Los Mercenarios tienen una nueva misión. En LOS MERCEN4RIOS la acción los llevará a Libia, a la antigua planta de armas químicas de Qadhafi donde tendrán que interceptar a Rahmat ‐antiguo traficante de armas británico que cuenta con su propio ejército privado- para evitar que robe detonadores de misiles nucleares para el malvado Ocelot. Si eso llegara a ocurrir, supondría el fin del mundo. Rahmat consigue hacerse con los detonadores y dar esquinazo a Los Mercenarios. La persecución prosigue en el buque Jantara, donde dará comienzo la verdadera acción y descubriremos las verdaderas intenciones de Ocelot.


SINOPSIS LARGA
Junto a un reparto plagado de estrellas, Lee Christmas (Jason Statham) regresa como líder de Los Mercenarios en la cuarta entrega de la saga, que, hasta la fecha, lleva recaudadas 800 millones de dólares.

Los Mercenarios vuelven más fuertes que nunca. A los miembros originales de la banda (Christmas, Barney, Gunner y Toll Road) se unen Marsh, Easy Day, Gina, Galan y Lash.

Tienen una misión, esta vez en la antigua planta de armas químicas de Qadhafi en Libia, donde deberán interceptar a Rahmat para evitar que robe los detonadores de unos misiles nucleares para el perverso Ocelot.

A bordo del icónico Antanov, Los Mercenarios vuelan hasta una base secreta de la NASA para truncar los planes de Rahmat. La Agencia de Inteligencia de los Cinco Ojos lleva buscando a este terrorista internacional, desde los tiempos de la Guerra Fría, y deben capturarlo antes de que sea demasiado tarde.

Rahmat es un traficante de armas británico que, con la ayuda de su propio ejército privado, roba los detonadores de unos misiles nucleares y consigue escapar antes de que Los Mercenarios puedan detenerlo. Si uno solo de esos detonadores llegara a manos de Ocelot, sería el fin del mundo.

Los Mercenarios ven huir a su enemigo pero no tardarán en atraparlo. Son siete mercenarios avanzando entre escombros y explosiones y Barney sobrevolándolos en un A1. Tras establecer contacto visual con Rahmat, se produce una gran pelea, y de entre el denso humo negro y lo que queda del avión destruido de Barney, Rahmat logra huir en su propio avión con los detonadores.

Tras el fallido intento de capturar a Rahmat, la persecución prosigue en el buque Jantara, lugar en el que dará comienzo la acción más trepidente y descubriremos las verdaderas intenciones del malvado Ocelot.