Grupo cordobés que se mueve entre varios estilos bastante mestizos con fuerte aire de rock flamenco, con dosis de hip-hop y, sobre todo, unas letras provocadoras, irreverentes y con mucha fuerza. A todo esto le unimos una imagen de su cantante, Rakel, brutal y un descaro en el escenario.
Rakel Winchester es la actitud provocadora del punk, el lenguage callejero sin pelos en la lengua del rap, el arte del flamenco, gracejo y salero andaluces, payos y gitanos arrejuntaos al mismo compás que lo palmeros... y una mujer de armas tomar. Rakel Winchester es un proyecto musical explosivo, que debuta discográficamente con un trbajao titulado Vale, Montoya no soy....
Raquel Riquelme es la cantante y compositora de las letras. De origen cordobés, aunque pasó buena parte de su infancia en Madrid, formó parte de diversas bandas de rock en la década de los 80, y a principios de los 90 militó en Txoxo de la Bernarda, dúo que alcanzó una cierta repercusión en el sur de la península. Tras su disolución empezó a germinar Rakel Winchester (Winchester es algo así como la pronunciación andaluza del apellido Ludwig Wittgenstein, un muy serio filósofo austriaco interesado en los juegos de palabras y del lenguage fallecido a mediados del siglo XX). Raquel se unió a Luiso (bajo) y Yonka (batería), núcleo duro desde el principio de la banda, a los que poco a poco, y tras diversas alternativas, se les fueron sumando las guitarras de Antonio Santiago y Rubén Márquez, Enriquito (cajón), y Hermes y Rafa Cortés en los coros.