El 11 de agosto de 1967 nacía en Zaragoza Enrique Ortiz de Landazuri. Enrique vino al mundo en una familia de la burguesía zaragozana y muy pronto mostró sus inquietudes musicales.
Sobre el origen de Bunbury, su nombre artístico, hay dos versiones. La primera, y probablemente la que responda a la realidad, dice que Enrique cogió su apodo de una cita literaria de Oscar Wilde. La otra versión es mucho más rocambolesca y asegura que nuestro protagonista tenía una compañera de colegio que se apellidaba Bunbury y a la que se parecía muchísimo; ese parecido fue el que llevó a sus amigos a llamarle Bunbury.
Con tan solo 14 años ya frecuentaba los ambientes musicales de la capital aragonesa y en 1981 debutó sobre las tablas de un escenario con Apocalipsis. Un año más tarde, en 1982, se enroló en un pequeño grupo estudiantil llamado Rebel Walt tocando la batería. Tras abandonar esta banda pasó a formar parte de Proceso Entrópico con el que se presentó al festival de rock que organizó el Ayuntamiento de Zaragoza.
En 1984 Enrique comienza una nueva aventura en Zumo de Vidrio, el grupo de Juan Valdivia y su hermano, y deja el bajo para dedicarse a la voz. En 1985 Zumo de Vidrio pasa a mejor vida y se forma Héroes del Silencio. Además debido a su amistad con Santi Rex, Enrique pasa a formar parte de Niños de Brasil grupo al que arrastra a otros componentes de Héroes. Pero esta situación dura poco tiempo y Enrique deja el grupo de Santi Rex para dedicarse en exclusiva a Héroes.
El trabajo bien hecho comienza a dar sus frutos y tras su primer trabajo, El Mar que no cesa uno de los mejores discos debut de la música española, Héroes se ve inmerso en el huracán de la fama y el éxito. Muy pronto se convierten en un grupo de culto y comienzan a tener repercusión incluso fuera de nuestras fronteras. Tras una carrera discográfica en la que se encuentran algunas joyas como Maldito Duende, Avalancha, La chispa adecuada, el grupo decide poner el punto y final y Enrique comienza su etapa en solitario.
El primero de sus discos como Bunbury fue Radical Sonora en el que Enrique comienza la investigación por la música árabe y electrónica. Con su segundo disco, Pequeño, Bunbury se centra en la sencillez y las letras simples y sin complicaciones. Con él logra el disco de platino al vender más de 100.000 copias. Tras este éxito publica Pequeño cabaret ambulante, un directo en el que Enrique muestra toda su fuerza en vivo.
2002 es el año de Flamingo's, que como él mismo ha dicho en más de una ocasión es un disco de canciones. Enrique siempre se ha mostrado un artista muy comprometido y la última guerra en la que se ha involucrado es la lucha contra la piratería.
Finaliza el 2003 con un nuevo proyecto musical, Bushido, grupo formado junto a Shuarma (Elefantes), Carlos Ann y Morti (El Fantástico Hombre Bala), cuyo disco homónimo sale en 2004. Pronto se une "Panero" (2004), otro trabajo colectivo en el que musicaliza la obra del poeta Leopoldo María Panero.
El viaje a ninguna parte (2004), disco doble que cede ante los sonidos panamericanos que más le emocionan, desde Argentina a New Orleans, entre el jazz y la cumbia, entre el tango y las sonoridades brasileras. Ahí están canciones clave de su repertorio como 'Que tengas suertecita', 'El rescate' o 'Canto'. Su crecimiento como letrista le lleva a firmar versos que pelean con las melodías, alejándose del concepto de canción comercial pero siguiendo cerca del corazón de la canción popular inmortal. La variedad domina una rica orgía musical en la que Bunbury se reconcilia con fantasmas a los que despide con besos y abrazos para que no vuelvan más. El tour presentación se modifica durante un breve tramo para dar forma a un espectáculo único llamado Freak show en el que Bunbury y El Huracán Ambulante cuentan con los músicos Iván Ferreiro, Adría Puntí, Carlos Ann, Mercedes Ferrer y Nacho Vegas como invitados de lujo, de ello se dará cuenta en la película Freak show (2005).
