Twentieth Century Fox presenta una producción de Blue Sky Studios, "Espías con disfraz", una comedia animada de aventuras con espías ambientada en el mundo del espionaje internacional de altos vuelos. "Espías con disfraz" está dirigida por Troy Quane y Nick Bruno a partir de un guión de Brad Copeland y Lloyd Taylor y una historia adaptada de Cindy Davis inspirada en el cortometraje animado "Pigeon Impossible" de Lucas Martell. La película cuenta con las voces de Will Smith, Tom Holland, Rashida Jones, Ben Mendelsohn, Reba McEntire, Rachel Brosnahan, Karen Gillan, DJ Khaled y Masi Oka. "Espías con disfraz" está producida por Peter Chernin, Jenno Topping y Michael J. Travers, p.g.a., con Chris Wedge y Kori Adelson como productores ejecutivos.
Lance es arrogante y derrocha confianza en sí mismo. Es el mejor espía del mundo, el mejor de los mejores agentes del espionaje internacional y su lema "Yo voy a mi aire", lo dice todo. Lance es alto, anguloso, viste muy bien y es súper guay. Todo el mundo conoce su nombre, y sus fans lo saludan con aplausos. Además está acostumbrado a llevar los dispositivos de espía más modernos y "guays", incluido su vehículo deportivo de dos plazas de última generación, el Audi RSQ e-tron. Así que tanto Lance como el resto de los agentes dependen de esos pequeños genios de la tecnología que diseñan todos esos artilugios para La Agencia.
Uno de esos genios es el torpe pero adorable Walter Beckett. Walter es lo opuesto a Lance: es un sabiondo encantador y bajito que se decanta por lo práctico y lo funcional a la hora de vestirse; es un genio, no un atleta. Es cierto que la mayoría de los artilugios que se diseñan en La Agencia están destinados a destruir y matar, pero Walter, que se graduó de MIT a los 15 años, tiene una perspectiva diferente y diseña dispositivos que son muy efectivos pero no causan daños.
Por ejemplo, cuando se le asigna la tarea de crear una granada, inventa un dispositivo que explota con un destello y crea la imagen de un adorable gatito. ¿Por qué? Walter está convencido de que ver a un gatito libera serotonina. De esa forma, quien lo ve se siente feliz, se vuelva menos agresivo y se distrae. Es mucho más seguro que una granada que causa mucha destrucción.
Mientras Lance piensa que hay que combatir el fuego con fuego, Walter cree que esa actitud es sumamente destructiva. Si Walter pudiera salvar al mundo con un abrazo, lo haría.
Sin amigos, salvo su fiel mascota, una paloma llamada Lovey6, los compañeros de trabajo de Walter en la Agencia lo consideran un bicho raro, pero su difunta madre policía lo crió para creer en sí mismo y en sus ideas poco convencionales. A Walter y a su madre les gustaba llamarse el "Extraño Equipo".
Lance y Walter trabajan en La Agencia que dirige Joy Jenkins (Reba McEntire), a quien Lance llama cariñosamente "Joyless". Ella es un hueso duro de roer. Es dura y exigente, no tiene muchas debilidades, pero una de ellos es Lance. Su amor se pone a prueba porque la agente de Asuntos Internos Marcy Kappel (Rashida Jones) tiene pruebas que demuestran que Lance ha robado un avión no tripulado infaliblemente mortal del laboratorio encubierto de armas de La Agencia. Lo cierto es que esta arma, el M-9 Assassin, está en manos del supervillano Keller "Robohand" Killian (Ben Mendelsohn), disfrazado de Lance. Killian es un criminal cuya identidad real desconocen las autoridades mundiales. Perdió la mano derecha y ahora lleva una garra robótica, de ahí su apodo.
Joy no acaba de creerse que Lance lo haya hecho, pero Marcy, con ayuda de su agente de video vigilancia y análisis Eyes (Karen Gillan) y del experto en análisis de audio Ears (DJ Khaled), está decidida a arrestarlo.
