Andrés Suárez lleva años recorriendo España, guitarra en mano, lanzando su música desde todos los escenarios posibles. En este tiempo, este cantante y compositor de Ferrol ha conseguido congregar a un buen número de seguidores que se han enganchado a sus canciones, a su impecable actitud en escena, a su fuerza interpretativa. Seguidores que esperaban un disco grabado en directo como Moraima, en el que Andrés Suárez recorre su obra más emblemática y aporta nuevas canciones. Es el mejor disco de mi vida y me impresiona cada vez que lo escucho, afirma rotundo Andrés Suárez. Aún no me lo puedo creer y mi público se va a sorprender, porque se descubre algo nuevo en cada escucha.
Moraima es un CD+DVD grabado en directo, en un estudio de grabación y con público. Son 14 canciones que repasan la obra del artista gallego e incluye tres temas nuevos (Necesitaba un vals para olvidarte, Así fue y 6 caricias) junto a clásicos de su repertorio como Piedras y charcos, La vi bailar flamenco, No te quiero tanto
Es mi primer disco en directo, dice Andrés. Grabamos 14 canciones en diferentes formatos: acústico, sólo con guitarra, con banda eléctrica y cuerda
. Es un álbum fuera de lo tópico, que se publica acompañado de un DVD con 15 canciones (incluye Tengo 26) y el documental Así se hizo Moraima, de 22 minutos de duración. El disco se lanza con la canción Números cardinales como primer single.
Cuando se escucha Piedras y charcos, la canción que abre el álbum, la sorpresa es mayúscula. Un impecable sonido a la americana impacta por poco habitual en la música española, con un magnífico trabajo de los músicos que recorre todo el disco y arreglos originales e imaginativos, hacen de Moraima una obra fundamental en la trayectoria de Andrés Suárez. El álbum está producido por Alfonso Pérez (Entiende mi música como nadie, afirma Andrés) y coproducido y mezclado por Peter Walsh, clave en el resultado final. Peter tiene un oído sobrehumano y respetó el sonido de todos llevándolo a su terreno, explica Andrés. Peter Walsh ha trabajado con Peter Gabriel, Scott Walker, Pulp, The Church, Simple Minds, Stevie Wonder, Miguel Bosé
Venía a hacer el sonido pero le interesó involucrarse en la producción. Tenemos los mismos gustos: James Taylor, John Mayer
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Y Andrés Suárez continúa hablando de Moraima. Los arreglos han querido inyectar un toque moderno al disco, que es muy humano, con toda la banda tocando a la vez. El tratamiento de la cuerda no tiene nada que ver con lo que escuchamos habitualmente, no es clásico. Es un disco innovador y arriesgado, mejor de lo que soñaba. Hay introducciones que variaban en cada ensayo y está tocado a la mirada, sin claqueta. Con estos músicos puedes tocar todos los estilos con elegancia. La suma de todos ha hecho Moraima, mi mejor trabajo.
Moraima (Es el nombre que le pondría a mi hijo, dice Andrés. Me evoca el norte, el mar, sensualidad, morriña musical
Tenía acabado el disco y me faltaba el título, normalmente es al revés, pero ahí está. Me recuerda a mi tierra) se grabó el 21 de diciembre de 2012 en los Estudios Cata de Madrid y en la grabación han participado Alfonso Pérez (piano, coros), Luismi Baladrón (bajo, coros), Sefo Barragán (guitarras), Jan Ozveren (guitarras), Andrés Litwin (batería, coros), Luis Dulzaides (percusión), Marino Sáiz (violín), Iván Martín (viola), Josep Trescoli (violoncello), Carlos Martín (trombón) y Óscar Cordero (friscornio).
Moraima se abre con Piedras y charcos, un impecable comienzo de disco y de concierto, con sonido contemporáneo, guitarras espectaculares, arreglos de cuerda imaginativos y un Andrés Suárez en plenitud de voz y de expresión. Sigue No te quiero tanto, que mantiene al principio el tono intimista con el que se abre el álbum, inyectando progresivamente dinámica a una canción que conserva el tono emocionado que recorre Moraima. Después, 320 días (Hace un año) comienza en acústico y se convierte en una canción desgarrada, original en el desarrollo, grandiosa en sonido.
