Si te das una vuelta por el casco viejo de Sevilla con Javier Labandón (El Arrebato) como anfitrión, te descubrirá, sin poder evitar una iluminada sonrisa, entre monumentos históricos, aquellos rincones donde un adolescente Arrebato se reunía con otros amigos para cantar desde Camarón a los Chichos y así sacarse unas pelillas. Y es que cuando El Arrebato mira hacia el pasado suspira y dice "buf... quillo ya era hora de que me tocara a mi".
A El Arrebato no le han ido mal las cosas, ya con su debut discográfico, en el verano de 2001, y con aquel primer single Poquito a Poco demostró que lo suyo no era flor de un día. Fueron mas de 70.000 discos vendidos y más de 50 conciertos en una época donde además tuvo que pelear con programas de televisión como Operación Triunfo.
El Arrebato afrontó su segundo trabajo Una noche con arte, grabado durante los meses de Marzo y Abril del 2003, con el optimismo que le caracteriza, pero con la responsabilidad de ofrecer una nueva entrega que siguiera la brillante estela que dejó su primer álbum.
No sólo lo consiguió sino que superó con creces las más ambiciosas expectativas, 90.000 discos vendidos y un centenar de conciertos; pero lo que es más importante confirmó un sonido y sobre todo un lenguaje propiamente Arrebato.
En 2004 aparece el tercer disco, 11 canciones dan vida a un nuevo proyecto Que salga el sol por donde quiera, cargado de alegría, de rumba, de pop, de baladas, toques flamencos y esa habilidad que Javier tiene de componer esas canciones trampa que se te quedan a la primera escucha.