Lance sabe que el responsable es alguien muy malvado así que se ve obligado a actuar como un granuja para detenerlo. Lance consigue escapar de Asuntos Internos y logra huir de la sede de La Agencia. Se acuerda de que Walter dice ser capaz de hacer desaparecer a una persona, así que se dirige a casa de Walter en busca de esa nueva tecnología. Walter ha estado trabajando en un invento denominado ocultación biodinámica, un elixir que hace que quien lo ingiere se convierte en algo que pasa desapercibido para casi todo el mundo, lo que les permite desaparecer a simple vista.
Cuando Lance bebe la fórmula sin querer, se transforma en una paloma. Como dice Walter: ¡Las palomas están en todas partes, y nadie les presta atención! ¡Es la encarnación más perfecta de un espía!"
Lance, que siempre ha creído que las palomas son como "ratas con alas", está horrorizado y exige a Walter que lo libere de inmediato. Pero Walter aún no ha descifrado una fórmula para revertir su invento de ocultación. Atrapado en el cuerpo de una paloma, nuestro afable superespía lucha por adaptarse a su nuevo cuerpo. Además, es alguien que siempre ha ido a su aire y de repente forma parte de una bandada, rodeado por un trío de palomas.
Y Walter, que no está preparado para el trabajo de campo, termina allí, mientras trata desesperadamente de encontrar el antídoto del elixir. A medida que aprenden a trabajar juntos para evitar que Robohand destruya a la humanidad con el Assassin, Lance empieza a adoptar un enfoque completamente nuevo y "extraño" para salvar al mundo de Walter.
Una auténtica película de espías, pero animada
Los directores Troy Quane y Nick Bruno estaban entusiasmados porque estaban convencidos de que podía ser la primera aproximación de un niño a las películas de espías. Así que para ellos era importante que "Espías con disfraz" abarcara todos los elementos familiares del género: escenarios internacionales exóticos, imágenes deslumbrantes, escenas de acción trepidante, artilugios futuristas y una gran banda sonora con un tema memorable. Así que revisaron algunas de las películas de más éxito del género para sumergirse en su característico aspecto elegante y estilizado.
Después imaginaron qué pasaría si sustituían a los héroes de esas películas por una paloma. Y descubrieron que cuanto más realista y guay era el atrezzo, más divertida resultaba la paloma como centro de la historia.
Bruno afirma: "No queríamos hacer una parodia. Queríamos hacer una auténtica película de espías que resulta ser una cinta de animación".
Quane añade: "Ambos nos decantamos por una idea de lo más extravagante: un hombre que se convierte en una paloma, un auténtica pasada".
Lo que hizo que la idea de Walter fuera tan brillante es que las palomas son criaturas increíbles, ¡y son el disfraz perfecto! Bruno lo explica: "Están en todas las ciudades del mundo. Nadie les presta atención. Nadie se da cuenta de que están por todas partes. Así que resultan invisibles a simple vista. Al tener los ojos a los lados de la cabeza, su campo visual abarca casi 360 grados. Esto significa que siempre verte la cara y su trasero. Y no hay manera de acercarte sigilosamente a ellas".
"Porque se irán volando", dice Quane. "Son una de las aves más rápidas del mundo. Pero al ser tan veloces, ven a una velocidad más rápida que nosotros, así que todo les parece que discurre a cámara lenta. Por esa razón se ha descrito a la paloma como "dos ojos con alas". Ven luz ultravioleta, bandas de luz que el ojo humano no es capaz de ver".
Quane continúa diciendo: "Puede parecer una broma, pero lo cierto es que es la mejor cobertura para un espía. Nadie sabe que estás ahí. Tienes todos esos artilugios integrados. En realidad es genial, como lo son todos los artilugios de Walter".
Por ejemplo, Walter desarrolla un dispositivo de protección personal llamado "abrazo inflable". Cuando lo llevan, las personas quedan envueltas en una cómoda burbuja para evitar daños. Otro se llama el multi-bolígrafo. Aunque a simple vista parece un bolígrafo multicolor tradicional, en realidad tiene funciones como la capacidad de disparar "serious string" (como el artículo de broma que lanza hilos de espuma Silly String pero en serio) para atar a los malos. Puede rociar un suero que, junto con una pizca de lavanda, hará que el mayor villano revele la verdad.
