La trayectoria de Maka es tan sorprendente como sólida. Los datos que avalan su currículum hablan por sí solos: Más de 300 millones de reproducciones Spotify, 400 millones visualizaciones en Youtube y una popularidad oránica y viral que lo ha mantenido en el Top 10 de esta plataforma durante el primer trimestre 2021. Estas increíbles cifras nos sitúan antes un auténtico fenómeno que cruza la frontera de lo artístico para convertirse en una auténtica revolución social de las que ocurren sólo de vez en cuando.
Durante el año pandémico y en vista de las cancelaciones que se irían sucediendo, Maka se puso a desgranar su álbum “Bendiciones”, un álbum que había trabajado para acompañar la gira de ese año maldito, y apenas un mes mas tarde lanzó por sorpresa “Maldiciones” que se gestó como los descartes de “Bendiciones” y acabó por gustar tanto o más que el supuesto disco Alfa.
Maka convirtió la cuarentena en un no parar de lanzamientos y grabaciones, casi 30 canciones y videoclips en un año fue el conteo final, esto le llevó a situarse en el top 10 de Youtube durante todo el primer trimestre de 2021 llegando a tocar el numero 1 durante una semana y peleando las posiciones contra los productos de las disqueras multinacionales. Todo esto siendo un artista independiente con un reducido grupo de trabajo detrás, sin mayor comunicación o promoción que la que generan sus redes sociales, demostrando de esta manera el carácter orgánico que rodea la propuesta artística de Maka y que lo convierte en un fenómeno social más allá de su música.
El 2021 supone un nueva etapa para el artista granadino que, recordando los grupos musicales que él ha mamado desde pequeñito, ha preparado un nuevo disco donde aborda el genero del Flamenco Pop en una onda que recuerda el sonido de Ketama, La Barbería del Sur, Jose Francés o Niña Pastori por nombrar algunos de los grandes artistas que han servido de inspiración para esta obra. De esta manera, Maka deja atrás todo rastro de lo que se denomina “musica urbana” y deja paso a los músicos, guitarras, bajo, percusiones, piano … todo bien orquestado por el productor Antonio Narvaez y el propio Maka.