Jack Antonoff y Pablo Cebrián, la magia y la polivalencia en la composición y producción musical
Siempre a vueltas con las emociones que transmite la música, pero ¿qué es lo más importante de todo el proceso de creación de una canción?. La excelencia es complicada, y muy pocos artistas a lo largo de la historia han sido capaces de crear una pieza de gran nivel desde la composición musical hasta la interpretación. Prince fue uno de esos grandes genios, a nivel sublime desde la elaboración, pasando por la producción y los arreglos, hasta la interpretación, como multiinstrumentista, excelente guitarrista, muy buen cantante y sensacional bailarín. Es un caso de talento extraordinario, porque la mayoría de los seres humanos necesitamos estudiar música con disciplina para alcanzar un nivel notable.
Cuando vemos una actuación musical, las características tanto físicas como personales del intérprete, su voz y la apariencia pueden llevarnos a convertirnos en fieles seguidores, pero la realidad es que hay mucho más detrás. Sam Smith es uno de los grandes cantantes de música pop del siglo 21, los temas mejoran con su voz y los matices que puede aportar. Pero es fundamental además ponerse al servicio de la composición, que creemos que es lo más meritorio de todo el proceso. Ahí fue donde destacaron los Beatles, que luego hicieron un gran equipo con George Martin en la producción. Otro ejemplo es Michael Jackson, en cuya carrera fue fundamental la figura de Quincy Jones.
Todo esto nos lleva a pensar en quiénes son los mejores productores del mundo de la música pop-rock en la actualidad, o al menos en nuestros favoritos, ya que siempre hay un componente emocional y subjetivo. Aquellos que aportan un extra a la composición y la llevan aún más allá. Aquí en LaHiguera.net pensamos que pueden ser Jack Antonoff a nivel internacional y Pablo Cebrián en España.
La magia de Jack Antonoff
En 2011 salió el 'We are young' del grupo estadounidense Fun.. Todo el mundo asoció la imagen del éxito al cantante Nathaniel Ruess, e incluso en parte a la invitada Janelle Monáe, y eclipsaron en cierta medida al mago Jack Antonoff, quien fue un factor determinante en ese hit. Pues bien, con el paso de los años se ha convertido en uno de los grandes compositores y productores de la música contemporánea. A partir de ahí creó proyectos como Bleachers y Red hearse, y ha trabajado para Lorde, Lana Del Rey, Carly Rae Jepsen, Clairo, Pink, Sia, St. Vincent... y Taylor Swift, quien acaba de publicar su nuevo álbum, Midnights, compuesto y producido mano a mano con Antonoff.
Entre sus últimos trabajos están la banda sonora de la película 'Minions: El origen de Gru', con Diana Ross, Tame Impala, Brittany Howard y Phoebe Bridgers, entre los implicados; y el álbum 'Being funny in a foreign language' del grupo británico The 1975.
Una mención especial para uno de sus grandes temas, Chinatown con Bleachers, con la colaboración de una de las grandes leyendas de la música del último medio siglo, Bruce Springsteen. Elegida como nuestra canción favorita del año 2020.
La polivalencia de Pablo Cebrián
A inicios del año 2005 se publicó 'Círculo vital', el álbum debut de Fábula, una auténtica obra maestra para un grupo que no era conocido por el gran público, detrás del que había un talento desbordante. Con letras de mucha calidad, acompañadas por unos arreglos brillantes y un cantante maravilloso. El núcleo duro estaba formado por el vocalista Iván Mur y el guitarrista y productor Pablo Cebrián. Sumaba Ismael Guijarro, quien por cierto, ha acabado siendo fundamental en el éxito de Rozalén.
Tras un segundo larga duración Cebrián decidió buscar nuevos horizontes, que le han llevado a trabajar para Pastora Soler, Sergio Dalma, Manuel Carrasco, India Martínez, Pitingo, David Bisbal y Malú, entre otros. En el proceso de producción también hay que adaptarse, y él, además de colaborar con los artistas mencionados con anterioridad, quizá más en clave de pop de raíz, ha demostrado su polivalencia con un rapero como Nach, cantautores como Marwán, Ele o Conchita, un grupo de pop más juvenil como Dvicio, o proyectos más alternativos como The proud, Tom's Cabin y Bauer. Por cierto, Pedro Guerra acaba de ser nominado al Grammy Latino en la categoría de 'mejor álbum de cantautor' por 'El viaje', un disco producido por Pablo.
El camino para cumplir objetivos
Suele haber mucho trabajo y formación detrás de cada canción de éxito, y en ocasiones incluso quizá más en otras creadas sin el objetivo de tener tanta repercusión, pero si una hondura emocional máxima. Para saber como adaptarse a cada situación se necesita una formación, porque dependiendo del objetivo hay un enfoque distinto. Por eso, si te gusta la expresión artística, anímate y visita una escuela de artes en Madrid o allá donde te encuentres. ¿Dónde estarán los próximos Jack Antonoff o Pablo Cebrián?.