El álbum continúa con Rosa y Manuel, que se sostiene con la guitarra acústica al principio, para introducir poco a poco piano y trío de cuerda en una de las canciones más recogidas y líricas del disco, con arreglos que podrían recordar a Nick Drake, que no es mala evocación. Números cardinales, primer single del disco, es más ágil rítmicamente, con la cuerda marcando también carácter e importante papel de las guitarras. Otra gran canción que da paso a Esta vez, si puedes es otro modelo de cómo acercarse una canción, de cómo envolverla con delicadeza y fortaleza, recuperar la tensión sin perder lirismo y acabar con dramatismo en lo alto.
Una de las inéditas del álbum, 6 caricias, es otro ejemplo de cómo arreglar una canción con riesgo e inteligencia, escapando de lo tópico, en uno de los temas más intensos del disco, con impactante final. Benijo se sostiene en buena parte con el piano de Alfonso Pérez, que se abre a una impresionante aparición de la cuerda en una canción impactante y sobrecogedora. Más de un 36 es una de las joyas de un álbum repleto de ellas, una canción que define a un autor, de arreglos ejemplares capaces de aguantar cualquier comparación.
Y en la recta final del álbum, Aún te recuerdo es un potente medio tiempo anclado en el pop; Así fue tiene aire folk y aliento acústico; Vuelve es Andrés Suárez solo con su guitarra en una canción intensa que muestra su capacidad como instrumentista; La vi bailar flamenco camina en ambientes diferentes, desde los más desnudos a los más vestidos instrumentalmente, todos manejados con sentido, y Necesitaba un vals para olvidarte enlaza sónicamente con la apertura del álbum, en una excelente composición, de gran riqueza e inspiración melódica.
Son las canciones de Moraima, un álbum impactante, con un excepcional sonido en directo, magnífico trabajo de los músicos, arreglos inteligentes y una estupenda utilización de la cuerda. Andrés Suárez se muestra como un excelente cantante, intenso en la interpretación, guitarrista más que competente y escritor de textos con muchos hallazgos por descubrir.
Es lo nuevo de Andrés Suárez (Ferrol, 1983). Hijo y nieto de cantantes, estudió piano en el conservatorio de su ciudad natal, continuó con la guitarra y a los 18 años se trasladó a Santiago de Compostela para estudiar Magisterio Musical mientras ingresaba en el coro universitario y tocaba cada noche en cualquier escenario posible, formando parte también de bandas de rock, pop, blues y folk. Cinco años después, viajó a Madrid con la idea de tocar en el Metro y abrirse un hueco en la escena de la canción de autor, actuando asiduamente en Libertad 8, emblemática sala donde conoció a Tontxu, que en 2007 coprodujo su segundo álbum Maneras de romper una ola (4.000 discos vendidos sin promoción ni apoyo discográfico). En 2010, Andrés Suárez lanzó el EP Piedras y charcos, grabado en formato acústico y que dió paso en 2011 a Cuando vuelva la marea.
En los años transcurridos desde la grabación de su primer disco (De ida, 2002), Andrés Suárez ha colaborado con Kepa Junquera; su canción Marinero aparece en los álbumes Cantautores Burgos 2006 y Jóvenes Creadores Elche 2006; ha sido coproductor en el álbum En el nombre del padre de Tontxu; ha grabado guitarras en Trapecista de Marwan; compartió escenario con Javier Ruibal, Miguel Bosé, Ana Belén y Víctor Manuel, Pedro Guerra, María del Mar Bonet, Luis Pastor, Tontxu, Luz, Javier Álvarez, Pablo Milanés
En 2010, el productor Carlos Narea contó con Andrés Suárez para participar en el Homenaje a Antonio Vega celebrado en el Palacio de los Deportes de Madrid junto a artistas como Enrique Morente, Miguel Ríos, Ketama, Manolo García, Quique González, Burning o Rosario.