También puede disparar una descarga eléctrica no letal que hace que quien lo recibe pierde todo el control muscular y queda atrapado en una masa gelatinosa.
Los personajes (y los actores que los encarnan)
Además de ser una película de espías, "Espías con disfraz" es una comedia de colegas cuyo humor se basa sobre todo en las diferencias entre sus dos protagonistas. Lance y Walter son la típica "extraña pareja". A los realizadores les resultó fácil crear a Lance Sterling, su héroe de acción. Bruno recuerda: "Nos dijimos que teníamos que crear al héroe de acción más guay del mundo. ¿Y quién es el nuestro? Pues Will Smith".
Bruno continúa diciendo: "Que se incorporara al proyecto fue un sueño hecho realidad. Como actor, le interesan sobre las historias y la narración y hacer la mejor película posible. Fue un gran colaborador durante todo el proceso y ayudó a dar forma al personaje de Lance".
Quane señala: "Lance es un personaje bastante directo. Tiene confianza en sí mismo, le gusta ser el centro de atención, hacerse el héroe y que le hagan la pelota. Pero es bastante engreído así que había que conseguir cierto equilibrio".
Continúa diciendo: "Tiene un carisma especial, y si buscas la palabra carisma en el diccionario, es Will Smith".
Walter no fue tan fácil porque no querían que fuera el típico informático o científico rarito que es objeto de todo tipo de bromas. Bruno lo explica: "Todos tenemos una idea de cómo es el típico héroe o espía superguay, pero queríamos que el personaje resultara creíble. Así que para nosotros era muy importante que tuviera una imagen positiva para que los niños quisieran parecerse a Lance Sterling y al mismo tiempo comprendieran que, al igual que le ocurre a Walter Beckett, llevan a un héroe dentro de ellos".
Quane lo explica: "Queríamos que el público se riera de las cosas que hace o de las situaciones en las que se mete, pero Walter es un tipo muy inteligente, así que no quieres que parezca un tonto. Pero está claro que en el mundo real se siente como un pez fuera del agua. Es un intelectual, pero también está muy comprometido con sus ideas y aunque es muy efectivo, no es agresivo como Lance. Encontrar ese equilibrio fue muy complicado, pero cuando nos reunimos con Tom Holland, supimos que habíamos encontrado a nuestro Walter. Tom tiene ese encanto y esa franqueza que encajan a la perfección con Walter".
El actor que saltó al estrellato como Spider-Man en "Spider-Man: Homecoming" y "Vengadores: Infinity War", afirma: "Nick y Troy tenían una visión tan clara de lo que querían hacer, son tan perfeccionistas, lo que es una gran cualidad para una película como esta, que querían asegurarse de que cada diálogo fuera absolutamente perfecto. Y trabajar con ellos ha sido muy divertido. Nos conocimos por primera vez en Montreal. Cenamos en un restaurante que estaba en una azotea. Nos entendimos enseguida y me encantó la idea de trabajar con ellos".
Holland describe así a su personaje: "Walter es un chico muy feliz y afortunado. Es muy positivo y le encanta utilizar su cerebro para hacer el bien y para marcar la diferencia en su trabajo. Además está entusiasmado con la idea de correr una aventura y hacer un trabajo de campo. Pero lo más entrañable de él es que intenta cambiar la forma de pensar de La Agencia. En vez de hacer explotar a las personas y matarlas, trata de que todo el mundo sea feliz, positivo y esté a salvo. Una idea realmente bonita".
Holland lo explica: "Una de las grandes diferencias entre nuestros dos personajes es que a Lance le encanta la acción, luchar y pelear y ser un superespía. Por el contrario, Walter es alguien que quiere ayudar a los demás. Quiere desarrollar su trabajo pero sin que haya víctimas. Tiene un dispositivo llamado Kitty Glitter que lanza destellos por todas partes y calma a las personas hasta el punto en que ya no quieren hacer cosas malas. Mientras que Lance solo necesita una buena granada. Así que es divertido ver las bromas que hacemos Will y yo sobre la forma de usar una granada, el Kitty Glitter o el abrazo inflable, esos artilugios extravagantes y sorprendentes. Así que nos lo pasamos en grande".
