Baute

Baute en 2005 es más latino que nunca, pero lo es con una visión renovada y contemporánea. Para empezar, el artista se enfrenta a esta vuelta a sus orígenes desde la perspectiva de un sexto disco en su carrera, con toda la experiencia y sabiduría adquirida durante estos años y, segundo, Baute se ha rodeado para la ocasión de todo un equipo de colaboradores venezolanos, empezando por el productor Carlos Quintero.

Baute es el título de esta colección de 12 nuevas canciones, la mayoría del propio Carlos Baute, que se revela como un autor de una solidez y de una madurez extraordinaria. Composiciones como Quién dice que no duele o Devorándote son de una riqueza armónica y de una complejidad similar a las de las canciones que hicieron grandes a algunos de los mitos de la música latina, como Juan Luis Guerra o los mejicanos Maná. Especialmente significativa es la canción Quién dice que no duele, una de las canciones fuertes del álbum, destinada a convertirse en un himno, con una letra llena de compromiso social y una mezcla de ritmos venezolanos y pop. Canciones calientes y sudorosas como Tú me quemas, Varao o Pulso se alternan con pop latino de extraordinaria factura, como Pase lo que pase o canciones románticas de ritmo tropical como Me faltas tú, Mal de amor o la muy pegadiza Te regalo, una bachata pop extraída de primer single, con una letra cargada de sentimientos y de ingenuidad que hará estragos en el público femenino seguidor del artista venezolano. Algunas aportaciones externas han sido canciones expresamente compuestas para el propio Baute como la balada Sé que mentí o Dentro y fuera, obras de varios venezolanos, entre ellos el conocido hitmaker William Luque.

La producción es responsabilidad de Carlos Quintero, músico venezolano afincado en España y productor con gran olfato comercial, involucrado en los éxitos de, por ejemplo, entre otros artistas, Celia Cruz o Chenoa. La masterización ha corrido a cargo de Leon Zervos, responsable del mastering de los últimos trabajos de Maroon 5, Santana o Avril Lavigne y se ha hecho en los estudios Sterling Sound de Nueva York. En palabras del propio Baute "este es un disco muy orgánico, en el todo suena muy limpio, porque he querido que apenas haya programaciones y que predominen los sonidos de guitarra, batería y percusión". Como nota a destacar, para ratificar esa vuelta a las raíces que supone este álbum, hay un instrumento que está presente en todas las canciones de este disco, que es el tambor venezolano llamado cumaco, un espectacular instrumento que requiere que toquen simultáneamente dos percusionistas.

Las doce canciones, una a una:

quién dice que no duele
Una mezcla de ritmos venezolanos y de pop que crece y que te hace mover los pies casi sin darte cuenta. Canción con una melodía extraordinaria y una letra de compromiso social, destinada a convertirse en un himno. Con un sabor tropical inconfundible y llena de coros participativos. Un mensaje positivo para un mundo que parece que cada día va peor. La letra hace un pequeño homenaje a Juan Luis Guerra: "nunca pierdas las raíces de la tierra en que naciste / porque la tierra te da lo que un día le pediste / nunca pierdas la esperanza de que llueva café en el campo / como el tema de Juan Luis Guerra"

devorándote
Una canción explosiva. Una canción muy especial para Carlos Baute. Muy rica en melodías y en cambios de ritmo. Innovadora, pasa de la batucada con ritmos de sangueos venezolanos al ska en cuestión de segundos. "Esca, esca, esca, esca, escapa, escápate conmigo". La voz marca el ritmo de la canción. En directo arrasará. Un magnífico ejemplo de pop latino más actual.

tú me quemas
Una de las canciones más calientes y sudorosas del disco. Baute derrocha energía y furia latina por los cuatro costados. Una fiesta llena de coros tropicales y con un ritmo acelerado sin tregua. El estribillo es folklórico venezolano, es demoledor. Muy bien producida, llena de guiños efectistas como las paradas al inicio de los estribillos, la ralentización del ritmo o los coros finales. Esto es para Baute la fusión de su folklore venezolano llevado al pop

te regalo
Una canción, obra del propio Baute, dedicada a todos sus fans. Una canción que es un regalo. Expresa de manera limpia los sentimientos de todos aquellos que descubren el amor y lo hace con una ingenuidad y una sencillez que llega a lo más hondo del corazón. Una bachata como hacía tiempo no se escuchaba en nuestro país. Una de esas canciones románticas con ritmo tropical que resultan irresistible. La letra es la clave.

hasta el infinito
Pura fiesta a base de tambor venezolano. Muy, muy contagiosa. Una canción para cantar y bailar. Destinada a la pista de baile. Puro divertimento. Muchos coros, percusión a tope y ritmo, mucho ritmo. Como dice el propio Baute al final de la canción, "Gózalo, sabor y swing venezolano a tope. Baute tiene la clave..." Baute además, rapea en la parte central de la canción.

mal de amor
Otro sangueo, ritmo venezolano, para este tema romántico y con una onda tropical. Una canción de esas que tienen un encanto especial. Baute expresa sus sentimientos y emociones de una manera verdaderamente conmovedora. Una instrumentación limpia y sencilla, donde predominan las guitarras, los coros y esa percusión que convierte los medios tiempos en bailables.

pase lo que pase
Una de las canciones más completas del disco. Pop latino de primera clase. Tiene gimmick instrumental, una estrofa directa y una riqueza armónica sorprendente. La producción de Carlos Quintero en esta canción es impecable y el sonido es magnífico.

varao
Una canción muy querida por Carlos Baute. 100% latina. 100% Baute. Una guitarra chispeante con wah-wah muy a lo Shaft da paso a una canción caliente y venezolana, con aire pop y tradicional a la vez, con mucho tambor y acordeón. La letra es muy fiestera y la canción se canta y se baila sola. Composición de una gran riqueza y complejidad, con muchas partes diferentes que se suceden y que te sorprenden sin darte un respiro. "ven, ven, sácame de fiesta / vamos que hoy quiero liarla / sá-sá-sácame de fiesta y seré una fiera alimaña".

sé que mentí
Para Baute ésta es la gran balada del disco. Pero es de esas baladas rítmicas a medio tiempo que tan bien funcionan en la radio. Una canción extraordinaria, con una producción elegante, exquisita, llena de sutileza. Una canción de esas que marcan la diferencia y que está destinada a jugar un papel muy importante en este proyecto.

pulso
El Baute más enérgico es el de este sólido tema pop, acelerado y desenfrenado, como lo que cuenta la propia letra de la canción. Guitarras cañeras, un frenético ritmo de batería y un Baute lleno de fuerza que no te da ni un segundo de tregua.

me faltas tú
El bajo que cabalga sobre la percusión latina, la dulzura del cuatro venezolano y las mejores armonías vocales del disco hacen de ésta una de las canciones más hermosas del disco. Llena de magia y de ritmo, vitalista, positiva y muy bailable

dentro y fuera
Pop latino de primera calidad. Una canción compuesta por el venezolano William Luque expresamente para Baute. Guitarras surf, metales brillantes, un ritmo de batería de los que tiran pa’lante. Una canción ganadora, directa, llamada a tener éxito.