Francisco Sánchez Gómez nació en Algeciras, Cádiz, el 21 de diciembre de 1947. Desde que a los cinco años corrigiera a su padre, Antonio Sánchez, (guitarrista profesional) sobre el compás de una falseta, la dedicación de Paco a la guitarra ha sido exhaustiva. 25 discos editados, cientos de premios y el consenso de la crítica respecto a su estrepitosa revolución musical, hacen de él un artista universal. En 1965 graba su primer LP, Dos guitarras flamencas. En el 75, con el disco Fuente y Caudal, Paco inicia sus conversaciones con la improvisación, y con la rumba Entre dos aguas, transforma la guitarra flamenca de marginal en mundial. Solo quiero caminar, que con la introducción del cajón, el bajo y la percusión, sienta las bases del lenguaje flamenco actual; Almoraima, en el que supera definitivamente los sonidos de sus maestros Niño Ricardo y Sabicas; Siroco, el mayor homenaje melódico y armónico al flamenco y Luzía, fruto de una oscura década de ausencias, son algunos de lo símbolos que demuestran la genialidad, la intuición y el talento revolucionario de Paco de Lucía. El diálogo de su música con los ritmos brasileños, el jazz de Larry Coryell, Chick Corea, Al Di Meola o John Mclaughlin, y la música clásica de Albeniz, Falla y Rodrigo, constatan su inquietud musical y su omnipotencia. Definitivamente, el nombre de Paco de Lucía es uno de esos pocos nombres con los que la historia empieza capítulo.