Holland opina sobre su coprotagonista: "Es genial. Aporta una energía efervescente a su personaje que resulta tan contagiosa que no puedes evitar reírte de todo lo que dice. Sobre todo cuando es una paloma, porque Will tiene una voz muy reconocible. Enseguida te das cuenta de que es Will Smith, y verlo como una paloma es increíblemente divertido".
Al hablar de su experiencia en la película, dice: "Ha sido genial y me ha encantado formar parte de este proyecto. Siempre encuentras pequeñas cosas con las que identificarte con tu personaje, pero no siempre reside en tu aspecto o en tu forma de actuar, sino en la forma en que vives tu vida. Me encanta que transmita un mensaje positivo a los niños al decirles que la violencia no es la respuesta y que la amistad es más importante que cualquier otra cosa".
El proceso de diseñar a la pareja fue igual. Lance surgió de inmediato, pero pasó un tiempo antes de que Walter apareciera. Al final, gracias al trabajo del diseñador principal de personajes Jason Sadler, el equipo de realización logró ver a los dos personajes sin escucharlos decir una palabra o verlos moverse y saber quiénes son.
Lance está hecho para el mundo del espionaje: Mide 1,95 y tiene 104 kilos de puro músculo, con hombros anchos, un torso estrecho y piernas extremadamente largas. Es elegante, sofisticado, fuerte y atlético y da la impresión de que podría enfrentarse a cualquier cosa. Eso significa líneas rectas, formas anchas, limpias. Consiguieron el diseño rápidamente y se convirtió en el núcleo alrededor del cual giraba todo lo demás.
Fue más difícil definir la personalidad y el carácter de Walter y también su diseño físico. Los realizadores no querían crear un personaje del que es fácil burlarse, pero también necesitaban que fuera el opuesto de Lance.
Walter tiene una envergadura más reducida. Mide 1,62 m y es muy enjuto. Trabaja muy duro y se siente poco apreciado y subestimado, así que no cuida mucho su apariencia. Pero es un optimista muy inocente.
Una de las grandes diferencias entre Lance y Walter es su filosofía del trabajo. Lance va a su aire, pero la razón principal para estar solo es que no quiere que los que están a su alrededor resulten lastimados. Por su lado, Walter cree ciegamente en el trabajo en equipo, algo que Lance se ve obligado a aceptar cuando se transforma en una paloma y está rodeado por otras tres palomas conocidas como "La Bandada".
Pero a Lovey, la fiel mascota de Walter y la más inteligente de las tres, le atrae inmediatamente el magnetismo de paloma de Lance, y necesita acercarse constantemente a él. Los torpes movimientos de Fanboy lo diferencian de las otras aves, pero nada le impedirá tratar de imitar el estilo elegante de Lance, su héroe. Y Crazy Eyes, con su característica piruleta pegada en la cabeza, es ese pájaro que picoteará y comerá cualquier cosa sin pensar en las consecuencias y, sin saberlo, acabará yendo al rescate del equipo en muchas ocasiones.
Como en todas las películas clásicas de espías, tenía que haber un gran villano, un enemigo que pusiera en marcha la trama y desafiara a los héroes. Pero era importante que sus actos tuvieran motivaciones reales.
Quane lo explica así: "Robohand es un villano misterioso y aterrador, y para nosotros era muy importante que su identidad y sus motivaciones fueran algo misteriosas. Está claro que tiene algo que ver con nuestro héroe, Lance Sterling. Tiene un plan para vengarse. Queríamos que pareciera aterrador y amenazante, de modo que cuando revelamos su identidad, no solo damos a conocer su plan, sino también los motivos que lo impulsan".
Ben Mendelsohn, que da voz a Killian, es conocido por aportar intensidad y dimensión a personajes de sinvergüenzas y delincuentes, en películas como "Rogue One: Una historia de Star Wars", "El caballero oscuro: La leyenda renace", "Animal Kingdom" y "Suavemente me mata", así como la serie de Netflix "Bloodline", que le valió un Premio Emmy®.
Quane apunta: "Ben es capaz de poner una voz aterradora pero la dota de emoción y eso te hace comprender que es alguien que está sufriendo".
