Cuarteto de Sydney, Australia, The Vines empiezan a tomar forma a mediados de los 90 cuando el guitarrista y vocalista Craig Nicholls, el bajista y voz Patrick Matthews y el batería original, David Olliffe, se conocieron en la época del instituto mientras trabajaban en un McDonalds de Sydney y escogieron su nombre en honor a una banda australiana de los 60 poco conocida llamada the Vynes, donde tocaba la guitarra y cantaba el padre de Nicholls.
Tocaban en directo de vez en cuando y se dedicaban a componer letras y a hacer grabaciones de cuatro pistas en la habitación de Nicholls. A principios del 2001, cuando aún eran unos completos desconocidos en su propia tierra, contaban ya con más de treinta temas.
Cuando su maqueta llegó a XL Recordings (base británica de Prodigy, White Stripes, Badly Drawn Boy y Avalanches), las cosas empezaron a sucederse rápidamente. XL sacó inmediatamente el tema Factory como EP limitado de siete pulgadas, que pronto se convirtió en el single de la semana de NME.
Tras firmar un contrato internacional con Capitol Records en Estados Unidos en diciembre de 2001, MTV2 incluyó a la joven banda en su campaña 22 promesas para el 2002 a pesar de que ni siquiera habían grabado un vídeo por aquel entonces.
En enero de 2002, The Vines apareció a la cabeza del artículo de NME 2002: The New Batch, en el que la revista escogía a las 35 bandas del año. El batería originario David Olliffe se tomó un respiro por aquella época y fue sustituido por Hamish Rosser, además de recibir al mejor amigo de la infancia de Nicholls, Ryan Griffiths, como segunda guitarra.
Una vez completada la formación, The Vines ofrecieron su primera actuación como cabezas de cartel en febrero de 2002, en lo que fue una sencilla aparición en un pequeño club de Sydney llamado the Vic on the Park. Tanto se corrió la voz que antes de que los teloneros hubieran tocado un solo acorde, el local estaba repleto hasta los topes. NME escribió acerca del concierto: Este grupo es el futuro del rock. Dentro de diez años, 10.000 personas alegaran haber estado presentes en el concierto.
Debutan con Highly Evolved (2002), un disco producido por Rob Schnapf (Beck, Guided By Voices, Foo Fighters, Elliott Smith) en el templo originario del sonido en L.A., Sunset Sound Factory. Su ópera prima es una inyección confiada y melódica de rock con un toque de psicodelia que llego a compararles con los Beatles y Nirvana.
En 2004 vuelven con su segundo disco Winning Days, que tiene como primer single un más que expresivo Fuck The World, grabado en los famosos Bearsville Studios cerca de Woodstock en New York.