Pay the devil
Country - FolkFecha de publicación del disco: 6 de marzo de 2006
1.There Stands the Glass
2.Half As Much
3.Things Have Gone To Pieces
4.Big Blue Diamonds
5.Playhouse
6.Your Cheatin Heart
7.My Buckets Got A Hole In It
8.Back Street Affair
9.Pay The Devil
10.What Am I Living For?
11.Whis Has Got To Stop
12.Once A Day
13.More and More
14.Till I Gain Control Again
Pay the devil de Van Morrison tiene una orientación country. Está formado por 15 temas, tres de los cuales ha compuesto él mismo: This Has Got To Stop, Playhouse y la canción que pone título al álbum.
Se incluyen temas popularizados por Webb Pierce (There Stands The Glass), Hank Williams (Your Cheatin' Heart), Conway Twitty (What Am I Living For), Emmylou Harris ('Til I Gain Control), Big Joe Turner (Don't You Make Me High) y George Jones (Things Have Gone To Pieces), entre otros.
Hay una razón por la que llaman a Van Morrison el Vaquero de Belfast. Desde el comienzo, los sonidos llenos de profundos sentimientos del Sur de América, le han ayudado a Morrison a inspirarse para conseguir una de las carreras más duraderas, consistentes e impresionantes de toda la historia de la música. Durante cuarenta años se ha movido por los sonidos más grandes del Rhythm & Blues para crear su propia y distintiva combinación de soul e influencias Celtas. En Pay The Devil, Morrison explora ese cowboy (vaquero) que lleva dentro ahora mucho más que nunca ha grabado una sorprendente mezcla de sus composiciones de country favoritas, además de unas cuantas canciones originales igualmente poderosas, que se ganan su propio lugar entre tan distinguida compañía. De igual manera que el gran héroe de Morrison, Ray Charles, hiciera una vez en Modern Sounds in Country & Western Music, Morrison ha tomado algunas canciones muy relevantes y perdurables a través del tiempo, canciones del sur, y las hecho suyas.
Los que han seguido a Van Morrison durante años podrían alabarle por su destacada gama de sonidos. En los últimos años hemos visto a Morrison enfrentándose a la música con un toque Irlandés tradicional, o con jazz, skiffle u otras formas musicales que le han parecido adecuadas, pero el secreto de la carrera artística de Morrison es que nunca ha seguido las modas en lo más mínimo. Más que eso, Morrison continua siendo un músico trabajador que simplemente sigue su propia musa donde quiera que le lleve. Esta pertinaz individualidad ha sido siempre algo muy característico de Morrison desde sus días como líder del grupo Irlandés Them, allá por los sesenta, hasta sus primeros días en solitario con "Brown Eye Girl" y "T.B. Sheets", ó hasta esas obras maestros de los sesenta y los setenta como Astral Weeks (1968), Moondance (1970) y Tupelo Honey (1971), llegando hasta discos clásicos más recientes como Irish Heartbeat (abrumadora colaboración de Morrison con los Chieftains en 1988), Avalon Sunset (1989), Enlightenment (1990), The Healing Game (1997) y Magic Time (2005).
Las sorprendentes y francas canciones de Pay The Devil varían desde las familiares versiones que hace Morrison de la canción de Hank William, "Your Cheating Heart" y de la de Webb Pierce, "There Stands The Glass", hasta perlas del Country y el Western algo menos familiares. El disco es un verdadero tributo a la genialidad de Morrison como vocalista, que puede coger una canción tan a menudo versionada como "Half As Much" grabada durante años por todo el mundo desde Hank Williams a Patsy Cline ó Emmylou Harris y arreglárselas para hacerla parecer nueva. Lo consigue porque sabe conectar con los temas intemporales de country, como el amor, la pérdida y la vida, el pecado y la salvación. Con ello Morrison demuestra ser un verdadero y sutil cantante de country en la gran tradición de George Jones. De hecho, uno de los muchos puntos culminantes de Pay The Devil es la versión que hace Morrison de "Things Have Gone To Pieces," un oscuro diamante escrito por Leon Payne que Jones hizo famoso. Luego está "What Am I Living For?" un Viejo número de Chuck Willis. Es digna de escuchar la versión que hace Morrison de la obra maestra de Rodney Crowell, "Til I Gain Control Again" uno de los derechos de autor más recientes incluidos en el disco y un enorme esfuerzo en un álbum que por otra parte, está lleno de ellos.
Están también algunas canciones originales de Morrison, entre ellas está "Playhouse", una canción astuta y contagiosa que hace que uno agradezca que el Genio del Soul haya vivido para grabarla, y la canción que le da título al álbum "Pay The Devil" una reflexión sobre cómo hacer la música del diablo, pero también un exquisito recordatorio de que "lo que es bueno para uno es veneno para otro".
Para escuchar Pay The Devil, uno debería asumir con naturalidad que Morrison ha viajado a Nashville y le ha cedido su puesto a los mejores músicos y productores de la Ciudad de la Música. Sorprendentemente, Morrison no ha hecho nada de eso ha grabado Pay The Devil en Irlanda con los mismos músicos geniales que han estado tocando con él durante años con resultados excepcionales. Más sorprendente aún, resulta que Morrison nunca haya estado en Nashville. A pesar de ello, ha hecho un álbum clásico que suena a lo mejor de Nashville y que es tan inmenso como cualquier trabajo que haya salido de esa ciudad en los últimos años.