Mendelsohn lo explica: "Killian es lo que Lance necesita para ser Lance. Para que haya un Lance Sterling, debes tener un Killian. Y Killian es el otro extremo del espectro de los buenos/malos. Killian es un súper villano. Es un tipo que siembra la muerte y la destrucción. Son los viejos paradigmas de cómo se ven los buenos y los malos. Son muy dominantes y ejercen una enorme influencia en la manera de vernos a nosotros mismos y sobre todo en nuestra forma de juzgar a los demás. Son las ideas y los conceptos propios de la Guerra Fría y antes de la Guerra Fría, y funcionaron durante mucho tiempo. Walter es un soñador que piensa que las cosas se pueden hacer de otra manera si encuentra la forma de presentarlas bien".
Quane lo explica: "Estas películas son míticas, icónicas. Queríamos que nuestro héroe y nuestro villano empezaran teniendo ese estatus. Lance es lo más... es genial, agradable, un poco fanfarrón, siempre sabe lo que tiene que decir. Es el bueno de la película. Y después está el tipo con la mano de robot que acecha en la sombra, dice cosas horribles y es muy violento. Así que enseguida sabes que es el malo. Después, a medida que avanza la película, intentamos desdibujar esas líneas tan claras para que el héroe tenga sus defectos (carece de empatía y emplea la violencia) y el villano también es desgraciado porque ha sufrido una gran pérdida".
Y añade: "Había que encontrar un equilibrio muy delicado porque tampoco queríamos decir que el malo es un buen tipo. Queríamos decir que el malo vive un conflicto".
Bruno apunta: "Walter cree que si somos los buenos, tenemos que mantener un nivel más alto y hacer las cosas bien. Al principio, eso resulta extraño en el mundo de Lance".
Quane dice: "Después, Lance empieza a darse cuenta que su versión intransigente de lo bueno y lo malo no es la única versión".
Otro obstáculo para Lance y Walter es Marcy, la agente de Asuntos Internos que les sigue el rastro. Quane lo explica: "Marcy es fuerte, competente y durante la mayor parte de la película tiene muy claro lo que es correcto y lo que no lo es. Pero esa forma de pensar se va volviendo menos contundente. Se da cuenta de que hay muchas tonalidades de gris entre lo que está bien y lo que está mal".
Bruno recuerda: "Encontrar a la actriz que le pusiera voz a Marcy fue complicado porque su personaje es diametralmente opuesto a Lance Sterling. Así que, ¿cómo encuentras a alguien que pueda plantar cara a Will Smith, a su arrogancia y a su personalidad? Pero Rashida Jones es eso y mucho más. Puede ser dura, súper inteligente, profesional, pero es muy divertida y aporta una maravillosa dosis de humanidad a un personaje que al principio se atiene a pies juntillas a las reglas. Pero poco a poco vemos que se trata de una persona real, alguien que cree firmemente en el poder de un equipo y en la confianza".
La actriz ("Parks and Recreation") y guionista ("Toy Story 4") Jones dice: "Marcy es una mujer muy recta que sigue las reglas. Es como Tommy Lee Jones en 'El fugitivo': tiene una misión y es directa y perseverante. Sólo le importa atrapar a Lance Sterling y resolver el caso. Mientras a Lance le gustan los coches deportivos, los trajes elegantes y llamativos, a Marcy sólo le interesa hacer su trabajo de la manera más eficiente. No siente ningún interés por él".
Jones continúa diciendo: "Pero Marcy también es una negociadora muy hábil. Y cuando necesita actuar de negociadora es muy empática y tranquila y sabe cómo resolver una situación difícil. Sabe actuar con serenidad".
El ingrediente cómico lo aportan los cohortes de Marcy, Eyes e Ears, con la voz de Karen Gillan ("Vengadores: End Game" y "Guardianes de la galaxia") y DJ Khaled ("Dando la nota 3"), respectivamente. Jones dice: "Eyes e Ears forman un gran equipo. Son increíblemente intuitivos y saben cómo analizar cualquier situación sirviéndose de su experiencia y de su instinto, que son herramientas muy útiles a la hora de encontrar algo".
