncionales de la vida en Bulgaria. Me dispuse a hacer de este inventario la banda sonora de la película. Mi mayor deseo es que la película deje un poso emocional e invite al debate - tanto dentro como fuera del país - sobre dónde estamos como civilización y hacia dónde nos dirigimos.
La historia de Misho, el personaje que abre la película, está basada en un hecho real que galvanizó los sentimientos de la nación hace dos años. Numerosos detalles de la película están también inspirados en sucesos reales. Sin embargo, mi objetivo no era hacer una crónica de historias verídicas sino trabajar en una representación dramática de la verdad emocional, desde el núcleo de cada una de las situaciones. Para ello me aseguré de que Todor Todorov, uno de los psicólogos criminales más experimentados de Bulgaria, me ayudara en mis consultas sobre la esencia que cada uno de los personajes representaría.
Cada episodio de la película consiste en una única toma con ensayos previos. Las secuencias largas fueron todo un reto para el equipo pero acordamos que las interpretaciones debían ser auténticas y espontáneas para así acercarnos al realismo documental que buscaba. Trabajé un método muy ambicioso para conseguir fuertes emociones pero incluso en la intensidad de este terreno pudimos encontrar momentos muy agradables e incluso hubo sitio para bromas ocasionales.
Vivo en Bulgaria con mis dos hijos. Cuando los miro me doy cuenta que no puedo ayudarles mucho pero sí que me pregunto qué clase de mundo vivirán cuando sean adultos ¿qué es lo que exactamente podrán esperar de él? Y, sobre todo, ¿cómo podemos revertir el actual decli ve de los valores sociales y la ética? La hija de Misho la interpreta mi propia hija de 13 años. Aparece al principio, mirando con curiosidad a su padre, y al final caminando hacia el colegio por la nieve. ¿Podremos romper con el pasado y comenzar una vida nueva? DESTINOS es mi plegaria personal para mis hijos, para mi comunidad y para mi mundo.
Entrevista con Stephan Komandarev
P: DESTINOS presenta muchos temas con los que Bulgaria se está enfrentando en la actualidad ¿Esperas que suscite un debate público?
R: Esa fue la razón principal por la que hice la película. Quería provocar un debate sobre la situación actual en Bulgaria. El primer paso para intentar cambiar algo de una forma positiva es mostrar una imagen realista de la Bulgaria de hoy en día. Y esta no es la imagen que vemos en los medios de comunicación.
P: Cada uno de los episodios están rodados con una única toma ¿Por qué decidió hacerlo así y cuál fue la escena más difícil de rodar?¿Cuantas tomas tuvisteis que hacer antes de estar satisfechos con el resultado?
R: Lo decidimos así para crear una atmósfera de realismo y autenticidad pero tuvimos que ensayarlo muchas veces. Antes de que empezara el verdadero rodaje filmamos la película en su totalidad con una pequeña cámara y con todos los actores en el set. Esto fue de gran ayuda para todos. Lo editamos y terminamos con un corte de 110 minutos antes de comenzar el rodaje principal. Una de las grandes dificultades fue que los actores interpretaban a taxistas y tenían que representar sus papeles mientras conducían entre el tráfico real por las calles de Sofía. El primer episodio fue difícil, especialmente por el tráfico de la ciudad por las mañanas. En ese episodio necesitamos 10 tomas. El capitulo del puente también tuvo su dificultad. Dura 18 minutos, está rodado con tres directores de fotografía, con una cámara primero en el coche, después en el puente, luego en una grúa en la calle y finalmente en la parte trasera del coche. Aquí también hicieron falta diez tomas. Desde el punto de vista de los actores el más difícil de rodar fue el final, para el que también necesitamos filmar tres tomas.
P: En las notas de producción comentas que algunos de los capítulos están basados en experiencias reales. Como guionista y director ¿buscas una conexión con la realidad o prefieres trabajar en el campo de la ficción?
R: Algunos de los capítulos, efectivamente, están inspirados en hechos reales y para mí era importante mantener esta sensación de realidad, especialmente en esta película. Por supuesto, durante el desarrollo del guion, cambiamos muchas cosas para construir historias más potentes.
P: Tienes una nueva cinta en desarrollo. ¿Puedes contarnos de qué trata?
R: Durante nuestra preparación y búsqueda de localizaciones para DESTINOS, viajé 12.00 0 kilómetros a través de Sofía por la noche. Descubrimos que había tres tipos de vehículos que recorrían las calles de la ciudad: taxis, coches de policía y ambulancias. En este momento, estamos trabajando en historias que sucedan en coches de policía.
Biofilmografía Stephan Komandarev
Nacido en 1966 en Sofía, Stephan Komandarev se graduó en Dirección de cine y televisión en la Univer sidad de Bulgaria. Sus trabajos anteriores incluyen documentales y largometrajes multipremiados como El mundo es grande y la felicidad se esconde en cualquier esquina (2008), la primera película búlgara en llegar a la lista final de candidatas a los Oscar en 2010 en la categoría de Mejor Película de Lengua Extranjera y que se convirtió en la película de más éxito de la historia del cine búlgaro fuera de las fronteras del país. En 2014 dirigió El juicio, seleccionada como la representante búlgara a los Oscar en 2016. Otros de sus créditos son The Town of Badante Women (2009), Alphabet of hope (2003), Bread over the fence (20 02) y Dog´s a home (1999). En 2006 participó en el Festival de cine de Cannes como coproductor de la película de Bogdan Mirica Dogs que ganó el premio FIPRESCI de la crítica en la sección "Un certain regard". Stephan Komandarev fundó en 1999 Argo Film con el objetivo de producir largometrajes basados en personajes con fuerza e historias de alcance global sobre temas universales que tocan valores comunes y exploran los puentes entre diferentes culturas. Argo Film es productora de DESTINOS en coproducción con Aktis Film y Sektor Film.