En vivo

Los toreros muertos aseguraron que el 12 de mayo de 2015, treinta años después de su formación, sacarían su disco En vivo y cumplen su palabra.

Grabado el 28 de febrero de 2015 en el Gran Teatro Falla de Cádiz en un único concierto. "¿Para qué lo vamos a grabar más veces? Siempre que hemos podido rectificar algo, como cuando grabamos en estudio, hemos tenido tendencia al error. En directo nunca nos equivocamos y si nos equivocamos somos capaces de perdonarnos".

23 años después de su última grabación los miembros originales de la formación, Pablo Carbonell a la voz, Guillermo Piccolini al piano y teclas, y Many Moure al bajo, junto al guitarrista Fernando Polaino y el batería Tony Iglesias, han demostrado que lo suyo es el directo, el contacto con el público y dejarse arrastrar por el delirio que sus ritmos y sus letras demenciales provocan. "Ya nos ha quedado claro que nuestra obligación es desenroscarle la cabeza a nuestro público y que se vaya del concierto dándole pataditas".

El disco recoge los grandes temas de sus cuatro LP's anteriores, como Mi agüita amarilla, Manolito, Yo no me llamo Javier, Hoy es domingo, Tu madre tiene bigote… etc… A estas hay que añadir cuatro nuevas composiciones escritas para ello: La naturaleza, Sin dios, Toma una flor y Hasta siempre. Canciones que reflexionan o satirizan los estilos del country, la canción espiritual, el flower power y las emotivas canciones de despedida.

El disco cuenta con 22 canciones. Las mismas que en su espectáculo 'En vivo'. "En estos 23 años de reflexión nos hemos dado cuenta de que ironizar sobre los estilos es una de las aspiraciones de Los toreros muertos. Esta idea iconoclasta se nos desdibujó en nuestra última etapa porque nos creímos que éramos un grupo de rocanroll. En realidad somos algo mucho más evolucionado: somos un grupo de payasos".