"Son sus Pepito Grillos", dice Bruno. "Eyes dirá: 'Sé que estás muy convencido de esto, pero lo que yo veo algo diferente.’ E Ears dirá: 'Sé que crees que es culpable, pero yo oigo algo más.’"
Quane añade: "Ayudan a Marcy a desentrañar la verdad".
Katsu Kimura, el pirata informático del inframundo, es el oscuro personaje responsable de robar The Assassin y de venderlo a Killian. Masi Oka, conocido por sus papeles en la serie de televisión "Hawai 5.0", "Mozart in the Jungle", "Héroes" y "Scrubs", es la voz de Kimura. Oka dice: "Katsu y Lance tienen un pasado en común. Así que no se sorprende cuando Lance se presenta en su escondite cuando está haciendo un trato con Killian. Es muy probable que lo estuviera esperando. Aunque Lance siempre gana, Katsu siempre ha logrado escapar y seguir haciendo lo que hace".
Y continúa diciendo: "Físicamente, Katsu es un gigante enorme, tremendamente imponente. Pero no usa la fuerza. No tiene necesidad de hacerlo porque sus secuaces de la Yakuza lo hacen por él. Utiliza su gran inteligencia, su ingenio y sus conocimientos tecnológicos para hacer su trabajo sucio".
Para el pequeño pero crucial papel de la madre de Walter, Wendy Beckett, los realizadores necesitaban a alguien que pareciera maternal y cariñosa. Pero también querían que no fuera la típica madre de la mayoría de las películas animadas. A diferencia de Walter, que en esas escenas es un niño inocente y amable que cree firmemente en unir a las personas, los realizadores pensaron que sería interesante que tuviese una madre que es una oficial de policía que se enfrenta a las duras realidades del mundo que vivimos a diario. Además tiene que saber valorar lo especial que es Walter y lo importante que es que siga siendo fiel a sus creencias, sin importar lo que digan otras personas.
Encontraron a su Wendy en Rachel Brosnahan, la estrella ganadora del Emmy® en la exitosa serie de comedia de Amazon, "The Marvelous Mrs. Maisel".
Brosnahan dice: "Está claro que Wendy adora a Walter. Y Walter es un niño rarito. Se siente atraído por cosas que no gustan a otros niños de su edad y eso lo hace diferente. Y aunque a veces a Wendy le molestan sus inventos y cómo interfieren en su vida cotidiana, lo apoya de todo corazón y lo anima a ser él mismo a pesar de sus rarezas. Aunque eso signifique que otros niños se burlen de él, le dice que sus peculiaridades se convertirán en superpoderes a medida que crezca. Creo que es una de las lecciones más importantes que su madre le enseña a lo largo de la película".
Brosnahan continúa diciendo: "Las rarezas también son superpoderes. Todos somos raros a nuestra manera. No existe lo normal. Sufres mucho mientras estás creciendo. Todo el mundo se esfuerza por alcanzar esa normalidad que en realidad no existe. No hay que esconder tus rarezas, hay que ser uno mismo y plantar cara a los demás. Y creo que esta película es tan bonita porque muestra que esas cosas que se interponen en tu camino cuando eres joven pueden, como en el caso de Walter, ayudar literalmente a cambiar el mundo".
Quane dice: "Rachel es cariñosa y algo excéntrica, pero la fuerza que ofrece en su interpretación es lo que infunde fortaleza a Walter durante el resto de la película. Y aunque no esté con él, sientes que su mano ayuda a Walter a convertirse en la persona que es. Solo la vemos en pantalla al principio, pero sentimos el efecto de su personaje durante toda la película".
Bruno añade: "Somos padres. Tenemos hijos. A menudo vemos como describen a los padres en las películas. Siempre parecen tan íntegros cuando no es así en la realidad. Queríamos transmitir esa realidad, esa honestidad que refleja cómo hablamos con nuestros hijos, como personas, no como bebés y niños. Rachel ha hecho un gran trabajo en ese aspecto".
Para dar voz a Joy Jenkins, la jefa de Lance y Walter en la agencia, los realizadores eligieron a una actriz que no tiene nada de triste. Se trata de la superestrella Reba McEntire ("Temblores" y serie de TV "Reba").
