La mirada de los niños
Pop-Rock - FlamencoFecha de publicación del disco: 10 de octubre de 2006
1.Peces De Ciudad - Joaquín Sabina
2.Fandangos - Diego el Cigala
3.Pastillas de Freno - Estopa
4.Tenerte o No Tenerte - El Hombre Gancho
5.Válgame Dios - Niña Pastori
6.Fina Estampa - Mª Dolores Pradera
7.Contigo - El Canto del Loco
8.Un Mundo Raro - Falete
9.Lo Malo Es Sin Darse Cuenta - Rosendo
10.En Donde Estés - Pereza
11.No Me Canso - Carlos Chaouen
12.Dios Te Salve, María (Salve Rociera) - Isabel Pantoja
La mirada de los niños es un disco con una historia que comienza en Santaella, un pueblo cordobés de 3.000 habitantes. A lo largo de 2005, por el pequeño escenario del Café de la Luna, en Santaella, pasaron artistas de primera. Ante no más de 180 personas, en un abarrotado café y en diferentes días cantaron Carlos Chaouen, Diego El Cigala, El Canto del Loco, El Hombre Gancho, Estopa, Falete, Isabel Pantoja, Joaquín Sabina, María Dolores Pradera, Niña Pastori, Pereza y Rosendo. Estas actuaciones se grabaron y se publican, en directo y sin ningún retoque, con un fin totalmente benéfico. Todos los artistas han cedido sus derechos para una causa solidaria: la reconstrucción de la escuela-internado mixto 9 de junio para niños saharauis, en los campamentos de refugiados de Tinduf.
En La mirada de los niños, Joaquín Sabina canta Peces de ciudad; Diego El Cigala, Fandangos; Estopa, Pastillas de freno; El Hombre Gancho, Tenerte o no tenerte; Niña Pastori, Válgame Dios; María Dolores Pradera, Fina estampa; El Canto del Loco, Contigo; Falete, Un mundo raro; Rosendo, Lo malo es sin darse cuenta; Pereza, En donde estés; Carlos Chaouen, No me canso e Isabel Pantoja cierra el álbum con la Salve rociera. Artistas y canciones que se ofrecen casi al desnudo, en acústico o con banda de acompañamiento y que tienen el atractivo de lo verdadero. En La mirada de los niños reaparece Joaquín Sabina después de dos años de silencio y retiro; María Dolores Pradera homenajea a Chabuca Granda y Falete a José Antonio Jiménez; Isabel Pantoja evoca el Rocío con su Salve; Estopa y Pereza se ofrecen con guitarras acústicas, casi en familia...
"A los ojos de cualquier europeo instalado en la tramposa sociedad del bienestar, podría decirse que en la Hamada argelina, en pleno corazón del desierto del Sáhara, no hay nada de nada", escribe Fernando Íñiguez en las notas que acompañan al álbum. Pero "donde parece que no hay de nada, los niños refugiados [...] tienen mucho más de lo que cualquiera puede imaginarse: alegría, dignidad, orgullo, el cariño de sus familias y, cuando el sol se esconde y no hay luna, las noches con más estrellas del planeta". Para ellos han cantado los artistas; para ellos.