Dos cineastas y amigas de infancia enfrentan los desafíos del desarraigo mientras intentan reconstruir sus vidas lejos de Cuba. Un emocionante documental auto- etnográfico sobre la nostalgia, la amistad, las raíces y el exilio, que refleja el desasosiego de toda una generación.
Sinopsis larga
A través de la correspondencia audiovisual entre las cineastas cubanas afincadas entre Galicia y Ginebra, Patricia Pérez y Heidi Hassan, se articula el diálogo de este documental auto-etnográfico. Dos mujeres de más de 40 años, afrontando los retos de la emigración, intentan reconstruirse lejos de Cuba. A Media Voz muestra dos historias en las que identidad, maternidad y creación se entrecruzan y se impulsan mutuamente.
Heidi Hassan es una directora de fotografía cubana que recientemente emigró con su pareja a Suiza, cansada de apostar por una Revolución que perdió el sentido. Pero extraña a Cuba, y en el país de acogida atraviesa una profunda crisis de identidad al verse confrontada a rehacer su vida en una sociedad muy distinta a la suya.
Intenta integrarse poniendo toda la energía en retomar su profesión, pero ello toma más tiempo del previsto y el reloj biológico la pone en la encrucijada de tener que escoger entre su carrera y la maternidad. Desgarrada por estos dos deseos e impulsada por la urgencia de contrastar su experiencia de emigración, decide retomar la comunicación con Patricia, su mejor amiga y con la que por discrepancias políticas perdió el contacto quince años atrás cuando ésta abandonó Cuba.
Patricia Pérez, cineasta cubana que emigró a España hace quince años, recibe una video-carta de Heidi en la que le pide que retomen la amistad y pongan de lado los viejos desacuerdos. Esta inesperada solicitud la desestabiliza pues la obliga a confrontar los que fueron sus sueños con su vida actual: sin hijos, alejada del mundo en Finisterre y desconectada por completo del medio audiovisual. Aún así Patricia necesita retomar la comunicación con Heidi y se desencadena entonces una correspondencia audiovisual entre ambas cineastas; un intercambio de experiencias y posturas sobre la creación, el desarraigo y la maternidad. Un diálogo -a media voz- que les permitirá reorientar sus vidas. Lo que empieza siendo un gesto desesperado, termina convirtiéndose en un gesto cinematográfico, en una película íntima y reveladora sobre la feminidad en el siglo XXI.