León, de diecinueve años, regresa a casa para cuidar de su madre alcohólica y adaptarse a la vida de adulto después de una adolescencia que pasó entrando y saliendo del hogar de acogida. Frustrado por su falta de educación y sus sombrías perspectivas, León encuentra consuelo en el boxeo. Pronto conoce a la rebelde y hermosa Twiggy (Sophie Kennedy Clark), que vive de okupa en casas abandonadas para escapar de la insensata riqueza de su familia. Mientras los rumores de disturbios comienzan en las calles y la policía y los manifestantes cercan el vecindario, León debe decidir si unirse a sus amigos y luchar o buscar una nueva vida con Twiggy.
Con un telón de fondo turbulento, Obediencia (Obey) es una mirada cruda e inquebrantable de la lucha de un joven por mejorar cuando el mundo parece estar completamente en su contra.
El guionista y director Jamie Jones captura a la perfección la tensión inestable que impregnó uno de los períodos más violentos de descontento social en Londres. Y el recién llegado Marcus Rutherford, como León, ofrece una actuación asombrosa, llena de fuego, rabia y vulnerabilidad.