Son tres chicos Charlie, Mattie y James que hacen un pop guitarrero infeccioso, ruidoso, con la travesura de Blink 182.
James Bourne, es de Southern-On-Sea que tiene dos hermanos y una hermana. Habla muy delicadamente. Obsesionado con *NSYNC y con Blink 182, mientras pasa su tiempo haciendo surf, jugando al tenis y al billar. Su sueño es escribir una canción con Michael Jackson.
Luego está el chaval de Ipswich, Charlie Simpson, el más joven de tres hermanos con pintas de modelo. Con gustos centrados en los Deftones y en Jimmy Eat World, es el más pijo de Busted. Recuerda que una vez le pillaron fumando y tuvo que quedarse en el cole después de las clases castigado.
Si lo que buscáis es algo más rudo, Mattie Jay es vuestro hombre. Procedente de Kingston sacó un disco de garage ("Sunshine Lover", una colaboración junto a Miles Slater en el sello Genius Cru) y tiene la palabra energúmeno escrita por toda su cara. Es el tipo de chico mal hablado que necesita el pop - es una mezcla entre The Streets, Jamie Oliver y Johnny Rotten. Todo boca y mucho pantalón.
Cómo se conocieron es bastante simple: Mattie conoció a James en un concierto en Southend. Enseguida decidieron formar su propio grupo. Necesitaban otro miembro y pusieron un anuncio en la prensa. Entonces llegó Charlie, aceptado en el grupo a finales de octubre de 2001. Escribieron, se mezclaron, grabaron... y para marzo de 2002 habían firmado con Universal. Nada de marketing en la creación: Busted fueron fichados tal y como eran - tres chicos con un xxx y buen oído para las melodías demoledoras. Y para Matt esto es muy apropiado para su corte de pelo: "Ahora puedo parecer un imbécil," dice, "y poder decir, ¡Aha! Mi trabajo consiste en tener pinta de imbécil."
Las ambiciones del grupo son simples: llevar su música por todo el mundo, mantener su visión traviesa sobre el pop y pasárselo bien.
Su disco de debut sale en 2002 y es homónimo. En 2003 sale en UK su segundo trabajo A present for everyone, con el que se presentarán al resto del mundo... ¡ya era hora!