Basada en la historia real del curandero checo Jan Mikolášek, que dedicó su vida a tratar a enfermos utilizando plantas medicinales. A lo largo de la guerra y la agitación del siglo XX, tuvo que elegir entre su vocación y su conciencia.
Desde muy joven, a Jan Mikolášek le fascinaron las plantas y sus propiedades medicinales. Pronto, se convirtió en uno de los mayores “sanadores" de su tiempo. En la época de la guerra y su posterior crisis, dedicó su vida a tratar sin distinción a ricos y pobres, a los nazis durante la ocupación y a los comunistas después de la guerra. Su popularidad acabó por irritar a las autoridades políticas. Acusado de charlatán, Mikolášek tuvo que demostrar la validez de su ciencia durante su juicio.