"Tenía que ser un auténtico infierno", dice McEntire. "Y efectivamente, ella lo es. Es una roca. Se llama Joy, así que uno pensaría que debe ser alegre y animada. Pero no, es todo lo contrario. Es muy inexpresiva. Su voz carece de entonación. Así que su apodo Joyless le queda muy bien".
Quane recuerda: "Ella estaba deseando hacer el papel porque era muy diferente a lo que suele hacer. Tiene una personalidad tan efervescente que a pesar de interpretar a un personaje tan serio, te parece divertida. Aportó un carisma muy sutil a un personaje que hubiera podido ser demasiado plano".
Los directores descubrieron que todas las voces no sólo eran grandísimos actores. También se mostraron como grandísimos colaboradores a los que les interesaba aportar ideas a la historia, salirse del guión y no sólo recitar sus diálogos. McEntire afirma: "Me encantó. Pensé que el proceso iba a ser más estricto y reglamentado, pero no lo fue en absoluto. Hubo mucha libertad, mucho toma y daca, mucha discusión y todos estamos contentísimos con lo que hemos conseguido. Esa es nuestra labor, que el personaje cobre vida y sea lo más interesante y entretenido posible".
A diferencia de otros aspectos de la animación en los que todo debe planificarse por adelantado, el único lugar donde reina una gran espontaneidad es la sala en la que se trabaja con los actores y donde surgen cosas que no esperabas en absoluto. A los directores les fascinó el aspecto de improvisación de la comedia. No querían que la comedia consistiera solo en frases divertidas. Querían ese ritmo y esas bromas que se dan en las comedias de colegas.
Quane dice: "Siempre estábamos buscando espontaneidad, y eso es algo difícil de representar cuando trabajas en una película animada que lleva mucho tiempo. Así que la mejor manera de hacerlo fue en esos momentos de improvisación, esos pequeños tartamudeos o imperfecciones. Esos momentos se producían en las sesiones de grabación y nos sirvieron para añadir realismo y frescura a las bromas. En medio de una toma, Rashida estornudó produciendo un gran estruendo y dijo: 'Ay. Perdón.’ Lo pusimos en la película y creamos un momento único".
El singular aspecto visual de la película
"Espías con disfraz" es una película que tiene su propio estilo y diseño además de una singular paleta de colores. Esto la ayudará a diferenciarse de otras películas de los Blue Sky Studios.
El diseñador de producción Michael Knapp ("Epic. El mundo secreto", "Ice Age: El gran cataclismo") quiso rendir homenaje a las películas clásicas de espías y creó lugares exóticos que abarcan todo el mundo, desde Washington D.C. hasta Japón, desde la Riviera Maya hasta el Mar del Norte, evocando un mundo muy contemporáneo con el que el público actual puede identificarse fácilmente. El concepto de 'espías guay' de la película, que recoge la idea del espionaje donde las cosas están ocultas delante tus ojos, se oculta bajo el estanque reflectante del Monumento a Washington. Está a la vista, pero no lo vemos nunca.
Los realizadores dieron muchas vueltas a los colores y a la iluminación que debería utilizarse en la película. Knapp creó un lenguaje de color donde los naranjas y los amarillos más cálidos representan el trabajo en equipo y la comunidad. El tono turquesa cálido representa a la Agencia, mientras que un tono frío de azul da una sensación de aislamiento. Por eso el esmoquin de Lance es de ese color... es un hombre que "va a su aire". El rojo indica peligro, así que cuando vemos a Kimura por primera vez, lleva una gran camisa de seda roja y está en un entorno rojo. Killian tiene un ojo que se pone rojo; El dron del Assassin tiene un ojo rojo.
Knapp dice: "Cuando diseñamos la escenografía y la iluminación en 'Espías con disfraz', planificamos muchas oportunidades para enmarcar a nuestros personajes utilizando campos de colores, luces y sombras audaces que perfilarían sus siluetas o resaltarían sus formas escultóricas estilizadas. Siempre intentamos recalcar el aspecto "gráfico" en nuestra forma de filmar y renderizar la película".