Es, precisamente, junto al asturiano Nacho Vegas con quien Bunbury comienza una nueva etapa artística tras una época de meditación, grabando "El tiempo de las cerezas" (2006), disco a cuatro manos en el que Bunbury da la vuelta a la brújula y se centra en sonidos norteamericanos, casi en respuesta a la latinización de unos años antes para confeccionar piezas exquisitas como 'Puta desagradecida' o 'Ahora'. Se realizan muy pocos conciertos y uno de ellos se captura para el DVD "Liceu BCN" (2007), grabado en Barcelona y con material adicional de los también limitados conciertos mexicanos. El siguiente proyecto artístico también será compartido, esta vez resucitando a Héroes del Silencio para un único tour que agota las entradas en sus diez selectas paradas repartidas entre EEUU, Latino América y España. Como testimonio, se edita el disco y DVD "Tour 2007" (2007), así como el libro fotográfico "Tesoro" (2008), obra de la fotógrafa Jose Girl, que incluye un DVD extra con el último concierto de la gira.
Con nuevas energías, Bunbury regresa a su propia carrera para grabar "Hellville de Luxe" (2008), una obra que continúa trabajando sonoridades norteamericanas con toques fronterizos y pequeños detalles latinos que enriquecen una música variada que suena más rockera que nunca gracias a su nueva banda, Los Santos Inocentes, que como gran novedad sustituye los vientos por una dupla guitarrera que eleva el octanaje eléctrico. En "Hellville de Luxe" cabe el psycho rock de 'El hombre delgado que no flaqueará jamás', el pop de autor de 'Hay muy poca gente' y también la influencia sureña en 'El porqué de tus silencios'. El disco es muy bien recibido, siendo apoyado por un nuevo tour transatlántico con un espectáculo pensado para grandes recintos que el público respalda. Dos años después llega "Las consecuencias" (2010), disco de índole íntima que comenzó a preparar prácticamente desde que finalizó la grabación de su anterior trabajo y que crítica y público señalan como una de sus grandes obras. Una vez más, el Bunbury más cercano vuelve a cautivar con un disco ricamente arropado pero desnudo en su intención, exteriorizando sentimientos introspectivos con los singles 'Frente a frente' (versión de Jeanette), 'De todo el mundo' y 'Los habitantes' a la cabeza. De nuevo, con "Las consecuencias" se reincide en influencias anglosajonas que son bien recibidas en cualquier lugar por el que su gira presentación pasa, sumando esta vez un largo periplo a lo largo y ancho de EEUU, siempre sin descuidar sus patrias de habla castellana. El triple vinilo en directo "Gran Rex" (2011) se registra en Buenos Aires y cierra una etapa para que "Licenciado cantinas" (2012) abra otra. Como reacción a años parcialmente alejado de sus influencias latinas, el disco contiene versiones de algunas de las canciones sudamericanas y centroamericanas favoritas del músico, revisitando la obra de Willie Colon y Héctor Lavoe, Louie Ortega o Atahualpa Yupanqui, entre otros, y aprovechando para crear un disco conceptual que narra una historia de desamor y muerte para la que vuelve a emplear ritmos calientes, hermanando poesía y groove como nunca en su carrera. Como complemento, se rueda el corto "Licenciado cantinas -The movie" (2012), bajo la dirección del realizador Alexis Morante y contenido en "Licenciado cantinas - Reposado special edition box set" (2012), que añade al disco original uno en directo registrado en distintas paradas de su gira presentación y un DVD con material audio-visual.
En 2013, Bunbury se reinventa con "Palosanto" (2013), disco de producción fría y aséptica aplicada a canciones calientes y emocionales, reflexionando sobre la revolución mundial y la revolución interior, iniciando un nuevo viaje de guitarras cósmicas, ritmos terrestres y canciones irreprochables que cuenta con 'Despierta' como primer single aunque también con otras bazas como 'Más alto que nosotros sólo el cielo' y 'Todo'. Un disco de su tiempo para un artista de su tiempo. El álbum se celebra con una gira espectacular, prolífica y larga, el "Palosanto Tour", en la que Bunbury y Los Santos Inocentes ofrecen un repertorio potentísimo, crítico y con un aura mágica y extraterrestre. El concierto de Madrid del 29 de junio de 2014 se plasma en el CD-DVD "Área 51", que ve la luz en octubre del mismo año. Además, el libro "Bunbury. En plano secuencia" (Cúpula, 2015) de Jose Girl recoge una hermosa colección de 'flashes' intuitivos de esta misma serie de conciertos. Una especie de mitosis del "Palosanto Tour" es la minigira conjunta que el aragonés errante protagoniza con Andrés Calamaro en octubre y noviembre de 2014 en México. En el set final del show, ambos artistas interpretaban al alimón canciones como 'Sin documentos', 'Maldito duende', 'Estadio Azteca' o 'Aunque no sea conmigo'. Estas canciones al alimón quedaron plasmadas en un álbum en directo, "Hijos del Pueblo", publicado en abril de 2015.
