Alex (Luke Wilson) es un escritor cuyos problemas con el juego le han puesto entre la espada y la pared, o paga a sus acreedores en menos de un mes o puede darse por muerto. Para ello necesita terminar su novela en menos de 30 días. Para acelerar el proceso contrata a una mecanógrafa a la que dictarle los textos, Emma (Kate Hudson). Pero pronto descubre que su nueva empleada no es una cualquiera, ya que pronto empieza a opinar sobre sus ideas para la novela y a darle consejos a todas horas sin que los haya pedido. Poco a poco ésta empieza a influenciar a Alex y su historia, haciendo que la ficción de su libro termine convirtiéndose en realidad.