Esto también abarcó el lenguaje de la cámara. Lance, que prefiere trabajar solo, quiere estar aislado, así que lo vemos en tomas individuales, perfilado por la luz o destacando de todo lo demás en un fotograma desenfocado. De esta manera, el público puede ver y sentir el aislamiento que ha elegido. Por su parte, Walter se integra más en el entorno y la luz es más cálida y brillante.
El trabajo de cámara en la película se diseñó para dotarla del mayor realismo posible y para que estuviera a la altura de una película de espionaje moderna repleta de acción. Se tuvo mucho cuidado a la hora de emular el tipo de plataformas y movimientos de cámara que se utilizan en la acción real así como creando composiciones gráficas muy potentes que recordaran las icónicas películas de espías de los años 60. Era importante que las cámaras parecieran reactivas y no ensayadas y que los movimientos se refinaran después de la animación para que parecieran lo más espontáneos y orgánicos posible.
Bruno afirma: "Cada fotograma de nuestra película está meticulosamente diseñada por artistas y cada uno de estos casi 600 cien artistas manipula deliberadamente al público para que se sienta parte de ese fotograma. Así que, si queremos que te sientas triste, es posible que ni siquiera te des cuenta de que hay nubes, de que el ambiente es más gris y que nuestros personajes están un poco tristes y distantes entre sí. Pero cuando son felices, están juntos y están en el mismo fotograma y hay algo más de sol".
La música
La música es uno de los elementos principales en las películas de espías. Sirve para dar ese tono tan genial, lo mismo que la acción, la tensión y el suspense. Para crear la banda sonora de "Espías con disfraz", los realizadores recurrieron al compositor Theodore Shapiro, cuyos créditos incluyen "El espía", "Un espía y medio", "Tropic Thunder, ¡una guerra muy perra!" y "El diablo viste de Prada". El primer reto que plantearon Bruno y Quane a Shapiro fue componer un tema de héroes que se identificara inmediatamente con Lance Sterling en "Espías con disfraz", de la misma manera que sabes inmediatamente que estás viendo una película de James Bond o una de "Misión imposible".
Bruno recuerda: "Teddy tiene esta asombrosa habilidad para entrelazar drama y comedia. Sabe encontrar la comedia sin socavar la seriedad de la escena. Uno de mis temas favoritos es el de la madre de Walter, que solo sale al comienzo de la película. Pero logra que sientas su presencia durante toda la película".
El trabajo del editor de música Tom Drescher ("Tomorrowland: El mundo del mañana", "Maléfica") tuvo un enorme valor para el equipo de Shapiro ya que es un observador de aves y fue capaz de crear un conjunto de instrumentos de canto de pájaros que Shapiro incorporó a la banda sonora.
Quane dice: "Al leer el guión, ambos empezamos a oír ciertas canciones en nuestra cabeza, pensando en términos de ritmo para las secuencias de acción y en el estado de ánimo para otro tipo de secuencias. Las escribimos y cuando terminamos con el guión, nos dimos cuenta de que estábamos en la onda musical de Mark Ronson que es un genio utilizando sonidos clásicos y hacer que suenen muy contemporáneos. Después, le presentamos la idea a Ronson y le encantó. Se convirtió en el productor ejecutivo de la música de la banda sonora y escribió y colaboró en una serie de canciones originales que dan a la película su paisaje sonoro musical, esa fuerza y sofisticación y una atmósfera contemporánea que refleja muy bien la fanfarronería de Lance Sterling".
Vehícula super agente de Lance: El Audi RSQ E-Tron
Para "Espías con disfraz", Blue Sky Studios colaboró con Audi para crear el vehículo de vanguardia perfecto para el súper agente Lance Sterling: El Audi RSQ e-tron. Se trata de un modelo virtual futurista puramente ficticio diseñado exclusivamente para la película. El RSQ es un coche deportivo de dos plazas totalmente eléctrico que incluye muchas tecnologías que ya existen en los modelos reales de Audi o que están en fase de fabricación. Incluyen la conducción "consistentemente eléctrica" de Audi, espejos exteriores virtuales, luz láser, un velocímetro de holograma, conducción autónoma y Audi Al. A esto se suman todas las características especialmente diseñadas para su uso por agentes del futuro, como Lance Sterling.