Los impostores es una película de Ridley Scott (Black Hawk derribado, Gladiator) que reúne en los papeles más importantes a Nicolas Cage (Adaptation, Leaving Las Vegas, Birdy, 60 segundos, Windtalkers), Sam Rockwell (Confesiones de una mente peligrosa, Bienvenidos a Collinwood, El último golpe, Los ángeles de Charlie, La milla verde), Alison Lohman (La flor del mal), Bruce McGill (Desmadre a la americana, El dilema, Atrapados sin salida, The Runaway Jury, Una rubia muy legal 2) y Bruce Altman (A propósito de Henry, Detrás de la noticia, Mr. Jones, El dilema, Inocencia interrupida).
Está producida por Jack Rapke, Ridley Scott, Steve Starkey, Sean Bailey y Ted Griffin, a partir de un guión de Nicholas Griffin y Ted Griffin, basado en el libro de Eric Garcia. Robert Zemeckis es el productor ejecutivo; John Mathieson, B.S.C., el director de fotografía; Tom Foden, el diseñador de producción; y Dody Dorn, A.C.E., la montadora. Charles J.D. Schlissel y Giannina Facio son los co-productores. El compositor es Hans Zimmer.
"A la gente le fascinan los timadores igual que le fascinan los gángsters - al menos los de ficción", dice el novelista Eric Garcia, cuyo manuscrito de Los impostores (Matchstick Men) se estaba pensando llevar a la pantalla incluso antes de que la editorial Random House pudiera fijar la fecha de su primera edición. "Hay algo mítico en ellos que hace que nos resulten atractivos y que queramos verlos en acción".
Reconociendo que la historia es realmente una comedia, "con humor a lo largo de toda ella", Scott comenta que "es también una especie de cuento moral, lo cual es aún más interesante porque está lleno de personajes que tienen un comportamiento muy reprobable. Para ellos, un buen día es cuando pueden quitarle unos cientos de dólares a un ama de casa en una lavandería automática. No son exactamente lo que llamaríamos delincuentes, pero están bastante cerca. Lo que podría salvarlos es que sus víctimas son gente que a su vez están buscando dinero fácil o haciendo cosas que no deberían hacer, así que es cuestión de que les pillen con los pantalones bajados".