En noviembre de ese mismo año, Bunbury publica su MTV Unplugged: "El libro de las mutaciones". El disco es una apología de la reinvención, la revisión de un cancionero que es casi un cantar de gesta, centrándose, sobre todo, en canciones de sus etapas con Héroes del Silencio ('La Sirena Varada', 'El camino del exceso'…) y con Los Santos Inocentes ('El boxeador', 'Doscientos huesos y un collar de calaveras'…). Al álbum le sigue la gira "Mutaciones Tour 2016". En marzo de 2016, Alexis Morante estrena "El camino más largo", un documental que refleja cómo fue la gira de "Las Consecuencias" en EEUU, todo un desafío temerario que, como se ha visto, ha dado unos frutos inmejorables. También de 2016 son los "Archivos Vol. 1: Tributos y BSOs" y "Archivos Vol. 2: Duetos".
En 2017, Bunbury publica "Expectativas", quizá, hasta entonces, su disco más ambicioso, radical e innovador. En sus once canciones, el compositor nos ubica en un ecosistema atroz: los cambios que se atisbaban en "Palosanto", o han sido de mentira, o han sido a peor. A Los Santos Inocentes, Bunbury incorpora el saxo de Santiago del Campo. Canciones como 'En bandeja de plata', 'Al filo de un cuchillo' o 'Bartleby (Mis dominios)' son exquisitas muestras de un explosivo y magnífico cóctel de rock, vanguardia y lúcida crítica. Una prueba más de que, como canta en 'El hombre delgado que no flaqueará jamás', de "Hellville de Luxe", el artista sigue "siempre en acto de servicio".
A "Expectativas" le siguió una extensísima gira, la EX-TOUR 17-19, dividida en siete partes y que, además de incluir conciertos en los destinos habituales de España y el continente americano, volvió a llevar a Bunbury a ciudades europeas como Milán, Berlín, Ámsterdam, París o Londres. Durante su round estadounidense, destacaron los shows celebrados en abril de 2018 en California y, por ello, sin tenerlo originalmente previsto, el artista plasmó un resumen de estos en su décimo álbum en vivo, "California Live!!!", que incluía, amén de las versiones en directo de algunas de las nuevas canciones de "Expectativas" o de éxitos de siempre como 'El rescate' y 'Hay muy poca gente', revisiones actualizadas de himnos de Héroes del Silencio como 'Tesoro', 'Héroe de leyenda' o 'Maldito duende'. Antes del lanzamiento de "California Live!!!", publica "Canciones 1987-2017", un exhaustivo recopilatorio compuesto por cuatro volúmenes (dos dedicados a la etapa de Los Santos Inocentes, uno al Huracán Ambulante y otro a Héroes del Silencio) y un libro exclusivo. Sin duda, se trata de una guía extraordinaria para conocer, a modo de resumen, la enorme carrera del compositor aragonés.
En noviembre de 2019, Bunbury celebra el vigésimo aniversario de la publicación de su segundo disco en solitario, "Pequeño", con el lanzamiento de "Pequeño XX", una caja monumental -literalmente: pesa 4 kilos- que alberga 9 LPs, sus equivalentes en CDs y un libro con fotos inéditas, letras y textos de Santi Balmes (Love of Lesbian) y del periodista Juanjo Ordás. Material para coleccionistas, el boxset contiene las reediciones de "Pequeño" y "Pequeño cabaret ambulante", ambas remasterizadas por Tom Baker, y un ejército de material inédito o descatalogado, como las Caras B de los singles, demos y grabaciones de carácter electrónico realizadas por el cantante durante la grabación de "Pequeño" y la gira consecutiva.
En mayo de 2020, con el mundo engrilletado por cosa de la pandemia coronavírica, Bunbury publica su décimo álbum de estudio, Posible. Este trabajo cierra la trilogía iniciada con "Palosanto" y, según el propio cantante, "abre un camino nuevo hacia un lugar que desconozco y que no sé si exploraré en el futuro". "Posible" es un disco ambicioso. De hecho, a nivel técnico, quizás sea, y de lejos, el más ambicioso de toda su carrera. Bunbury da una vuelta de tuerca al sonido que destapó en "Expectativas" y avanza con temeridad, pero también con acierto, en el terreno de la música electrónica. En ningún otro trabajo suyo han sido tan relevantes los teclados y sintetizadores. Sin embargo, el barniz sonoro general no está reñido con el eclecticismo ni con el mestizaje y, como es habitual en su discografía, en "Posible" hay canciones con un trasfondo de rock, de bolero o de balada.